La Familia y Sus Finanzas [PDF]

Zitiervorschau

LARRY BURKETT 002159

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Finanzas Principios biblicos en un mundo de crisis

EDITORIAL PORTAVOZ

Dedicado a: Título del original: Your Finances in Changing Times, de Larry Burkett, © 1975 por Christian Financial Concepts y publicado 1982 por Moody Press, Chicago, Illinois 60610. Edición en castellano: La familia y sus finanzas, ©1990 por Editorial Portavoz, filial de Kregel Publications, Grand Rapids, Michigan 49501. Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra sin la debida autorización de los editores. A menos que se indiquen al contrario, todas las citas de la Biblia son tomadas de la versión Reina-Valera Actualizada, © 1982, 1986, 1987, 1989 por Editorial Mundo Hispano. Las demás citas son de la Biblia de las Américas (BLA), C 1986 por The Lockman Foundation, y de la versión 60 de Reina-Valera (RV60), ©1960 por las Sociedades Bíblicas en América Latina Traducción: Rhode Flores Barceló Portada: Alan G. Hartman EDITORIAL PORTAVOZ Kregel Publications P. O. Box 2607 Grand Rapids, Michigan 49501 EE.UU.A. ISBN 0-8254-1098-3 4 5 6 7 edición / año 99 98 PrintedhUSasofAmeric

mi esposa ]udy, mis hijos Larry, Danny y Todd y mi hija Kimberly así como a mis queridos amigos cristianos que ayudaron a convertir este libro en una realidad gracias a sus oraciones y su ayuda económica, Charles y Edna Bearden, Greg Brezina, Bill Buck, Sid Cook, Victor Diffee, Bob Field, Hal Hayes, ]ohn Haynes, Reid Hughes, Thelma Kerr, Bob Lahr, Dave McGill, Frank McCowan, Vickie Shanahan y todos los hermanos y hermanas en Cristo a los que he olvidado mencionar, pero a los que amo de todo corazón.

Contenido Prefacio ................................................ 9 Introducción ........................................... 11

Primera Parte: La Economía 1. Cómo empiezan las economías ......................... 17 Segunda Parte: Los Principios de Dios Sobre las Finanzas 2. ¿Qué es la riqueza? .................................. 31 3. ¿Qué significa la esclavitud financiera? ................... 45 4. El plan de Dios para la libertad financiera . . . . . . . . . . . . . . . . 59 5. Cómo planear un programa financiero ................... 73 6. ¿Por qué acumular riquezas? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 85 7. ¿Cuánto es suficiente? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95 8. Compartir, la idea de Dios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 103 9. ¿Quién merece ayuda? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 111 10. Respirando desde el punto de vista financiero . . . . . . . . . . . . 117 11. Principios para tomar decisiones financieras .............. 123 Tercera Parte: Usando el Plan de Dios 12. Aplicaciones prácticas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 131

Prefacio

E steimportantes estudio de la economía cristiana es uno de los temas más que pueden ocupar en la actualidad la mente cristiana. Jesús tuvo mucho que decir acerca del dinero, de hecho, es posible que hablase más sobre este tema que sobre ningún otro. Al charlar dar consejos a miles de personas en nuestro país y por todo el muno, es evidente que la economía desempeña un papel primordial en el mundo en los asuntos de los hombres e incluso de las naciones. Hay países que surgen y otros que se esfuman todo ello por causa del dinero o la falta de él. Se desencadenan guerras por causa de la riqueza y del deseo de poseer recursos. Pero con todo y con eso, pocos cristianos parecen entender la desolación generada por el mal uso del dinero. Existen aquellos que han aceptado el plan económico de Dios como algo propio y se destacan como gigantes sobre el resto de sus hermanos, pero es más corriente el cristiano que oculta este aspecto de su vida de Dios y lucha dentro del sistema financiero del mundo. Las mismas frustraciones, preocupaciones y ansiedades que caracterizan al no creyente son comunes, tal vez, a la mayoría de los cristianos. Sin un retorno a gran escala al plan de Dios en lo que se refiere a ganar, gastar y compartir la riqueza, me temo que el mismo desastre que ha acontecido al mundo ateo le sucederá al mundo cristiano. Fuera de la voluntad de Dios no somos inmunes a las estratagemas ideadas por Satanás. Pero a pesar de ello nos hacemos vulnerables a sus golpes en el ámbito de las finanzas. Estoy personalmente convencido de que el sistema económico mundial se encuentra en un inminente peligro. En los próximos cambios que se van a producir, todo el mundo se va a ver obligado a realizar tremendos reajustes financieros. Los cristianos no podrán ya moverse entre dos aguas entre Dios y el mundo. Ya no será aceptable el cristianismo que se limita a serlo los domingos por la mañana. Aunque Dios proveerá para aquellos que se adhieran a Sus planes, las tentaciones de este mundo y las tensiones creadas

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por la necesidad de transigir hará que muchos cristianos transgredan lo que Dios ha mandado, yendo ésto en su propio perjuicio y a la postre ellos mismos lamentarán haber actuado de ese modo. Nuestro Señor nos ha mandado, a los que somos Sus hijos, "buscar primeramente el reino de Dios y su justicia" y a "hacerse tesoro en el cielo" en lugar de pretender amasar riquezas aquí en la tierra. Pero lamentablemente son muchos los cristianos que no lo han hecho y, por eso, se han perdido las bendiciones de Dios por su deseo de amasar fortuna. Me da la impresión de que a Dios se le está acabando la paciencia, al igual que sucedió en los tiempos de Noé. No está dispuesto a rmitir que escogamos una existencia que nos permita tirar por el camino en medio. Aquellos cristianos que verdaderamente busquen a Dios adoptarán Sus principios en lo que se refiere a la economía, pero aquellos que no lo hagan tendrán que padecer Su castigo como no ha sucedido hasta ahora, ya que Dios quitará a los malos administradores sus recursos, tal y como se nos dice en Mateo 25 y se los dará a aquellos que los sepan administrar con sabiduría. Nadie es inmune a las tentaciones y a las dificultades financieras. Por eso es por lo que yo me complazco en respaldar este estudio para todos aquellos cristianos que se han entregado de verdad a Dios y están buscando Su sabiduría. Estos principios se han verificado como solamente el Espíritu de Dios es capaz de hacerlo: mediante las vidas transformadas de aquellos cristianos que los han aplicado a sus vidas. Hay cientos de miles de cristianos sinceros y dedicados que se han visto víctimas de la trampa que les ha tendido Satanás y que un día se han visto libres, económicamente hablando, al aplicar el plan de Dios que se detalla a lo largo de todo este libro. Lo que presentamos en este libro es nada mas y nada menos que el plan financiero de Dios y es mi opinión que se ha escrito con diligencia, aplicando las referencias que se hacen sobre él en la Palabra de Dios, aplicándolas a cada uno de los conceptos que se exponen. Por este motivo, este libro es un libro que deberían de leer todos aquellos cristianos que buscar una vida de máxima realización en nuestro Señor. BILL BRIGHT

Introducción

E 1enpropósito de este libro es ayudar a aclarar la perspectiva de Dios lo que se refiere a las finanzas. Durante demasiado tiempo hemos permitido que otras personas ejerciesen una influencia sobre lo que pensamos, lo que sentimos y lo que creemos acerca del dinero. Me da la impresión de que hemos perdido de vista el punto de referencia a la hora de entender por qué tenemos dinero y lo que debemos de hacer con él. A lo largo de todo este libro, nos vamos a concentrar sobre lo que dice Dios sobre cómo manejar el dinero. En el pasado, el estudio de este tema en concreto ha sido uno al cual han venido haciendo caso omiso la mayoría de las organizaciones cristianas y las personas en general, introduciéndose muchos falsos conceptos en cuanto al dinero y el cristianismo. Las personas oyen decir: "el dinero es la raíz de todos los males" y están totalmente convencidas de que eso procede de las Escrituras, pero no es así. Hay personas que piensan que la pobreza es inherentemente espiritual o que el dinero es, por naturaleza, algo malo, pero ninguna de estas ideas es cierta, ya que esas actitudes proceden de los hombres y no de Dios. Los cristianos son, en realidad, víctimas de uno de los argumentos más engañosos que Satanás ha ideado jamás, que el dinero nos pertenece a nosotros y no a Dios, cuando lo cierto es que todo lo que tenemos le pertenece a Él, incluyendo nuestro dinero y Dios desea utilizarlo para guiar nuestras vidas. Por medio de este estudio examinaremos muchos pasajes de las Escrituras que tratan acerca del tema del dinero. Resulta fácil determinar la importancia que tiene el dinero en el plan de Dios a juzgar por la gran cantidad de versículos en los que se menciona el tema: habiendo más de setecientos versículos que tratan sobre el manejar del dinero. Con frecuencia se malinterpretan muchas de estas referencias, dando por hecho que se refieren a un principio espiritual que no está directamente relacionado con el dinero. Eso no es totalmente equivocado, porque

La familia y susf inanzas

Introducción

con frecuencia la Palabra de Dios contiene más de una lección. Pero lo que debemos de hacer siempre es buscar primeramente el signifi u ado más sencillo. Cuando Dios habla acerca del dinero, quiere decir dinero. Cuando habla acerca de multiplicar los bienes, se refiere a multiplicar los bienes económicos. Cuando se refiere a los males de firmar conjuntamente, se refiere precisamente a eso y no a otra cosa.

estamos despiertos nos lo pasamos pensando en cómo ganarlo, cómo ahorrarlo y cómo gastarlo. El dinero es un tema tan importante que se puede decir que casi dos tercios de las parábolas de jesús tratan acerca del uso y el manejo del dinero. Eso por si solo debería de mostrarnos lo importante que es que entendamos cuál es el plan que Dios tiene con respecto a nuestras finanzas.

Buscando la respuesta

Contenido Durante el curso de este estudio expondremos muchos aspectos que darán pie a la controversia, de manera que es posible que algunos de vosotros estéis de acuerdo con ellos, mientras que otros no lo estarán. Pero lo cierto es que ya no están puestos a prueba los rincipios de Dios acerca de la economía, ya que a lo largo de los años an demostrado que son ciertos. No dependen de las finanzas o de la cantidad que tengamos o no tengamos. Los principios de Dios dependen sencillamente de que obedezcamos a Su voluntad y que pongamos ese aspecto de nuestra vida también en Sus manos. Hablaremos acerca de algunos aspectos actuales de las finanzas como uedan ser el seguro, sus influencias y las inversiones, así como las diversas ormas de crédito y cómo se utilizan. Algunos de estos aspectos requerirán una interpretación, pero dicha interpretación se basará en un punto de vista escritural dondequiera que se utilice. Animamos al lector a que estudie esos pasajes de las Escrituras y a que compruebe por sí mismo los principios a que se aplican. Este libro tiene como fin servir de guía de referencia completa sobre las finanzas cristianas y contiene importantes conceptos sobre los cuales poder crear todo un progr ama económico. Esos principios deberán resultar tan familiares para el lector como su propio número de teléfono. De manera que cada vez que tenga que tomar una decisión financiera, le sirvan para darse cuenta de si está, efectivamente, manejando el dinero que tiene de la manera que Dios desearía que lo hiciese.

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En los círculos cristianos, casi todo lo que oímos acerca del dinero trata del tema de compartir y darlo y por qué Dios dice que debemos de hacerlo. Es evidente que el compartir forma parte del plan que Dios tiene para nosotros, pero no es ahí donde Dios comienza, ya que lo que Él más desea de nosotros es nuestra entrega espiritual. Una vez que lo hayamos hecho, Dios desea dirigir la manera en que ganamos, gastamos, ahorramos, invertimos y compartimos el dinero que Él nos suple. En este libro vamos a tratar temas como: • ¿Cómo debemos ganar el dinero? • ¿De qué manera afecta el dinero las actitudes? • ¿De qué forma afecta el dinero a nuestras familias? • ¿Debemos ahorrarlo o es preciso que regalemos el dinero? • ¿Es correcto que un cristiano tenga un seguro? • ¿Es mejor tener una casa en propiedad o alquilarla? • ¿Puede el cristiano ser rico o es mejor que sea pobre? Trataremos cada uno de estos temas desde la perpectiva de Dios. Aplicación El énfasis de todo este estudio es la aplicación en lugar de la información. Estoy sinceramente convencido de que una vez que los cristianos hayan sido educados sobre el plan que Dios tiene con respecto a su situación financiera, encontrarán una libertad que jamás han podido disfrutar con anterioridad. Para aquellas ersonas que se dedican a ganar dinero, cosa que hacemos la mayoría de nosotros, el ochenta por ciento de las horas que

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La economía En toda nuestra sociedad, especialmente en los círculos profanos de los negocios, la discusión se centra alrededor de la economía y la posibilidad de un futuro colapso. La mayoria de los economistas creen que aunque habrá algunos altibajos temporales, nuestra economía padece, en general, una enfermedad incurable. Vamos a hablar acerca de ese mal que la aqueja, de cómo lo entendemos y acerca de cómo podemos ser parte de la solución en lugar de ser parte del problema. Hay muchas señales que predicen un desastre económico, cuya severidad se ha evaluado a partir de una depresión, que es un prolongado retraso económico, que lleva a un colapso, lo cual implica una parada en

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seco en nuestra economía. Es difícil saber hasta qué punto estas opiniones son fidedign as, pero al hacer un repaso de nuestra economía, iremos estudiando uno de sus as tos. Un hecho sí está perfectamente claro: nos enfrentamos con terribles crisis económicas y sociales. Hay datos procedentes de todas las secciones de la sociedad que apoyan este hecho y es evidente que los cristianos que viven aparte del plan de Dios van a sufrir innecesariamente.

PRIMERA PARTE

La Economía

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Cómo Empiezan las Economías os tiempos están cambiando rápidamente y aquellos principios L económicos establecidos desde hace tantísimo tiempo se están disolviendo y cada día surgen nuevas teorías. Los antiguos economistas "clásicos" menean la cabeza al descubrir que no entienden ya lo que está sucediendo, plenamente conscientes de que las técnicas "tradicionales" para restaurar la economía no funcionan ya. Las ideas tras el empuje a los precios y la demanda de esos precios ya no tienen validez porque todos nos damos cuenta de que los precios pueden seguir subiendo a pesar de que la producción esté en declive. El empleo está en decadencia en un segmento de la economía mientras que los salarios suben en otro. ¿A qué es debida esta situación? ¿Qué podemos esperar en el futuro?

Actitudes y acciones

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Con harta frecuencia reaccionamos frente a acontecimientos a nuestro alrededor que no acertamos a comprender, no sabiendo lo que está pasando en realidad ni por qué. La norma es una reacción exagerada y prácticamente en cualquier crisis la secuencia de acontecimientos se puede predecir. Se produce la alarma, hay un pánico temporal, luego la apatía y la falta de interés. Todos tenemos tendencia a contemplar el futuro con ansiedad y preocupación. Pero Dios nos dice que la preocupación es un pecado. ¿Qué es la preocupación? Es apropiarnos de una responsabilidad que en realidad le pertenece a otro. Al contrario de lo que le sucede a la mayor parte de la población (que no viven en armonía con el plan económico de Dios) no tenemos que preocuarnos por nuestras circumstancias. Dios ha revelado en Su Palabra lo que E a sucedido y lo que va a pasar. Hay algunas partes de la Biblia que son

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historia y otras que se refieren a acontecimientos actuales, así como otras que son roféticas. A lo largo de su Palabra Dios nos dice qué podemos esperar de la economía y cómo debemos responder. He dicho responder en lugar de reaccionar. Cuando respondemos a algo aceptamos la información, comprobándola con valores que conocemos y actuando conforme a esa información. Pero cuando reaccionamos a algo, lo aceptamos, ampliamos lo que recibimos y lo exteriorizamos de nuevo, y no es eso lo que Dios quiere para nosotros. Al echar un vistazo a la economía actual y ver hacia donde puede dirigirse en el futuro, es preciso que la contemplemos desde la perspectiva de Dios. La parte más importante de esa perspectiva es la vuelta inminente de Cristo. Cuando oimos decir que es posible que Cristo vuelva durante nuestro tiempo, estamos diciendo que es algo que creemos. Pero cuando el plan de Dios comienza a desvelarse hay muchas personas que se niegan a aceptarlo. Al parecer, reaccionamos de la misma manera que lo hicieron los cristianos rimitivos en Hechos 1 9 Pedro acababa de ser encarcelado y le iban a ejecutar. Los cristianos que viajaban con él se habían ido a su casará orar. Se pasaron toda una tarde orando a Dios y pidiéndole que liberase a Pedro sin que sufriese ningún mal. Entonces Dios hizo un milagro v Pedro salió de la cárcel, quedando libre. Se marchó a donde estaban reunidos un pequeno grupo de cristianos orando y llamó a la puerta. Una muchacha abrió y se encontró con Pedro. Se quedó tan tremendamente sorprendida al verle que salió apresuradamente para decirle al grupo: "¡Venid rápidamente, Pedro está a la puerta!" ¿Y qué es lo que hicieron aquellas personas? Se burlaron de ella. "No es posible que Pedro esté aquí' le dijeron. "Estamos orando r él porque está en la cárcel." Pero con todo y con eso, cierto es que Pedro estaba allí. Ellos habían orado, pidiendo que sucediese un milagro y Dios les había concedido lo que habían pedido en oración, pero ellos no tenían suficiente fe como para creérselo. En algunas ocasiones nosotros nos portamos igual que ellos. Decimos que creemos que la segunda venida está cercana, pero al ver las señales inminentes, incluyendo el pulso cambiante de la economía, nos negamos a aceptarlo.

Cómo empiezan las economías

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La economía Aislando la economía de cualquier otro acontecimiento, un observador prudente diría que tenemos un problema. Fíjate que la economía de los Estados Unidos y la del resto del mundo es muy inestable. El valor del dólar norteamericano se está cogiendo en el mercado mundial. Por consiguiente, la ma oría de los países que han dependido en el pasado de nuestra estabilidad se encuentran rácticamente en la bancarrota. El equilibrio económico se ha tras = al monopolio del Oriente Medio, donde en la actualidad se necesita poco dinero. ¿Qué significa todo esto? ¿A dónde nos dirigimos? Es evidente que la inflación está yendo en aumento. En los últimos años ha aumentado de una manera alarmante, mientras que la verdadera producción ha descendido. La mayoría de las industrias importantes han adoptado una actitud de conservación propia, algunas hasta el borde mismo del desastre. Los precios siguen subiendo desmesuradamente mientras que la verdadera producción se deteriora. De este modo ha surgido un nuevo término, " la recesión inflacionaria" (es decir, que los precios aumentan mientras que la producción desciende). La recesión inflacionaria no es nueva en la economía del mundo, pero sí que es única en los Estados Unidos. Durante años vigilamos nuestros controles fiscales creyendo que no podía suceder aquí, creyendo que se podía detener la inflación sencillamente reduciendo el suministro de dinero y controlar la recesión por medio de la técnica contraria. Pero esto ya no es verdad. Si comenzamos un período de inflación y empezamos a controlar el suministro de dinero, inmediatamente el dinero produce una recesión. Y para poder salir de esa situación, es preciso invadir el mercado con dinero adicional lo cual, a su vez, alimenta aún más las llamas de la inflación. Curso de la economía Estos acontecimientos debería alarmar a las personas que tienen que tomar decisiones en el terreno económico porque verifican que esos controles, a los que tanta publicidad se les ha hecho, no sirven para nada. El curso hacia el colapso económico, con una inflación que se desborda seguida de una depresión enorme, parece algo irreversible. La falta disciplina fiscal y una buena dirección son en arte responsables de esta tendencia. Estas incapacidades son un reflejo de un sistema económico creado por popularidad. Los políticos que toman decisiones

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que se basan mas bien en lo que goza de la popularidad, en lugar de sobre lo que resulta económicamente solventes nos han dejado prácticamente en la bancarrota. Resulta difícil visualizar el ambiente político que se necesita para invertir este curso. En lugar de buscar una solución factible a nuestros problemas, los oficiales del gobierno se valen de evasivas y se preocupan más bien del grupo que debe recibir más cosas gratis. Conceden apoyos en los precios a un grupo, beneficios de paro a otro, y donativos a personas que no se los merecen. Un año conceden una subvención a un lugar de recreo del esquí en el noreste del país debido a que no han tenido suficiente nieve y luego apoyan a las playas en el sur porque ha llovido demasiado. Pagan a las personas para que no cosechen roductos durante un tiempo de escasez, aplican apoyos a los precios de os alimentos cuando empiezan a bajar y encima se quejan de que se ha producido una inflación imparable en lo que se refiere a estos mismos productos. El Sistema de Reserva Federal retira el crédito a industrias que son lucrativas, protestando que deberían ser más independiente sin el crédito, cuando durante cuarenta años el sistema ha estado promoviendo el crédito. Tampoco se puede decir que el americano medio sea inocente y la mayoría de las familias viven en la actualidad en los Estados Unidos al borde del desastre. El uso excesivo del crédito personal y en los negocios no ha hecho otra cosa que debilitar la estructura familiar que ya se tambalea y todos estos factores contribuyen a que tengamos una economía casi incontrolable. Entendiendo la economía actual A fin de poder entender dónde se encuentra nuestra economía, es preciso entend er qué es la economía. Volvamos atrás en el tiempo y veamos de qué manera comienza a existir la economía. Si echamos un vistazo al pasado, nos encontraremos con que las personas eran básicamente comerciantes, en el sentido de que vivían haciendo cambalaches. A menos que se pudieran plantar en una huerta todos los productos necesarios, era necesario que los vecinos se intercambiasen los productos. Digamos, por ejemplo, que tres personas viviesen en una pequeña comunidad. Una de ellas tendría vacas, la segunda se dedicaba a lantar maíz, trigo y cebada y la tercera se dedicaba a fabricar herraduras y c avos. El lechero decidió que le gustaría edificar un granero para sus vacas. Tenía madera de sobra en su propiedad, pudiendo talar sus árboles y almacenar la madera hasta que estuviese seca y lista para ser utilizada, pero estaba cansado de poner espigas de madera para colocar sus edificios, ya

No tardaron otras personas en acudir al herrero para cambiar sus productos por clavos.

Volvió a casa del herrero con el fin de hacer un cambio y conseguir más clavos.

Perplejo por la negativa del herrero, el lechero fue a su vecino el granjero buscando ayuda. ¡ Entonces se le ocurrió una idea al herrero! ¿Por qué hacer herraduras y otras cosas? Los clavos parecían un buen negocio, de modo que se especializaría en hacer clavos solamente!

Cambiando su vaca por un poco de maíz el lechero volvió a casa del herrero. El lechero reparó su casa y empezó a hacer propaganda a las virtudes de utilizar clavos.

Al ir habiendo cada vez más personas que utilizaban clavos, Daniel tuvo un negocio floreciente. Todo el mundo quería darle algo a cambio dé sus clavos. Entonces los clavos se convirtieron en lo que nosotros conocemos como "dinero". Es preciso que el dinero, en cualquier sistema, satisfaga tres funciones básicas: debe tener un valor, debe poder almacenarse y debe ser divisible. Los clavos de Daniel satisfacían cada uno de estas condiciones, de modo que los utilizaron como dinero.

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Hacía varios meses que Daniel había comenzado su negocio cuando llegó un granjero con un gran pedido.

Cómo empiezan las economías

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Daniel comenzó a darse cuenta de que la mayor parte de los clavos permanecían en su almacén. A pesar de pertenecer a otras personas, siempre tenía clavos de sobra.

Comenzó a pensar: "¿Por qué voy a tener aquí esos M77 sin hacer nada? No tiene sentido hacer más cuando tengo todos estos aquí." Cuando Daniel escribió en un papel que tenía 100 sacos de clavos a mano para el granjero, se estableció un nuevo medio de intercambio: el dinero de Este dinero de papel debía de satisfacer las mismas funciones básicas que nuestro dinero original para recibir el nombre de dinero y así fue. No se creó nada nuevo mediante este dinero de papel, ya que sencillamente representaba los clavos que estaban almacena os.

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Entonces, un buen día un granjero necesitaba clavos, pero no podía pagarlos en ese mismo momento. De manera que Daniel le prestó algunos clavos, para que los pagase más adelante. La distribución de dinero de papel continuó en lugar de utilizarse los clavos pues más y más personas descubrieron que era más sencillo llevar pedazos de papel en lugar de llevar clavos. Pero en esta ocasión, en lugar de hacer nuevos clavos, emitió un papel sobre los clavos que se encontraban en su almacen. ¿En qué se había convertido Dan? ¡En un banquero! Almacenó dinero (clavos) para algunas personas y se los prestó a otros.

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Dan había creado otra clase nueva de dinero, el crédito. El crédito parecía una buena cosa. Sin darse ni siquiera cuenta, otras personas pudieron utilizar el crédito para poder construir casas y graneros. El negocio de Daniel prosperó mediante el uso del crédito, que concedió a otras personas sobre su dinero.

Lamentablemente, a fin de que su negocio siguiese aumentando, Daniel se vio obligado a ampliar más y más el crédito. Pero un día llegó un depositario ara recoger un pedido voluminoso de clavos que se suponía que Daniel tenía reservado.

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Rápidamente los granjeros convocaron una reunión para comparar los recibos de clavos que tenían. A uno de ellos le debía 1000 sacos, a otro 500, etc. ¡ Era evidente que algo no funcionaba bien! De modo que todos se dirigieron hacia el banco de Daniel para pedir que les devolviesen sus clavos.

¿Qué sucedió? Pues que Daniel se quedó en la bancarrota. ¿Por qué? El crédito fue su desgracia. Cuando sus depositario perdieron la confianza en él, Daniel dejó de ser un banquero. Había prestado demasiados clavos que pertenecían a otras personas. Lo que pasa es que aunque el crédito se parece al dinero, en realidad no lo es. El crédito se puede almacenar y se puede dividir, pero le falta un elemento que es esencial: el valor. No cuesta nada crear el crédito. Como veremos más adelante, esta misma dificultad ha surgido también en la economía. Los gobiernos, que representan el papel de banqueros del mundo, han concedido crédito hasta que ha llegado el momento en que muy pocas personas creen que puedan verdaderamente pagar sus deudas.

SEGUNDA PARTE

Los Princi ios de Dios Sobre as Finanzas

2 Qué Es la Riqueza? CAPÍTULO

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esde los tiempos de la creación, el hombre ha sido víctima de su propia avaricia y de no ser capaz de obedecer a Dios. En el huerto del Edén, Adán y Eva desobedecieron a Dios y fueron echados, teniendo que ganarse la vida. En Génesis 3:19 Dios dice: "Con el sudor de tu frente". Hasta el momento en que regrese Cristo, el hombre tendrá que ocuparse de adquirir y de administrar sus posesiones. La mayoría de las tensiones individuales, de los roces que surgen en las familias, de las luchas, la ira y la frustración tienen su causa, ya sea directa o indirecta, en el dinero. Pero para el cristiano que se esfuerza en buscar lo mejor que Dios le ofrece, Él ha establecido unos principios básicos para la administración de las posesiones. De la misma manera que el cristiano no puede experimentar la plenitud del Espíritu Santo hasta que entrega la posesión de su vida a Cristo, sucede que tampoco puede tener paz en el aspecto de la economía hasta que haya entregado el control absoluto de este aspecto de su vida a Dios y aceptado su posición como mayordomo. Un mayordomo es sencillamente uno que administra los recursos que pertenecen a otra persona. Cada uno de nosotros somos encargados y no dueños. Dios es el dueño y nosotros debemos administrar, conforme al plan de Dios. Todas las promesas que Él ha hecho con respecto a Sus bendiciones en este sentido, dependen de un principio: que estemos dispuestos a ceder la propiedad. El cristiano que se niega a hacerlo no podrá nunca disfrutar del plan que Dios tiene para sus finanzas. Como consecuencia de ello, su vida se verá caracterizada siempre por las confusiones y la ansiedad en el aspecto económico. Riqueza-actitud-Dios ¿Qué es la riqueza o el dinero? ¿Cuál es la actitud indicada en lo que se refiere a la riqueza? ¿De qué forma se expresa la voluntad de Dios en el aspecto de la economía?

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¿Qué es la riqueza?

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riqueza también puede corromper, se puede utilizar para comprar la influencia, para sobornos, negocios ilegales, o para comprar pistolas y bombas. Para el cristiano, la riqueza es todo aquello que Dios nos confía. Desde el punto de vista del mundo, el conseguir la riqueza es algo que gira alrededor de muchas cosas, incluyendo la obstinación, el dominio de uno mismo y fuerza de voluntad que pueda tener la persona para dedicarse a ganar dinero. Como veremos más adelante, esa no es la perspectiva de Dios porque, en cada caso, aquellas personas que se han pasado toda la vida buscando la riqueza acaban sintiéndose frustradas y desgraciadas. No acaban nunca de entender por qué tienen el dinero y al ir aproximándose el momento de su muerte, se dan cuenta de lo insignificante que era el deseo de obtener la riqueza. Hay muchas conceptos erróneos que giran alrededor de lo que significa ¿Qué es la riqueza? ' hacerse rico. Algunas de ellas afirman: Las civilizaciones del pasado muestran que la riqueza se ha basado con • Hay que tener m~ para avanzar. La persona que más suerte tenga frecuencia en el número de ganado o de camellos que poseían las persoo que disfrute de más influencia es "la persona que logra abrirse nas, la tierra que les pertenecía, el aceite, y muchas otras posesiones matecamino y avanzar en esta vida." riales. En los principios de la economía de los Estados Unidos, la riqueza se relacionaba con la cantidad de tierra que poseían las personas. Más adelan• Hay que tener dinero para hacer dinero. En otras palabras, los ricos te, la riqueza tenía que ver con recursos como puedan ser el oro, la plata u se hacen cada día más ricos. otros elementos naturales de la tierra. Y durante la revolución industrial • En la actualidad no se puede ser muy honesto y conseguir avanzar en tenía que ver con lo mucho que se había acumulado en bienes materiales, la vida. ¿por qué? Porque hay que estar dispuesto a ocultar la verdad. principalmente el dinero. Si eres demasiado honesto con los demás, no podrás tratar con el En la economía de nuestros días, la riqueza sigue relacionándose con el sistema de este mundo. dinero, pero la posición también es una medida de la riqueza. Se considera Ninguno de estos son los rinci ios establecidos por Dios. Son sena los hombres profesionales, como puedan ser los médicos, los abogados, los dentistas y otros como "ricos" por el potencial que tienen para ganar cillamente tonterías que mean las personas que intentan explicar dinero. racionalmente su comportamiento. El ser capaces de crear riqueza es Por ejemplo, un médico que acaba de obtener su residencia como tal, al mismo tiempo un don y un talento. Para algunos, es más sencillo que para otros conseguir la riqueza. Pero es posible para cualquiera puede pedir un préstamo por grandes cantidades de dinero para comenzar ue esté dispuesto a sacrificarse y conseguir lo que se propone fijánsu negocio como médico, sin ninguna otra garantía que la de sus estudios. y alcanzando unas metas. En qué se basa su crédito? En su capacidad para producir. Por lo tanto, dose No estoy, ni mucho menos, sugiriendo que eso sea bueno, porque como asta los talentos y habilidades que poseemos forman parte de nuestra veremos en el plan de Dios, es la actitud y no la aptitud lo que Él honra El riqueza, como lo es nuestro crédito o nuestra capacidad para que nos presten dinero. tener como fin conseguir la riqueza es una inversión miserable de una vida. Porque, primero, requiere muchísimo tiempo, excluyendo todo prácticamente, incluyendo la familia, las amistades, los hobbies y el descanso. Creación y uso de la riqueza En segundo lugar, no existe correlación alguna entre la riqueza y la Recuerdo una historia acerca del principal de los contables de uno de los hombres más ricos que jamás han existido, John D. Rockefeller, Sr. Alguien le preguntó al contable: "¿Cuánto dejó John D.? Sabemos que fue un hombre inmensamente rico." Y el contable respondió: "Todo." Dios desea que recordemos que todos dejamos todo. El libro de Eclesiastés trata acerca de la mayordomía y de un principio que Salomón encontró válido, sea cual sea la ición del hombre, ya que el hombre nada acumula. Porque a la hora de muerte la verdad es que la riqueza y las posesiones de cada individuo no son nada. Al leer lo que nos dice el Nuevo Testamento, vemos que Dios nos aconseja: "No acumuléis para vosotros tesoros en la tierra ... más bien, acumulad para vosotros tesoros en el cielo" (Mateo 6:19, 20).

Según cuál sea nuestra actitud, nuestra riqueza puede resultar creativa, pues la podemos utilizar para difundir la Palabra de Dios, construir hospitales e iglesias, alimentar a los pobres o cuidar de los huérfanos. O la podemos derrochar, gastando nuestro dinero en actividades frívolas, en vivir de una manera espléndida, en apuestas o en cualquier otra actividad insensata. La

felicidad. Esa es una clave importante! Hay muchos cristianos que se sienten interiormente molestos po r la prosperidad de los que no son cristianos. Pero a pesar de ello debemos reconocer que Satanás es el príncipe de este mundo y lo cierto es que sería un mal recluta si reclutase solamente a los pobres.

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Lafamilia y sus finanzas

¿Qué es la riqueza?

Pero existe una gran diferencia entre Dios y Satanás en lo que se refiere a nuestras finanzas. "La bendición del Señor es la que enriquece, y Él no añade tristeza con ella" (Proverbios 10:22). Esto establece el fundamento para el resto de nuestro estudio: cómo tener riquezas, sin preocupación (la riqueza es todo lo que poseemos: nuestro dinero, nuestra familia, nuestra habilidad creadora, todo lo que hemos adquirido desde que llegamos y todo lo que tendremos que abandonar cuando nos vayamos). Por lo tanto, debemos recordar que el dinero es algo temporal. Para Dios la importancia del dinero es que durante este corto tiempo que nos toca vivir, El desea utilizarlo para ayudar a decidir nuestra utilidad para Él para toda la eternidad. Nuestra entrega a la Palabra de Dios aquí en el mundo será proporcional a nuestro uso del dinero. Segunda Pedro 3:11(BLA) dice: `Puesto que todas estas cosas han de ser destruidas de esta manera, ¡qué clase de personas no debéis ser vosotros en santa conducta y en piedad!"

Las tradiciones

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Actitud acerca de la riqueza ¿Cuál es, pues, la actitud correcta del cristiano en lo que se refiere a las riquezas? Buscar el propósito de Dios en lo que Él le ha suplido. Es importante para el cristiano confiar en Dios en todas las circunstancias. Si creemos que Dios nos ama de verdad y que nos dará solamente la cantidad de dinero que considere que somos capaces de manejar sin preocupaciones, podemos tener una perfecta paz en el aspecto económico. Pero eso no sucederá hasta el momento en que le entreguemos a Él todos nuestros recursos. Queda perfectamente claro que el dinero es un terreno de entrenamiento para que Dios lo desarrolle (y para que nosotros descubramos) nuestra confianza "si no habéis sido fieles en el uso de las riquezas injustas, ¿quién os confiará las riquezas verdaderas?" (Lucas 16:11, B LA). ¿Por qué les cuesta tanto trabajo a los cristianos confiar en Dios en este aspecto? Tal vez sea porque no estemos totalmente convencidos de que Él hará lo que sea mejor para nosotros. De modo que tenemos tendencia a quedarnos con una parte de lo que tenemos. Pero lo cierto es que hasta que el cristiano no ha experimentado la libertad en el aspecto económico, nunca podrá disfrutar del plan completo que Dios tiene para su vida.

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A fin de disipar algunas de las tradiciones religiosas que existen con respecto al dinero, examinemos cada uno de los mitos y a continuación charlemos sobre la actitud que Dios desea que adoptemos. 1. Hay una antigua tradición que sugiere que la pobreza es prácticamente sinónima de la espiritualidad. ¡Incorrecto! Hay personas pobres que son tan deshonestas como los ricos deshonestos. Echemos un vistazo a lo que dicen las Escrituras. Dios nunca hizo a nadie pobre por causa de su espiritualidad. Incluso en el caso de Job, Dios permitió que perdiese toda su riqueza como testimonio de Su amor. Cuando Job permaneció fiel a Dios, le devolvió su riqueza por duplicado. Dios no relaciona jamás la espiritualidad con la pobreza y, por lo tanto, no hay manera de que ningún cristiano alcance la espiritualidad volviéndose él o a toda su familia pobre. Lo que sí podemos decir es que Dios está totalmente en contra del mal uso que se hace con respecto a la preocupación por el dinero, no el dinero r sí mismo. En las Escrituras, Dios se refiere al hecho de producir ero como un don espiritual. En Romanos 12:5-8 se describe el don de saber dar. Evidentemente, si existe el don de dar tiene antes que existir el de recoger, porque de lo contrario no es posible dar. En cada una de las referencias de la Biblia, Dios promete que de la misma manera que nosotros damos, nos será dado a nosotros. 2. Otro de los mitos es el dinero da lafelicidad. No hay relación alguna entre el dinero y la felicidad. "A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas sino en Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos" (1 Timoteo 6:17, RV60). Si es cierto que las riquezas dan la felicidad, entonces los ricos de este mundo deberían de ser los más satisfechos. Pero, contrariamente a eso, nos encontramos con que muchos de los ricos se sienten frustrados. Sienten grandes ansiedades en lo que se refiere a lo que pueden hacer con su dinero, cómo podrán dejárselo a sus hijos, y el efecto que tendrá. Y lo lamentable es que pocos son los hijos que ap recian de verdad la riqueza que sus familiares les dejan. La mayoría de ellos, por haber crecido en medio de la opulencia, son testigos de los efectos que los excesos de dinero utilizados de una manera insensata puede tener sobre una familia. 3. Ser rico es pecado. También eso es mentira. El tener dinero no es un pecado. De hecho, sucede que en muchas ocasiones si Dios se encuentra con una persona que tiene la debida actitud, le bendice con grandes riquezas. Cuando Dios le concedió andes riquezas a Abraham, no era su intención corromper a la nación de Israel. Y cuando Salomón oró pidiendo a Dios sabiduría para saber dirigir a la nación de Israel, Dios respondió concediéndole sabiduría y una gran riqueza. El Salmo 8:6 (BLA) nos dice: "Tú le haces señorear sobre las obras de tus manos". Esa es la mayordomía de Dios, que nos concede sobre todo cuanto está en la tierra.

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4. El dinero es la raíz de todos los males. Muchas personas están convencidas de que esta cita equivocada procede de las Escrituras. Dicen: "No sé exactamente dónde, pero sé que la Biblia dice que el dinero es la raíz de todos los males." Eso no es, ni mucho menos, lo que dice la Biblia. Pablo dice en 1 Timoteo 6:10 (BLA): "La raíz de todos los males es el amor al dinero, por el cual, codiciándolo algunos, se extraviaron de la fe y se torturaron con muchos dolores." Esa es la perspectiva de Dios; el amor al dinero es la raíz de toda clase de males. Cristo relaciona esta actitud con el joven gobernador rico. Se presentó ante Jesús y dijo: "Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le respondió: ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios. Tú sabes los mandamientos: No cometas adulterio, no mates, no hurtas, no des falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre. Y él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. Cuando Jesús, oyó esto, le dijo: Te falta todavía una cosa: vende todo 10 que tienes y reparte entre y los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven, sígueme" (Lucas 18:18-22, BLA). Este joven se alejó entristecido, porque era inmensamente rico. Y Cristo dijo: "Qué difícil es que entren en el reino de Dios los que tienen riquezas" (Lucas 18:24, BLA). ¿Por qué? Porque Cristo sabía que en el fondo este hombre amaba su dinero. Había guardado todos los mandamientos externos, pero no le era posible mantener como era debida esa actitud exterior. Debido a ello, Cristo le pidió que vendiese todo lo que tenía y le siguiese. Él se negó a hacerlo, pero a pesar de ello a la hora de la muerte tuvo que dejar todo aquello que en la vida se había negado a abandonar. A Dios le interesa siempre nuestra actitud. Lo que Cristo le dijo al joven rico tenía que ver con la actitud de aquel hombre, con su motivación y el propósito tras su dinero. quémanersxpl ¿De voluntad de Dios en las finanzas? La clave para que se cumpla la voluntad de Dios en las finanzas es el entender cómo es debido lo que significa la mayordomía. Lamentablemente, este término se ha venido utilizando tan mal que la mayoría de las personas en nuestros días están convencidas de que la mayordomía se aplica tan sólo a las actividades relacionadas con el levantar fondos. Como ya hemos definido con anterioridad, un mayordomo es sencillamente la rsona encargada de administrar la propiedad que pertenece a otro. Por tanto, nosotros no somos otra cosa que mayordomos de la propiedad de Dios mientras nos encontremos aquí en la tierra y por ello Dios puede escoger el confiarnos tan pooo o tanto como le plazca, pero en ningún caso se puede decir que nosotros seamos los dueños de nada. Cuando lo hacemos, la verdad es que estamos dependiendo de lo que Satanás nos puede

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suplir o lo que nosotros somos capaces de conseguir por medio de nuestra obstinación. Una vez que un cristiano haya aceptado su papel como mayordomo y sepa administrar los recursos d e Dios conforme a Su dirección, Él nos confiará cada vez más. Pero ¿por qué motivo iba Dios a confiar propiedad a una persona que sepa que va a acumularla y que además tiene la idea de que l e pertenece? Dios no impone Su voluntad sobre nosotros. Un versículo que se relaciona directamente con la actitud de Dios se encuentra en el libro de Proverbios (28:26) donde se nos dice: "El que confía en su propio corazón es un necio, pero el que anda con sabiduría será librado". Dios está mirando sobre toda la tierra y buscando a hombres que tienen la debida actitud en lo que se refiere al dinero y que estén dispuestos a utilizarlo según Su dirección y no conforme a sus propios intereses. Cada una de las parábolas que Cristo nos dejó acerca del dinero nos dice muchas cosas sobre la actitud que Él desea de nosotros. La parábola de los talentos rebosa de sabiduría (en Mateo 25:14-30, resumido): El amo se iba a marchar de viaje y llamó a tres de sus sirvientes y les dijo: "Voy a emprender un largo viaje y os voy a confiar unas sumas de dinero que vosotros debéis utilizar en mi nombre". Al primero le dio cinco talentos, al segundo le dio dos y al tercero le dio uno, cada uno conforme a su propia habilidad. (Fíjate que no dio lo mismo a todo el mundo, sino que les dio conforme a su habilidad fisica y mundana.) Inmediatamente, una vez que se hubo marchado el amo, el primero tomó los cinco talentos, los invirtió y no tardó en ganar otros cinco más. El segundo, el que tenía los dos talentos, los sacó y los invirtió y tampoco tardó en ganarse otros dos. Pero aquel al que le habían dado solamente un talento sabiendo que su amo era un hombre duro, lo envolvió en un pañuelo y lo enterró en la tierra. Poco tiempo después regresó el amo y mandó llamar a sus tres siervos. Le habló al rimero diciendo: "¿Cómo te fueron las cosas?" El primero le contestó: "Me ha ido bien, amo; he tomado tus cinco talentos y con ellos he obtenido cinco más". Entonces el amo le dijo: "Bien hecho; has sido un siervo bueno y fiel con las cosas que te he confiado y entrarás en mi gozo". Entonces el que había tenido dos talentos se le acercó y le dijo: "Amo,

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me diste dos y te he ganado otros dos. El amo le dijo: "Muy bien. También tú has sido fiel. Te pondré a cargo de muchas cosas". El que le habían dado solamente un talento vino a su amo y le dijo: "Amo, yo sabía que tú eras un hombre duro, que recoges donde no sembraste y que siegas donde no echaste semillas. Estaba atemorizado de modo que me marché y escondi tu talento en la tierra. Te lo voy a devolver." Pero el amo le dijo: "Eres un esclavo malvado y perezoso. Sabías que o segaba donde no había sembrado y que recoía donde no había echado semillas. Deberías de haber depositado mi dinero en el banco y al menos hubiera conseguido el interés sobre él." Le dijo a los que se encontraban a su alrededor: "Quitad el talento al que tan mal lo ha invertido y dádselo al que tiene cinco. Porque a todo el que tiene le será dado más y tendrá en abundancia, pero al que no tiene, aún lo que tiene le será quitado y echadlo en las tinieblas." Esta parábola es profética en su naturaleza. Aparece en el capítulo 25 de Mateo, un capítulo que trata acerca de la segunda venida de Cristo y nos revela muchas cosas: • Dios nos confiará aquello que es conforme a nuestra habilidad y no lo que está por encima de ella. • Dios es el dueño y tiene derecho a recuperar lo que nos ha confiado para que nosotros lo administremos. • Dios está totalmente en contra de la vaquería por nuestra parte y espera que nosotros seamos capaces de multiplicar los bienes que nos deja, no solamente que los mantengamos y esa multiplicación es algo que sucederá de acuerdo con nuestras habilidades. Dios espera que aquellas personas que poseen la habilidad de invertir lo hagan, pero no solamente eso, sino que espera que le devolvamos lo que Él nos ha confiado. De manera que esa multiplicación se habrá de efectuar conforme a una habilidad. Eso requiere poseer una cierta sabiduría en finanzas, otra de las claves que ha de permitirnos entender cuál sea el plan de Dios. La sabiduría de Dios en cuanto al dinero

¿De qué manera podemos nosotros buscar la sabiduría de Dios en lo que se refiere a las finanzas cristianas? Dios dice que si le pedimos algo en Su nombre, creyéndolo, nos será dado. Pero sucede que no siempre coinciden la voluntad de Dios y Su manera de hacer las cosas con la nuestra. Con demasiada frecuencia, hacemos las cosas a nuestra manera a pesar de que no tenemos demasiado claro lo que debemos hhacer exactamente, incluso hasta llegar a pedir dinero prestado para realizar Su obra, olvidando que Dios dice que Su obra no quedará sin cumplir por falta de dinero.

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riqueza?

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No hay nada de malo en pe 1a Dios que lJd dirija, pero lo q4t s está mal es que hagamos las cosas a nuestro m rem que Él nos saque de los líos en que nos metemos nosotros solitos. Los cristianos que hacen esto con frecuencia no han aceptado que la sabiduría de Dios es superior a la de ellos. Cómo Dios obra por medio de nuestras finanzas 1. Dios utilizará el dinero para fortalecer nuestra confianza en Él. Con mucha frecuencia Dios se vale del dinero para demostrarnos claramente y de una manera objetiva que Él es Dios y está en control de todo. Mateo 6:32-33 (BLA) nos dice: "Porque los gentiles buscan ansiosamente todas estas cosas; que vuestro Padre celestial sabe que necesitáis todas estas cosas. Pero buscad primero su reino y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas." Este principio muestra claramente que Dios utilizará el dinero con el fin de fortalecer nuestra confianza si nosotros sencillamente aceptamos nuestra posición como mayordomos y lo entregamos todo en Sus manos. 2. Dios utilizará el dinero para desarrollar nuestro derecho a que seamos dignos de confianza. Este principio es de tan importancia si tenemos en cuenta que nuestra vida gira en derredor de ganar, gastar, ahorrar y hacer otros usos del dinero. Lucas 16:11 (BLA) nos dice: `Por tanto, si no habéis sido fieles en el uso de las riquezas injustas, quién os confiará las riquezas verdaderas?" 3. Dios utilizará el dinero para demostrar Su amor. Hay muchos cristianos que permanecen apartados de la voluntad de Dios porque temen poner sus vidas enteramente en sus manos así como sus recursos. Mateo 7:11 tiene la respuesta: "Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que le piden?" Mediante este pasaje de las Escrituras nos damos cuenta de que Dios asume la responsabilidad de proveer las necesidades básicas de los que confían en Él. 4. Dios utilizará el dinero para demostrar Su poder sobre este mundo.

Con demasiada frecuencia nos olvidamos de que adoramos al Creador de este universo y pensamos en Dios en términos humanos y nos relacionamos con Él de la misma manera que lo hacemos con cualquier otro ser humano. Es importante, por lo tanto, que entendamos el poder de Dios y Sus recursos. Digamos que tú estás en tu casa y alguien llama a tu puerta. Al responder te dice: "Señor, he decidido que dentro de dos semanas te voy a dar dos mil dólares". A continuación te deja su tarjeta y cierra la puerta. Tú „¡Qué cosa tan rara!" Pero lo primero que haces es hacer averiguapiensas: ciones sobre él. Quieres enterarte de qué balance le queda en su cuenta y

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cuánto vale, desde el punto de vista económico. Hablas sobre él con personas a tu alrededor que es posible que le conozcan. compartan Descubres que es un multimillonario y que ha dado a otras personas miles de dólares. Sabiendo esto, va en aumento la confianza que tienes en tios él. Pero, con todo y con eso, no acabas de confiar en él porque lo cierto es que no te ha dado ningún dinero. Pero al pasar dos semanas te entrega mil dólares, de manera que tu confianza en él aumenta, por supuesto. Pero incluso mientras te sientes muy contento por tu buena suerte, sientes ciertas dudas. Pero al pasar otras dos semanas vuelve y te dice: "He decidido darte diez mil dólares dentro de dos semanas." Ya sabes que es multimillonario y sabes que dispone de recursos. Y hablando con otras personas, resulta que descubres que en el pasado ha entregado a otras personas diez mil dólares en diversas ocasiones. Pero en esta ocasión descubres otra cosa además: es un hombre que no miente bajo ninguna circumstancia. Cuando dice que va a hacer algo, siempre lo hace. De hecho, ha depositado el dinero en un fondo y ese fondo pagará el dinero con que él lo diga sencillamente. Al transcurrir dos semanas, te entrega los diez mil dólares y entonces sí que confias en él. A lo largo de los próximos meses, te da más y más dinero y tú confías cada vez más en él. Entonces viene a ti, después de haber charlado un rato y te dice: "Dentro de tres meses te daré cien mil dólares." Para entonces tú confías lenamente en él, pues sabes perfectamente cómo actua. Sabes que posee os fondos y que los ha depositado en un depósito bancario y cuando lo diga, harán lo que él quiera. Sabes además que ha dado cientos de miles de dólares a otras personas, de modo que, con plena confianza, puedes gastarse ese dinero, sabiendo que va a cumplir con lo que ha dicho al pie de la letra. La confianza en Dios es algo por el estilo. Dios nos promete ciertas cosas, las promete por medio su Palabra. Y la Biblia contiene todo lo que Dios hará siempre po r nosotros. Al leerla, empezamos a entender que Dios es realmente el dueño de todo. Él es más que multimillonario, es multiuniversal, y cuando nos dice que puede proveernos cosas, puede de verdad hacerlo. Al hablar con otras rsonas nos encontramos con que l0 que Dios promete en las Escrituras, cumple. Entonces comienza a darnos al principio pequeñas cosas, porque solamente somos capaces de confiar en Él para cosas de a importancia, l pero al darnos esas pequeñas cosas, nuestra confianza enÉ 1 comienza za a ir en aumento y cuanto más aumenta nuestra confianza en Él, tanto más puede Él suplirnos. Por lo tanto, somos conscientes de q que Dios puede p utilizar el dinero para demostrarnos Su poder. Porque las Escrituras nos dicen: "Todo el aquel que cree en él no será avergonzado. Porque no hay distinción entre judío y griego, pues el mismo Señor es Señor de todos, abundando en riquezas para todos los que le invocan" (Romanos 10:11-12, BLA).

¿Qué es la riqueza?

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5. Dios utilizará el dinero con el fin de unir a los cristianos, a fin de que muchas bendiciones. "Como está escrito: El que recogió mucho, no tuvo demasiado; y el que recogió poco, no tuvo escasez" (2 Corin8:15, BLA). En muchas ocasiones Dios se vale de la abundancia de un cristiano para suplir las necesidades de otros. Más adelante, podrá dar un giro a esa relación, tal y como se describe en 2 Corintios 8:14 (BLA): "En el momento actual vuestra abundancia suple la necesidad de ellos, para que también la abundancia de ellos supla vuestra necesidad, de modo que haya igualdad." Es importante que, al enfrentarnos a momentos de auténtico caos económico, los cristianos acepten el principio de que la sobra de dinero en nuestra vida, de hecho todo lo que tenemos, está ahí con un muy concreto. propósito Por ejemplo, Dios mandó a José a Egipto concretamente para suplir las necesidades de la nación de Israel. De haberse negado José a cum p con su labor de mayordomía, Dios sencillamente hubiese encomendado dicha labor a otra persona. 6. Dios utiliza el dinero para proveer una dirección a nuestras vidas. Seguramente no habrá un modo más rápido de dirigir nuestras vidas para Dios que el darnos una abundancia o una falta de dinero. Con harta frecuencia creemos que Dios solamente habrá de dirigir nuestras vidas por medio de una abundancia de dinero, y no hacemos más que buscar aquí y allá, para ver de dónde nos va a enviar ese dinero. Sin embargo, cuando nos falta el dinero, Él nos lleva por Su camino con la misma celeridad. "No nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos, segaremos" (Gálatas 6:9, BLA). No nos damos por vencidos sencillamente por el hecho de enfrentarnos con una determinada dificultad. A la postre Dios nos indicará por dónde debemos de ir y una de las maneras principales mediante las cuales nos da la visión precisa para conocer cuál es Su voluntad es dándonos o privándonos del dinero. El cristiano que esté buscando la voluntad de Dios debe primeramente de estar seguro de que deja totalmente el control de su vida en Sus manos, incluyendo lo que se refiere al aspecto financiero y que verdaderamente está buscando la dirección de Dios. 7. Dios puede utilizar el dinero para satisfacer las necesidades de otros. Aquellos cristianos que se dedican a amasar fortuna sin planear el aspecto económico de sus vidas no pueden sentirse realmente realizados en este aspecto. Yo oigo decir con frecuencia a cristianos: "Cómo puedo yo dar? Es así y apenas si tengo bastante para suplir mis necesidades." Si nunca hemos aprendido a dar, Dios nunca podrá devolvernos. Dios no uede Jos de estar en control mientras que nosotros sigamos estando convenci que los dueños somos realmente nosotros. Actitudes de do minio propio Echemos un vistazo a algunas normas que nos indicarán con claridad

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¿Qué es la riqueza?

cuando Dios no está en control, porque el entender esto es tan importante como entender cuándo Él sí está en control.

sienta satisfecho sin tener necesidad de ti." Sobre los ricos pesa una grave responsabilidad: la de entender por qué Dios les ha dado el dinero y evitar el amontonarlo. Estoy prácticamente convencido que al ir desmoronándose la economía resultará imposible acumular dinero. Aquellos que han estado almacenando su riqueza con vista a lo que pueda sucederles, pensando en su retiro o en llevar una vida mejor, se van a sentir profundamente decepcionados cuando todo ese dinero se consuma como si se tratase de paja desmenuzada y forraje. Para un cristiano es de todo punto imposible actuar conforme a la voluntad de Dios y al mismo tiempo amontonar dinero. "¡Oh ricos! ¡Oh orgullosos! ¡Oh sabios! ¡Tienen que morir como los demás! No se les concede mayor extensión de vida que a los necios e insensatos. Tendrán que dejar a otros su riqueza. Ustedes nen su nombre a sus propiedades como si sus tierras fueran a pertenecer para siempre y fueran a habitarlas eternamente" (Salmo 49:10, 11, Biblia al Día). Esa es una importante lección espiritual. Aquellos que acumulan grandes cantidades de dinero con el propósito de dejárselo a sus hijos o para sentirse "seguros" lamentablemente se están engañando, porque es imposible hacerlo. Es ¡ni porrtante que los cristianos lo entiendan y lo crean. Las Escrituras hablan fuertemente acerca de los auténticos valores: 'Te aconsejo que de mí compres oro refinado por el fuego para que te hagas rico, y vestiduras blancas para que te vistas y no se manifieste lave en za de tu desnudez, y colirio para ungir tus ojos para que puedas ver pocalipsis 3:18, BLA). El amontonar dinero puede acabar convirtiéndose en una trampa. Es posible llegar a ver la necesidad de otras personas y abandonarlas a su necesidad antes que renunciar a nuestro plan de amontonar dinero. Desgraciadamente, aquellas personas que se ven atrapadas por ese deseo de amontonar dinero pueden intentar explicar de modo racional su comportamiento con argumentos que contradicen a la Palabra de Dios.

1. Dios no utilizará nunca el dinero en la vida de un cristiano para causarle preocupación. Si un cristiano está preocupado, frustrado y molesto

acerca del dinero, Dios no está en control. Dios dijo que la riqueza sin preocupación es el plan que tiene para nuestra vida. `Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que al alimento, y el cuerpo más que el vestido?" (Mateo 6:25, RV60). Si nosotros actuamos dentro de Su plan, Dios nos promete suplirnos del alimento, de la ropa, del hogar y de las distintas necesidades que tengamos a lo largo de nuestra vida. Si lo creemos, podremos concentrarnos en otras cosas, utilizando, de ese modo, la habilidad que Dios nos ha dado para llevar a cabo el plan que tiene para nuestras vidas. 2. Dios no utilizará jamás el dinero en la vida de un cristiano para corromperle. Dios no utilizaría para nada el dinero con el propósito de

corrompernos, pero hay muchos cristianos que han caído en la trampa de Satanás y se están dejando corromper. No se dan cuenta de que Dios no puede tener el control cuando ellos se dejan llenar por la corrupción. `Porque el Señor conoce el camino de los justos, pero el camino de los impíos recerá" (Salmo 1:6). El cristiano cuya vida económica se caracterice por avaricia, el egoísmo, el engaño y cualquiera de las muchas trampas mundanas no es realmente un aliado de Dios.

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3. Dios no utilizará nunca el dinero en la vida de un cristiano para fomentar su egoísmo. Con demasiada frecuencia los cristianos se sienten

atrapados por un egoísmo financiero y son muchas las personas que están realmente fomentando el egoísmo de los ricos (incluyendo a los cristianos). Lee lo que dice el libro de Santiago y te darás cuenta de lo clara que está la advertencia de no adular a los ricos. En Cristo somos todos económicamente iguales. Las cosas de este mundo pasarán rápidamente y la muerte nos privará de toda riqueza. Y cuando nosotros los cristianos nos volvamos a reunir, habrá muchas sorpresas. Aquellos que tendrán las coronas de los cielos y que ocupen los puestos de responsabilidad en las ciudades de Dios no serán aquellos que hayan utilizado el dinero para alimentar su egoísmo. "Y el rico en su humillación, pues él pasará como la flor de la hierba. Porque el sol sale con calor abrasador y seca la hierba, y su flor se cae y la hermosura de su apariencia perece; así también se marchitará el rico en medio de sus empresas" (Santiago 1:10, 11, BLA). 4. Dios no permitirá que los cristianos amasen dinero. Existe una clara diferencia entre lo que es ahorrar dinero y amasarlo. El rey Salomón dijo (en paráfrasis): "Señor, solamente dos cosas te pido: Primero, ayúdame a que nunca diga una mentira y, segundo, no me des ni riqueza ni pobreza porque en mi pobreza tal vez tenga que robar y en mi riqueza tal vez me

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5. Dios no utiliza el dinero para permitirnos satisfacer cada uno de

~ros caprichos y deseos. Es importante que empecemos a amoldar nuestro estilo de vida a la entrega cristiana. Y para eso tenemos que dejar a un lado algunos lujos. Dios no desea que vivamos en la pobreza, ya que hemos descubierto que no hay nada realmente espiritual en la pobreza y que tampoco es un pecado ser rico. Sin embargo, Dios no desea que el cristiano viva con todos los lujos de este mundo mientras que Su obra necesita dinero y otros cristianos carecen de alimento y de ropa. De modo que, si bien podemos vivir bien, es importante establecer una diferencia entre nuestra entrega y la de la persona que no es creyente. ¿Qué clase de entrega ha de ser la nuestra? Debe de ser personal, fruto del convencimiento inducido por el Espíntu Santo, pero es preciso que te preguntes a ti mismo: "¿Existe alguna diferencia entre mi estilo de vida y el

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de la persona que no es creyente?" Si no la hay, lo que necesitas es pedirle a Dios que guíe tu vida. En 1 Timoteo 6:6-8 (RV60) se nos dice: `Pero gran ganancia es la piedad acompañado de contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar. Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto." Dios no suple el dinero con el propósito de satisfacer cada uno de nuestros caprichos y deseos. Pero sí que ha prometido que se ocupará de suplir nuestras necesidades y hacerlo con abundancia, de manera que nosotros podamos ayudar a otras personas. Cuando nosotros estemos dispuestos a aceptar este principio Dios multiplicará también nuestra abundancia.

Aplicación A fin de alcanzar lo mejor que Dios tiene ara nosotros, es reciso aplicar lo que nos dice. La información con una alta de aplicación pie a la frustración. El cristiano que no sienta la paz de Dios ni se sienta realizado en cuestiones económicas está viviendo en esclavitud. En la próxima sección, vamos a hablar precisamente acerca de eso, de la esclavitud financiera, vista desde la perspectiva de Dios.

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3. ¿Qué Significa la Esclavitud Financiera? CAPÍTULO

ué significa la esclavitud financiera o económica? Si leemos lo que dicen las Escrituras al res cto nos daremos cuenta de que es evidente que un exceso deudas significa exactamente vivir esclavos. Si un deudor no podía pagar sus deudas, entonces el que le había concedido el préstamo estaba en su pleno derecho de echarlo en la cárcel hasta que pudiera devolverle hasta la última moneda que le debiese. En ese caso, la persona que había concedido el préstamo era, en realidad, el dueño de todo lo que con anterioridad le había pertenecido a la persona endeudada, incluyendo su mujer, su familia y todas sus posesiones.

Esclavitud física a La perspectiva bíblica de la esclavitud la encontramos en las palabras de Mateo 5:25-26 (BLA): "Reconcíliate pronto con tu adversario mientras vas con él por el camino, no sea que tu adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. En verdad te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo." En la Biblia, la esclavitud financiera quiere decir, al mismo tiempo, esclavitud fisica. Se trataba de un modo tan duro a la persona que era incapaz de pagar una deuda porque se consideraba que el estar endeudado equivalía a ser deshonesto. La falta de honradez se juzgaba con tal dureza que normalmente cuando detenían a un ladrón, le cortaban la mano como castigo por el delito que había cometido. La persona que se había endeudado, no pudiendo satisfacer la cantidad adeudada era echada en la cárcel y vendida como esclava. ¿Por qué? La palabra de un hombre era la señal de su honor. Por lo tanto, el que no cumpliese lo dicho no merecía ya la confianza de los demás. En la actualidad, la sociedad se ha hecho tan sofisticada que no se

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mete a una persona en la cárcel sencillamente por el hecho de estar endeudada. Pero desgraciadamente, un nuevo castigo ha suplido al antiguo. La esclavitud mental La esclavitud fisica se ha visto reemplazada por la esclavitud mental. Cada año quedan destruidas miles y miles de familias por causa de la esclavitud financiera. Miles, tal vez millones de personas se cargan de deudas que no pueden, ni mucho menos, pagar. Los cristianos se ven envueltos en el sistema del mundo, de la misma manera que les sucede a los no cristianos y comienzan a comprar siguiendo sencillamente sus impulsos. Las tarjetas de crédito han fomentado elpoder comprar siguiendo sencillamente un impulso, permitiendo que cualquier persona cargue con obligaciones que están muy por encima de sus posibilidades en cuanto a poder pagar. El peligro de los préstamos Por qué se ven los cristianos atrapados y se dejan arrastrar por este sistema? Precisamente porque han violado uno o más de los principios que Dios ha establecido, en especial aquellos que se refieren a la esclavitud financiera. Es de suma importancia que el cristiano pueda entender cuál es la actitud que Dios adopta con respecto a las deudas. Proverbios 22:7 (BLA) dice: "El rico domina a los pobres, y el deudor es esclavo del acreedor." Dios nos dice que cuando alguien pide prestado, se convierte en siervo de la persona que se lo presta; de ese modo, el que presta queda como autoridad sobre el que toma prestado. Esto debiera definir con toda claridad la actitud de Dios en lo que se refiere a pedir préstamos a fuentes del mundo para llevar a cabo la obra de Dios. DesTues de todo, ¿a cuántas organizaciones cristianas les gustaría ser siervas e un banco o institución financiera de este mundo? Los cristianos pueden convertirse en esclavos, desde el punto de vista financiera, de dos maneras distintas. Esclavos del crédito La clase más comente de esclavitud es hacer un uso excesivo del crédito. Hay muchas personas que están actualmente convencidas de que los bancos que emiten las tarjetas de crédito no permitirán que la persona se endeude por encima de lo que puede pagar, pero eso no es cierto, ni mucho menos. La mayoría de estos bancos permiten que las personas reciban préstamos que son 250 por ciento superiores a lo que pueden imaginablemente llegar a pagar. Por lo tanto, cuando una cuenta es morosa normalmente se rige po r unos estatutos que lógicamente favorecen al que ha concedido el crédito,

¿Qué significa la esclavitud financiera?

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lo cual significa que estas cuentas se rigen por unas normas totalmente distintas. Estas normas permiten a la compañía que ha concedido el crédito cargar más intereses por la cuenta morosa que por aquellas cuentas que se encuentran al día. Las deudas La definición de las Escrituras de la deuda es la incapacidad para cumplir con unas obligaciones acordadas. Cuando una persona se vale del crédito para comprar algo, eso no es necesariamente una deuda, sino más bien un contrato. Pero al mcumplir las normas de ese contrato, entonces sí se considera una deuda desde el punto de vista de la Biblia. El hecho de que una persona se encuentre endeudada es el resultado de una actitud anteriormente adoptada: la de no haber entendido o de no haber obedecido a los principios de Dios. "Estad atentos y guardaos de toda forma de avaricia; porque aun cuando alguien tenga abundancia, su vida no consiste en sus bienes" (Lucas 12:15, BLA). Cuando un cristiano sigue pidiendo dinero prestado, sin poder en realidad disponer de los medios suficientes como para devolver el préstamo, su categoría viene a ser la del engaño y la avaricia. No cabe duda alguna de que este estado mental no hará otra cosa que separar a cualquier cristiano de la voluntad de Dios. Son muchos los cristianos que se ven, en la actualidad, hundidos por causa de una enorme cantidad de deudas, y el uso inap ropiado de las finanzas ha sido la causa de que su vida espiritual se haya desmoronado. Ya no pueden ocuparse de las necesidades de otras personas, de la manera en que Dios nos dirige para que lo podamos hacer, se sienten hundidos bajo un tremendo peso y lógicamente les avergüenza hablar acerca de Cristo. Al mismo tiempo se sienten derrotados en sus hogares, en ocasiones acosados por sus cónyuges o frustrados e incluso intimidados por las rsonas a las que les deben dinero que están constantemente encima de ellos. dinero que "El que ama los placeres se empobrecerá; el que Proverbios 21:17 ama el vino y los perfumes no se enriquecerá". La persona que no está nunca dispuesta a sacrificarse, que no frena nunca sus impulsos, sino que se empeña en satisfacer constantemente cada uno de sus caprichos y deseos, vivirá siempre en esclavitud y se sentirá frustrada. Hasta el momento en que el cristiano logre controlar sus deudas y someterlas al plan de Dios, no conseguirá jamás vivir en paz. Recuerda que Dios se interesa en nuestra actitud y comenzará a actuar en las finanzas del cristiano, sean cuales fueren sus actitudes del pasado, tan pronto como tenga una actitud correcta. No podemos evitar a las personas alas que les debemos dinero 9 Puede que existan maniobras legales para evitar a los acreedores, como por ejemplo el declararnos en bancarrota. Sin embargo, no existen reme-

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La familia y ~finan= ¿Qué sigmfica

dios bíblicos. "El impío pide prestado y no paga, mas el justo es compasivo y da" (Salmo 37:21, BLA). Es cierto que desde el punto de vista del mundo, estos principios posiblemente no parecerán ser lógicos y en muchas ocasiones hasta los cristianos comienzan a dudar sobre Dios, diciendo con harta frecuencia "¿Cómo podré vivir si se llevan todo lo que tengo?" Por eso, intentamos buscar maneras "lógica" de proteger nuestras posesiones de los acreedores legítimos, pero como cristianos no nos es posible actuar de ese modo, sino que debemos de aceptar el hecho de que Dios es el que controla y que Él entiende nuestra necesidades y nos ha prometido proveerla. La actitud es la clave, porque es precisamente la actitud la que hace que se ponga de manifiesto ese poder sobrenatural. Dios nos dice: "Si me pedís alguna cosa en mi nombre yo la hare" (Juan 14:14). De modo que lo que ' debemos de hacer, en realidad, es sencillamente aceptar el plan que tiene Dios para recuperarnos y poder sentirnos libres cuando nos hallamos esclavos desde el punto de vista financiero. La promesa de Dios Si realmente le confiamos a Dios todo lo que tenemos, Él satisfará cada una de nuestras necesidades, tal y como lo ha prometido: -Porque p q los pueblos del mundo buscan ansiosamente toda esta cosas; pero vuestro Padre sabe que necesitáis esta cosas. Mas buscad su reinó, y estas cosas os serán añadidas" (Lucas 12:30-31, BLA). Una de la más importantes referencia a la actitud se encuentra en el relató de Abraham. Dios le p idió a Abraham que sacrificase su posesión de más valor: a su hijo Isaac. Habiendo nacido cuando Abraham era ya anciano, se puede decir que este hombre amaba con toda su alma a su hijo y, a pesar de que desde el pa de vista del mundo Abraham era un hombre rico, nada valla tanto par él =no mo co mo su hijo. Pero a pesar de ello, Dios le pidió a Abraham que tómase a su hijo y se ba lo llevase a las montañas y que una vez que se encontrase allí se lo ofreciese en sacrificio al Señor. Él le idió a Abraham, de la misma manera que nos está pidiendo a cada uno nosotros, que sacrificase todo cuanto poseía por causa del nombre de Dios. Abraham podría haber discutido con Dios i acerca de la lóg ca que tenía el sacrificar a Isaac, pero no lo hizo. Él sabía que si Dios le había dado un hijo cuando ya era un hombre tan mayor, sin duda podría recuperar a ese hijo de la muerte. De manera que enalbardó y cargó las mulas, hizo que sus siervos estuviesen dispuestos, así como Isaac y se dirigieron hacia las montañas. Colocando a su hijo sobre el altar, Abraham levantó en alto el cuchillo. Fue precisamente al llegar a este punto cuando Dios le detuvo diciéndole: "Por mí mismo he jurado, declara el Señor, que por cuanto ha hecho

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esto y no me has rehusado tu hijo, tu único; de cierto te bendeciré grande-

mente, y multiplicaré en gran manera tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena en la orilla del mar, y tu descendencia poseerá la puerta de sus enemigos" (Génesis 22:16-17, BLA). Como resultado de la actitud de obediencia de Abraham, Dios le concedió ocuparse de la mayordomía de Su reinó aquí en esta tierra. Porque no el solamente amaba y confiaba Abraham en Dios, sino que estuvo totalmente dispuesto a someter su voluntad a la de Dios y Su juicio. Es precisó que los cristianos acepten este principió de mayordomía absoluta, porque cuando transfieren sus valores para evitar de esa manera a los acreedores, cuando se declaran en bancarrota para evitar a dichos acreedores ó cuando engañan a estas persona, queda bloqueado el canal de bendición de Dios. Esclavitud por causa de la riqueza La esclavitud económica puede suceder también por causa de la abundancia de dinero. Algunos cristianos poseen una sobreabundancia de dinero y lo han utilizado mal ó lo han estado amontonando. Aquellas personas que solamente utilizan su dinero con el fin de satisfacer sus propios deseos, ó que lo amontonan para ese posible "día de escasez," se encuentran tan totalmente esclavos de su economía, en opinión de Dios, como los que viven endeudados. La acumulación de riquezas y de placeres materiales de la vida puede convertirse en una obsesión que destruya la salud del cristianó, ue dé al traste con su vida familiar, que le separe de sus amistades y que boquee la voluntad de Dios para su vida. Todo y cada persona que aparezca en su vida pueden llegar a convertirse en algo que utilicen en su ascenso hacia el éxito. Las personas que viven si guiendo estas actitudes totalmente equivocadas no tienen otra meta que la de conseguir más dinero. Job 31:24-28 (BLA) nos dice: "Si he puesto en el oro mi confianza, y he digo al oro finó: Tú eres mi seguridad; si me he alegrado porque mi riqueza era grande, y rque mi manó había adquirido mucho, si he mirado al sol cuando brillaó a la luna marchando en esplendor, y fue mi corazón seducido en secretó, y mi manó tiró un beso de mi boca, esto también hubiera sido iniquidad que merecía juicio, porque habría negado al Dios de lo alto." Como ya hemos explicado con anterioridad, es importante que los cristianos entiendan esta verdad. Son muchos los cristianos que han tomado un recurso que Dios les había concedido y lo han transformado en algo llenó de dolor y de sufrimiento. El dinero no es malo de por sí, pero sí que lo es el hacer un mal usó de él ó el estar excesivamente preocupados por causa del dinero. Síntomas de esclavitud Es de suma importancia que podamos reconocer y detectar estos síntomas de la esclavitud al dinero:

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1.

Facturas pasadas de fecha de pago. Un cristiano se encuentra atado como esclavo al dinero si se tiene que preocupar porque ya hace tiempo que debería de haber pagado sus facturas, que han pasado ya de la fecha de pago. En mi labor como consejero, me encuentro hasta con un 80 po r ciento de familias cristianas que en la actualidad una de dos, o gastan demasiado en la actualidad o lo han hecho en el pasado. Eso se debe en princi lo a que no se han fijado un plan financiero y siguen pidiendo presta aun cuando se ven incapacitados para pagar luego esas cantidades. Si un cristiano se encuentra atrapado en semejante situación, resulta virtualmente imposible que sea un testigo efectivo de Jesucristo, ya que la frustración que sienta en su vida hogareña se verá inevitablemente reflejada en su vida espiritual. Proverbios 27:12 (Biblia al Día) nos dice: "El hombre sensato se anticipa a los problemas y se prepara para enfrentárselos. Él simple no prevé y sufre las consecuencias." Lo que nos está diciendo Dios es que el hombre que hace planes se anticipa a los peligros y los evita, pero el hombre insensato se lanza sin pensárselo dos veces, hace lo que le resulta conveniente en ese momento y más adelante tiene que enfrentarse con las dolorosas consecuencias. 2.

Preocupaciones por causa de las inversiones. El preocu arse por causa de unas inversiones, ya sean ahorros, dinero efectivo o valores también se convierten en una esclavitud al dinero que interfiere con la vida espiritual del cristiano. Cuando muchos cristianos empiezan a acumular bienes materiales (o se preocupan por conseguir acumularlos) esa preocupación que sienten afecta a los demás aspectos de sus vidas. No disfrutan nunca a sus familias por causa de su constante preocupación económica sobre las inversiones o la falta de inversiones. Esta reocupación les acompaña en sus hogares, en la iglesia e incluso cuando se van a dormir. Al meterse en la cama lo hacen pensando en el dinero y se despiertan con el mismo pensamiento en su mente. Si estas inversiones causan preocupación, el cristiano podrá estar completamente seguro de que no está obrando conforme a la voluntad de Dios. "Nadie puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o se dedicará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y ala riquezas. Por tanto os dijo: No os afanéis por vuestra vida qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?" (Mateo 6:24-25). 3.

La actitud de enriquecerse rápidamente. p Esta actitud se caracteriza por el esfuerzo que se hace para hacerse rico rápidamente, sin esforzarse realmente demasiado. Una inversión no es otra cosa que un programa para "enriquecerse rápidamente" y el individuo

¿Qué significa la esclavitud posiblemente tenga que endeuda , _ dir di r ro prestado o vertir o incluso actuar de manera engañosa t as rsonas. El libro de los Proverbios nos dice que e m re que rápidamente no tardará en fracasar. "El hombre fiel abundará en bendiciones, pero el que se apresura a enriquecerse no quedará sin castigo" (Proverbios 28:20, BLA). El dinero que puede haber requerido años de esfuerzos para llegar a acumularlo se puede perder en cuestión de días siguiendo esos programas para enriquecerse rápidamente. No solamente está muy extendida esta actitud en las inversiones, sino que se manifiesta igualmente en los hogares cuando una familia pide prestado para conseguir todo lo que desea en lugar de molestarse en ahorrar para conseguirlo. Es de vital importancia, por lo tanto, examinar lo que auténticamente nos motiva en estas inversiones. 4.

Sin una ocupación lucrativa. La esclavitud financiera se manifiesta también en aquellos casos en que las personas no sienten el menor deseo de conseguir una ocupación lucrativa. Pablo dijo en 2 Tesalonicenses 3:10 (B LA): "Aun cuando estabamos con vosotros os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, que tampoco coma." Por desgracia, parece ser que la sociedad de nuestros días ha perdido totalmente de vista este punto de referencia. Los gobiernos han asumido la responsabilidad de sustentar a las personas que se lo merecen, pero también a las que no se lo merecen. Esto es algo que también debe examinar cada cristiano. Porque muchas personas que ambicionan llegar a la cumbre no se ponen nunca en movimiento y es preciso que cada uno de nosotros tengamos un verdadero deseo de trabajar si hemos de realizar aquello para lo cual Dios nos puso en esta tierra. Cuando alguien se nos acerque para pedirnos ayuda, es preciso que nosotros, los que somos cristianos, nos preguntemos si lo que nos están pidiendo es suplir una necesidad, un deseo o un capricho. También deberemos preguntarnos si esa persona se va realmente a entregar a realizar una obra o no. Es incluso posible que al dar ayuda estemos impidiendo que se lleve a cabo elan de Dios, que es el plan perfecto para esa persona en concreto, al interferir nosotros satisfaciendo sus peticiones de ayuda. Pablo es un buen ejemplo de esa clase de actitud que, sin duda, debiéramos adoptar. Pablo no dejó de trabajar durante toda su vida como cristiano, pero se encontró en sus muchos viajes que había muchos cristianos que en realidad no sentían ningú n deseo de trabajar. Eran personas a las que les gustaba depender de los hermanos, por lo que Pablo advirtió a estas personas, y en especial a aquellas pertenecientes a la iglesia de Te salónica, y recordó a los que si trabajaban que no era responsabilidad suya ocuparse de las necesidades de aquellas otras personas que no querían trabajar. "Os mandamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesu-

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Cristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según a la doctrina que recibisteis de nosotros" (2 Tesalonioenses 3:6, BLA). 5. El engaño. El cristiano vivirá en esclavitud económica si es deshonesto en los asuntos financieros. Es preciso que cada cristiano examine su propia vida. ¿Has tratado tú honesta y abiertamente con todo el mundo? Sé que desde el punto de vista del mundo esto no siempre parece lógico. Por ejemplo, una persona que se dedique a vender seguros o inversiones podrá fácilmente ocultar la verdad (por ejemplo, en lugar de decir toda la verdad, podrá decir solamente una parte). Ese pequeño engaño lo que hará será atar económicamente al cristiano, quitándole la paz y la satisfacción. También las familias cristianas deben examinar sus vidas porque puede que vivan en esclavitud, por ejemplo, si una pareja compra un electrodoméstico a base de crédito, a pesar de ser plenamente conscientes de que no pueden ni siquiera cum lir con los pagos mensuales que tienen hasta el momento. De modo que que están haciendo es actuar de manera engañosa con la persona que les va a vender el electrodoméstico. Lucas 16:10 nos habla acerca de la actitud de Dios sobre el engaño: "El que es fiel en lo muy poco también es fiel en lo mucho." Si no somos fieles en lo que se pueda referir a cosas que sean insignificantes, no podremos serlo en las cosas de mayor embergadura. La cantidad, en realidad, no es lo importante. 6. La avaricia. La esclavitud económica se produce con frecuencia por causa de la avaricia, que se refleja cuando alguna persona desea lo mejor o quiere siempre más de lo que tiene. La persona que es incapaz de poner a los demás antes que a sí misma, que no es nunca cap az de aceptar una pérdida necesaria, o que está constantemente mirando lo que tienen los demás es una avariciosa. El cristiano que es incapaz de olvidarse de sus propios deseos para satisfacer las necesidades de los demás es un egoísta y avaricioso. "Porque esto lo sabéis muy bien: que ningún inmoral ni impuro ni avaro, el cual es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios" (Efesios 5:5). Qué significa un idólatra? La persona que antepone los bienes materiales a Dios, aunque somos con frecuencia culpables de tener otros ídolos delante de Dios. El joven rico, de Lucas 18, padecía precisamente este mal. Había colocado un ídolo, su dinero, de manera que tuviese más importancia que Dios. De tal modo que ni siquiera fue capaz de abandonar ese ídolo con tal de poder seguir a Cristo. 7. La codicia. Existe la esclavitud económica siempre y cuando el cristiano mire lo que

lo

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tienen otras personas y lo desee. Podríamos explicar esta situación como el querer ser "igual que el vecino." Con frecuencia oigo hablar a los jóvenes matrimonios de la manera en que comenzaron a endeudarse. Sencillamente siguieron el ejemplo de otras rsonas que pedían dinero prestado con el propósito de poder comprarse cosas que deseaban tener, ya fuesen muebles, un coche nuevo, una televisión y cosas por el estilo. Lo realmente triste es que no puedan echar un vistazo en el interior de la casa del vecino para ver cómo vive. Lo qué deberían ver es la lucha que se desencadena cuando llega la paga, yero resulta que no basta para satisfacer a todos sus acreedores. O la ansiedad que sienten en esa casa cuando llega una notificación de que una agencia amenaza con embargarles y llevarles ante los tribunales o la desesperación que siente un ama de casa cuando la llama un acreedor a las diez de la mañana para pedir que le pague lo que le deben. La codicia no debiera caracterizar al cristiano. Fija tus metas y tus normas de conducta basándote en las convicciones de Dios, no en lo que otras personas posean. El tener paz y contentamiento bien vale la pena. Estoy totalmente convencido de que cualquier matrimonio que viva en esclavitud estaría dispuesta a comenzar a partir de cero, sin valores ni obligaciones, si pudieran hacerlo. 8. Necesidades familiares sin supl Un cristiano se encontrará en una esclavitud financiera cuando causa de sus hábitos pasa, en lo que se refiere a sus compras, no puede suplir las necesidades de su familia. Los motivos por los que no se cubran estas necesidades pueden ser muchos. Puede que un cristiano se niegue a tener un trabajo que le permita contar con un dinero, puede que tenga un exceso de deudas, hasta el punto de que los acreedores se estén quedando con los fondos que necesita la familia o que el nivel de vida sea uno que permita "lujos" que estén privando a la familia de las "necesidades," lo cual no resulta tan extraordinario como pueda parecer, ya que son muchos los cristianos que viven por encima de sus medios y que sacrifican las necesidades básicas, como puedan ser los cuidados médicos o dentales como resultado de ello. Los "síntomas" de la esclavitud financiera son prácticamente interminables, pero todos ellos están relacionados con una actitud común: la falta de

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¿Quésignifica la esclavitud financiera?

responsabilidad Hay una clara diferencia entre el cristiano que vive esclavo del dinero por causa de su actitud irresponsable y el otro que se encuentra en una grave situación económica por causa de las necesidades familiares como puedan ser el tener que pagar facturas médicas, por estar impedido; enfermo o cualquier otro acontecimiento inesperado. En esos casos, es la responsabilidad de otros cristianos ayudarle a satisfacer las necesidades de la familia. La esclavitud económica a la que nos estamos refiriendo aquí tiene que ver con aquellas personas que padecen necesidad debido a que en el pasado han tenido malas costumbres y aquellas otras que no están dispuestas a cubrir las necesidades de su familia. Pablo dijo en 1 Timoteo 5:8 (BLA): "Pero si alguno no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo". Ningún cristiano podrá llegar a hacer la voluntad de Dios en esta vida hasta que no cambie radicalmente esa actitud que ha sido la que le ha convertido en un esclavo.

diferencian de encontrarnos demasiado absorbidos por nuestro trabajo en el hecho de que tienen su origen en hacer un mal uso de la economía, llegando incluso tal vez al engaño y entonces es cuando tenemos que decir que es una persona que abarca demasiado. La persona que se ve liada por sus enredos económicos se ha excedido y estirado tanto su dinero que lega un momento ue tiene que empezar a "poner parches" para tapar los agujeros ocasionados por sus excesos. Esos enredos se complican de tal manera que tiene que estar continuamente manipulando para evitar que se le desmorone la situación y todo se le venga abajo. Con frecuencia una persona que se encuentra en semejante situación ha tratado a tantas personas injustamente que ya no puede ser un testigo efectivo de Cristo, y en muchas ocasiones incluso ha envuelto a sus amigos en sus enredos. ¿Recuerdas la parábola del sembrador? Una parte de las semillas cayó entre los espinos y esos espinos representaban las tensiones y las riquezas de la vida. Al ir creciendo fueron ahogadas y no pudo penetrar la Palabra de Dios. Un cristiano podrá entender esta Palabra de Dios e incluso estar dispuesto a obedecerla, pero las tensiones, presiones y riquezas de la vida acabarán por ahogar la Palabra de Dios de manera que el cristiano ya no responda a ella.

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Necesidades cristianas que están sin cubrir. Lamentablemente esta es la norma de la sociedad de nuestros días, pero sigue siendo la responsabilidad de cada cristiano suplir las necesidades de aquellas personas que no lo pueden hacer por sí mismas. Santiago 2:15-16 (BLA) afirma: "Si un hermano o una hermana no tienen ropa y carecen del sustento diario, y uno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais lo necesarico para su cuerpo, ¿de qué sirve?" En cierta ocasión Harry Truman dijo acerca de la presidencia: "El pasarse la pelota se detiene aquí." Lo mismo se aplica a todos los cristianos. Si vemos a un hermano o hermana que se encuentra necesitada, y le cerramos nuestro corazón, di qué clase de amor es ese? Como es lógico, Dios no pondrá todas l as necesidades en el corazón de cada cristiano, pero lo que sí hará es hablar a nuestro corazón acerca de una necesidad muy concreta que nosotros sí que podemos cubrir. Y si hacemos caso omiso de ella, Dios sencillamente buscará a otra persona que comparta esa bendición. 10. Demasiado absorbidos por el trabajo. Una vida dedicada de lleno a los negocios, excluyendo todo lo demás, es una vida de esclavitud. No solamente hay muchos cristianos que viven preocupados y frustrados por causa de las inversiones, sino que sus vidas están dominadas por el trabajo y su trabajo les sigue a dondequiera que van y todas las conversaciones giran alrededor de su negocio, pero el plan que Dios tiene con respecto al trabajo es que sepamos superarnos, pero no excedemos. 11. Los enredos financieros. Dios dice que el cristiano vive en esclavitud económica cuando sus enredos financieros disminuyen su efectividad cristiana. Los enredos se

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12. La injusticia financiera.

Dios dice que el cristiano será esclavo de su situación económica cuando trate injustamente a otras personas. Esa es la clase de persona que defiende sus propios intereses aunque sea en perjuicio de los demás. Un ejemplo clásico de ello es el cristiano que descubre a una persona que está necesitada y presiona a la persona en esa situación para que acepte una oferta miserable, o incluso peor, le obliga a pedir dinero prestado. Esta táctica se utiliza con frecuencia para tratar con mujeres que hace muy poco que se han quedado viudas o como una táctica en los negocios de ventas mediante contactos relacionados con las iglesias. Las viudas se ven acosadas por lobos "cristianos" que intentan venderles cosas que no necesitan o que pretenden animarlas a hacer inversiones bajo coacción en un momento de su vida cuando son realmente vulnerables. Hay muchas personas que se valen de sus contactos cristianos como reclamos de negocios, charlando con personas en las iglesias y presionándolas precisamente por su participación en las cosas del Señor. Los cris-

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tianos (en especial los matrimonios jóvenes) gastan demasiado en seguros de vida o en servicios por el estilo ofrecidos por una persona de más edad que es normalmente un dirigente de iglesia. La presión se ejerce aprovechando que se conoce a esa persona en la iglesia, en lugar de tener realmente en cuenta el valor de lo que se le ofrece. Pero Dios advierte a las personas que se ven envueltas en esta clase de situaciones: "El que aumenta su riqueza por interés y usura, la recoge para el que se apiada de los pobres" (Proverbios 28:8,BLA). Una persona así es incapaz de negarse a sí misma el menor de sus deseos materiales y por ello satisface cada uno de ellos. Dios ha prometido satisfacer cada una de las necesidades que podamos tener, no cada uno de nuestros deseos. Por lo tanto, el pretender satisfacer cada uno de esos deseos nos coloca fuera de la voluntad de Dios. La rsona que cede ante cada uno de sus propios deseos se caracteriza por siguientes señales: • Comprando sin tener en cuenta la utilidad del objeto que compra. • Viviendo una vida que se caracteriza por los lujos superfluos. • Es la persona que está constantemente cambiando su coche por otro nuevo o sus electrodomésticos por otros más modernos. • Teniendo armarios enteros, llenos de ropa, que rara vez se pone. • Gastando frívolamente el dinero en cualquier objeto que esté "de rebajas."

de los cristianos e incluso de las organizaciones cristianas complacen y prestan especial atención a las personas ricas y muchos cristianos que lo son parecen exigir esa atención especial. Los planes de Dios con respec to a los últimos tiempos no permiten la superioridad financiera. Cuando existe una necesidad todos son absolutamente iguales y en los últimos tiempos ninguna riqueza servirá de protección, pero los cristianos que entiendan Palabra de Dios y que hayan realizado sus planes de acuerdo con ella tendrán abundancia.

13. Falta de entrega a la obra de Dios. El cristiano se encontrará esclavo de su situación económica cuando no exista entrega financiera a favor de la obra de Dios. Este principio es básico para la administración de la economía cristiana. "Honra al Señor con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; entonces tus graneros se llenarán con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto" Proverbios 3:9-10, BLA). Dios solamente podrá tomar el control cuando nosotros honramos al Señor con la primera parte de nuestros ingresos. Nosotros somos mayordomos y Dios es el propietario. Los diezmos que le damos a Dios son un testimonio de que Él es, efectivamente, el dueño, por lo tanto, el cristiano que no da un testimonio mínimo a Dios no reconoce nunca que Él es el dueño y Señor de todo. 14. Superioridad financiera. Esta actitud se da con frecuencia en aquellas personas que son precisamente las más bendecidas por la abundancia, pero las Escrituras ofrecen una perspectiva bien distinta. Cualquiera que tenga riquezas debiera considerarlas no como un honor ni como un derecho, sino más bien como una responsabilidad Dentro del Cuerpo de Cristo no debiera existir la superioridad económica. Se n el plan de Dios, el que tiene mucho debiera compartirlo con aqueos que tienen poco. Pero lo cierto es que la mayoría

15. El resentimiento financiero. Lo contrario a la superioridad es el resentimiento por causa de la provisión de Dios, pensan o que Él no le ha dado a una persona en concreto lo que se merece o lo que desea. No solamente sucede que esa persona codicia lo que tienen otras, sino que se siente básicamente resentida en contra de Dios por la situación en que se encuentra en la vida. Estoy convencido de que es un terrible peligro que un cristiano le pida a Dios que le dé lo que se merece. ¡Puede que Dios lo haga! Medita en tus sentimientos que te hacen estar resentido en relación con tu necesidad y no con lo que desees. Nosotros vivimos, en realidad, mucho mejor de lo que lo hace la mayoría de la población del mundo. Es muy fácil amoldarse a tener grandes casas, dos coches, lavadoras y secadoras automáticas, refrigeradores, y aparatos de aire acondicionado y luego a empezar a estar resentidos por todas las "cosas" que tienen otras personas. ¿Por qué? ¿Acaso ya no nos diferenciamos en nada de los infieles? ¿Acaso no somos diferentes a aquellos judíos que estaban resentidos por la provisión de Dios? En estos tiempos de abundancia, muchas personas quieren amoldarse a los despilfarros. ¿Crees tú que todo obra para que se realice la voluntad de Dios en tu vida? Piensa en lo que dice en Juan 6:27(BLA): 'Trabajad, no por el alimento que perece, sino por el alimento que permanece para vida eterna, el cual el Hijo del Hombre os dará porque a éste es a quien el Padre, Dios, ha marcado con su sello". Ten temor a los sentimientos que te hacen estar resentido, no sea que te sientas resentido incluso en contra de Dios. Resumen La esclavitud financiera se puede producir no solamente por una falta de dinero o por gastar de manera excesiva, sino también por causa de un exceso de dinero o por haber malentendido por qué Dios nos lo ha dado. El continuar amoldando nuestro nivel de gastos para que supere nuestro nivel de ingresos dará como resultado la esclavitud financiera y el tener que pedir dinero prestado es la manera más corriente de convertirse en esclavos. preciso que todos los cristianos entiendan la actitud de Dios con respecto a las deudas. Poco menciona acerca de lo que compramos con ese

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dinero que hemos pedido prestado, pe ro sí habla con gran detalle sobre los requisitos a la hora de devolver ese dinero que nos han prestado. El sentido común debiera advertirnos en contra de pedir un préstamo para invertirlo en acciones que se devaluan. Con frecuencia valen menos que la cantidad que debemos y pueden muy fácilmente caer dentro de lo que Dios llama "garantía." La garantía representa el que nos convirtamos en fiadores de los valores materiales, pero la economía determina si un objeto concreto está perdiendo su valor o está aumentando de valor. Hay una gran cantidad de respuestas que podría dar un cristiano con respecto a pedir préstamos que estén dentro de la voluntad de Dios. Uno de los fines de este espectro es la que encontramos en Romanos 13:8 donde se nos dice claramente: "No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama a su prójimo, ha cumplido la ley." Al llegar a este punto, Dios describe el contraer deudas como no deber nada a nadie. Yo sé personalmente que no hay mayor sensación de libertad que la que se siente cuando no se tiene ninguna obligación financiera con nadie. El otro aspecto se encuentra en Salmo 37:21(BLA) donde se nos dice: "El impío pide prestado y no paga, mas el justo es compasivo y da". Dios no acepta nada que no sea cumplir con cada una de nuestras obligaciones y exige que todos los cristianos actúen dentro de estos dos puntos.

CAPÍTULO

El Plan de Dios Para la Libertad Financiera -

E

¿Qué es la libertad?

s preciso que el cristiano sepa reconocer la esclavitud financiera, pero también saber de qué manera conseguir la libertad. La libertad económica se manifiesta en todos los asre tos de la vida del cristiano, la tensión que producen las sintiéndose libres de la preocupación y facturas que ya deberían haber pagado, el tener una conciencia tranquila delante de Dios y de los otros hombres y la absoluta seguridad de que Dios es el que tiene el control absoluto sobre las finanzas. Eso no significa, por supuesto, que la vida del cristiano se vaya a ver totalmente libre de dificultades económicas. Con frecuencia Dios permitirá que las consecuencias de acciones anteriores sirvan para reforzar una lección, ya que Él no ha prometido librarnos de todas las dificultades, pero sea cual fueren las circumstancias, lo que Dios sí nos ha prometido es que podremos tener paz. Cuando Dios dirige nuestra situación financiera, no tenemos motivos para preocuparnos, ya que Él es el dueño y Señor del universo. Lo que nosotros estamos buscando es Su sabiduría. Seguimos siendo humanos y podemos fácilmente cometer equivocaciones, po rque incluso cuando hemos entendido los principios de Dios, es posible que nos apartemos de Su voluntad. Pero tan pronto como admitimos nuestro error y permitimos que Dios vuelva a tomar control, nos encontramos nuevamente bajo Su dirección. Una vez que un cristiano acepta y experimenta la libertad financiera, no volverá a sentir deseos de alejarse de la voluntad de Dios. Es cierto que en nuestra sociedad hay algunas personas que han conseguido la libertad financiera, pero no he conocido nunca a una persona que no fuese cristiana que se sintiese auténticamente libre de la ansiedad,

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acondicionado en su casa. Pero un día, durante el verano, se volvió a estropear. Entonces comenzó a preguntarse: "¿Señor, por qué has permitido que pase esto? ¿Quieres que gaste otros quinientos dólares para lo mismo? No puedo imaginar que eso forme parte de Tú voluntad, pero si es así, estoy dispuesto a hacerlo." Entonces sintió como si el Señor mismo le estuviese preguntando: "¿Qué es lo que pensabas hacer con esos quinientos dólares?" Se quedó una vez más un tanto sorprendido. "Bueno, Señor, si Tú Pasos para la libertad financiera quieres que gaste esos quinientos dólares en el aire acondicionado lo haré, ¿Cómo podemos conseguir la libertad económica? ¿Qué debemos de pero si no es Tú voluntad, entonces haré lo que Tú decidas con ese dinehacer conforme al plan de Dios? ro." Efectivamente el Señor tenía otro plan. Un breve examen del sistema del aire acondicionado mostró que no había nada que fallase y no le costó 1. de propiedad. Transferencia nada que se pusiese nuevamente en funcionamiento. Fue entonces cuando Es preciso que el cristiano transfiera a Dios la propiedad de todo cuanto averiguó el propósito al cual debía dedicar esos quinientos dólares que posee Eso incluye el dinero, su tiempo, su familia, sus posesiones materia- Dios 1e había confiado. No había sentido la menor ansiedad, ni frustración, res, sus estudios, incluso su potencial para ganar dinero en el futuro. Esto ni preocupación por causa de ese incidente debido a que había transferido es esencial para llevar una vida llena del Espíritu Santo en el ámbito de las todo cuanto poseía a Dios y Él, a su vez, le mostró de modo sencillo lo que finanzas (Salmo 8:6). debía de hacer con el dinero, habiendo un propósito muy concreto para No hay nada que pueda sustituir a este paso. Si tú crees que eres el dicha cantidad. dueño de la más mínima posesión, entonces los acontecimientos que afecten 2. Libre de deudas. esa posesión van a afectar tu actitud. Dios no nos obliga a aceptar Su voluntad, sino que somos nosotros los que debemos de estar dispuestos a Es preciso que el cristiano quede totalmente libre de deudas. Permíteme someternos, como lo más importante en nuestra vida, a Su voluntad. definir una vez más lo que significa estar endeudado, desde el punto de visPor lo tanto, si nos decidimos a transferir por completo nuestras perteta bíblico. Existen deudas cuando se dan las siguientes condiciones: nencias a Dios, Él nos demostrará Su habilidad. Es importante que enten• Ha pasado el plazo después del cual se debía de haber abonado una damos y aceptemos las condiciones de Dios para Su control (Deuteronomio cantidad de dinero por objetos, servicios, etc. 5:32-33) y entonces Dios guardará Su promesa de proveer todas nuestras necesidades, ya sea por medios físicos, materiales, espirituales, conforme a • El valor total de las obligaciones no seguras sobrep asa a los bienes Su plan, que esperfecto. totales. En otras palabras, si tuvieras que tener el dinero en efectivo Es sencillo decir: "Transfiero completamente todo, niéndolo en las en un momento ado, habría un balance negativo en tu cuenta. manos de Dios", aunque esto no es tan fácil de hacer. AÍ principio, a todos • Se siente ansiedad por las responsabilidades financieras, y las recenos costará trabajo buscar, de manera consistente, el plan de Dios en el sidades básicas del a familia no se están cubriendo por causa de la aspecto de lo material porque estamos tan acostumbrados a hacer y controcostumbre de comprar en exceso, ya sea en el pasado o en esos larlo todo nosotros mismos, pero la libertad financiera se basa precisamente momentos. en saber que Dios está en control. ¡ Qué tremendo alivio poder depositar todas nuestras cargas a Sus pies! Pasos para ponerse y mantenerse al día Si lo hacemos y le pasa algo al coche, por ejemplo, podrás decir: "ladre, te he entregado este coche. Lo he mantenido en las mejores condiciones que 1 Plan escrito. me ha sido posible, pero no me pertenece, sino que te pertenece a ti, de Es una absoluta necesidad tener un plan escrito para que el cristiano no modo que haz tú lo que quieras con él." Precisamente entonces podrás esperar recibir la bendición que Dios te tiene reservada como resultado de tenga que estar viviendo económicamente esclavo. (Esto beneficiaría a tu actitud. todo el mundo, por supuesto.) Utiliza un plan en el que pongas por escrito Un amigo me contó en una ocasión una experiencia que había tenido ' • los gastos y el orden en que se han de hacer, según su importancia. El orden de importancia es de vital ayuda para que sepamos diferenciar las después de haber transferido todo cuanto tenía a Dios. Hacía solamente unos pocos meses que le habían estado arreglando el sistema del aire necesidades, deseos y caprichos. Examinemos esas diferencias: de la preocupación, de la tensión, de las molestias o de la amargura producida por el dinero. Una vez que una persona experimenta y vive con libertad económica (queriendo decir, viéndose libre de la esclavitud de las deudas, de la opresiones de otros, de la envidia y la codicia o de la avaricia y viéndose además libre del resentimiento) esa persona se destaca como si fuese un faro en medio del mar.

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• Necesidades. Hay compras que son necesarias como pueden ser los alimentos, la ropa, el trabajo, el hogar, los gastos médicos y otros. • Deseos. Los deseos incluyen las opciones en lo que se refiere a la calidad de los bienes a utilizar. Por ejemplo, ropa para vestir en lugar de ropa para ir a trabajar, comerse un bistec en lugar de una hamburguesa, tener un coche nuevo en lugar de uno de segunda mano, etc. • Caprichos. Estos incluyen aquellas opciones que entran dentro de los planes de Dios, que se pueden hacer realidad solamente en el caso de que haya un dinero extraordinario una vez que hayan quedado cubiertas todas las necesidades. La diferencia entre estos conceptos se puede ilustrar de la siguiente manera: vemos fácilmente que en nuestra sociedad todo el mundo necesita tener un automóvil. Esa necesidad se puede satisfacer, por ejemplo, usando el servicio de transporte público o comprando un pequeño auto usado. El deseo se puede satisfacer adquiriendo un auto más grande, y el capricho se satisfará tan sólo comprando un auto nuevo de lujo. Algo por el estilo se puede decir acerca de los alimentos que comemos. Las proteinas que necesitamos de los alimentos se pueden satisfacer seleccionando vegetales de buena calidad o hamburguesas y, aunque deseemos comernos un filete y prefiramos comer en un restaurante todas las noches, no lo necesitamos. Cada uno de nosotros debe estudiar los niveles, según el plan que Dios tenga para nuestras vidas. Por ejem lo, si un cristiano vive económicamente esclavo y no puede, por ello, hacer frente a las necesidades de su familia y pagar sus facturas, deberá pensar si puede costear tener una televisión, si es una necesidad, un deseo o un capricho. Deberá además considerar los entretenimientos o las vacaciones bajo el mismo punto de vista. Las personas que se encuentran endeudadas no tiene otra prerrogativa que la de afrontar sus necesidades y luego satisfacer las necesidades de sus acreedores, conforme al plan de Dios. Siempre hay que analizar todos los gastos a la luz de estas categorías. 2.

Lo esencial de la inda. El cristiano que se encuentre endeudado no tendrá más remedio que evitar todo gasto que no sea absolutamente esencial para vivir (Proverbios 21:17). Busca aquellos servicios, en la casa, que se puedan realizar sin un to exterior, además de empezar a desarrollar algunas habilidades para acer trabajos en la casa. Utilizando estas habilidades personales, podrás reducir anos de esos gastos que no son realmente esenciales. Apren a sustituir, utilizando aquellos objetos que menos valor pierdan. Por ejemplo, al comprar electrodomésticos, escoje los que sean menos complejos; ya que los componentes básicos siguen siendo los mismos. Sigue

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El plan de Dios para la li bertadfinanciera usando el mismo coche a pesar de que estés aburrido de utilizarlo. Aprende a conservar. Elimina los gastos que no son esenciales, recordando que muchas veces damos por hecho que un gasto es esencial por el sencillo hecho de que la sociedad así lo considera. Hace tan sólo cincuenta años, todos los trabajos que había que hacer en el hogar las hacían los mismos miembros de la familia, no profesionales a los que era preciso pagar. Los cristianos que viven en esta clase de esclavitud deben de pensarse muy en serio las cosas que pueden hacer ellos mismos en su casa. Y una vez que hava empezado

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El plan de Dios para la libertad financiera deudas?" Ese es un error muy corriente que no hace, en realidad, otra cosa que tratar el síntoma en lugar de atajar el problema. Recuerdo muy bien a un joven matrimonio que se encontraba en una precaria situación económica debido precari uso de las tarjetas de crédito. Debían más de veinte mil dólares y pagaban todos los años más de cuatro mil dólares nada más en intereses. Dentro de esa clase de planes les parecía razonable vender su casa y aplicar el dinero a saldar la deuda. Lo hicieron, pero al cabo de un año volvía a deber seis mil dólares y, además, se habían quedado sin su casa, por hacer uso de la tarjeta de crédito. ¿Qué había sucedido? Que se había tratado un síntoma en lugar de un problema. El problema consistía en una actitud en lo que se refería a las tarjetas de crédito. Me aseguraron que no volverían a utilizar tarjetas de crédito, pero sin encontrar un plan para que dejasen de utilizarlas, no pasó mucho tiempo antes de que cayesen de nuevo en la trampa. Tan pronto como necesitaron algo y no tuvieron el dinero necesario para adquirirlo, sacaron la tarjeta de crédito. El principio es este: si estás endeudado por causa del uso poco apropiado de las tarjetas de crédito, deja, de verdad, de utilizarlas. Una de las mejores cosas que se pueden hacer con una tarjeta de crédito cuando se está endeudado es precalentar un horno, a su más elevada temperatura y meter dentro la tarjeta de crédito. A continuación envía por correo la tarjeta a su banco y decirles que no te vuelvan a enviar una tarjeta de crédito. Incluye en la carta el plan que tienes para pagar la deuda en la que has incurrido por culpa de la tarjeta de crédito, y entonces tómate muy en serio comprar solamente pagando al contado. Una vez que se han creado buenos hábitos y se ha dejado de ser esclavo por causa del uso de las tarjetas de crédito, evalúa si es factible convertir tus valores en dinero para poder empezar a pagar tus deudas. De esta manera no estarás sencillamente tratando el síntoma. Una vez que una persona haya gastado más de lo que le permite su economía, es necesario que sacrifique algunos de sus deseos y sus caprichos a fin de ponerse al día en sus deuda; de lo contrario lo que hará será continuar pidiendo préstamos y cada vez estará más esclavizado. 5. Evita las influencias. Cuando te encuentres endeudado evita utilizar las influencias o el sistema palanca que es la habilidad de controlar un valor grande por medio de una cantidad de valor invertido relativamente insignificante. Por ejemplo,

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si has comprado una propiedad que te ha costado diez mil dólares y has tenido que pagar como depósito mil dólares, eso representa un alzaprima de nueve a uno, pues has invertido el diez por ciento de tu dinero y te han tenido que dar un préstamo de un noventa por ciento. El conseguir un préstamo para invertir no es un principio bíblico porque el devolver el dinero al banco depende de que la persona que ha pedido el préstamo obtenga unos beneficios, pero si no se obtienen y la persona que ha hecho la inversión no puede realizar los pagos, pierde la inversión y sigue debiendo el dinero al banco. ¿Cuál es, pues, el resultado? La esclavitud financiera. Permíteme aclarar un punto sobre esta clase de situaciones. Digamos que la entrada del diez por ciento la haces de tu propio dinero y el valor de la propiedad asegura el otro noventa por ciento. De no poder efectuar el pago, sencillamente devolverías la propiedad perdiendo e l diez por ciento. De este modo no sería una deuda, sino un contrato. Comprende que aunque un alzaprima por sí mismo no está en contra de los principios bíblicos, puede caer dentro de la categoría de un plan para enriquecerse rápidamente si se usa de un modo excesivo. 6. Practica el ahorro. El cristiano debería practicar el ahorro sobre una base regular. Esto incluye a las personas que viven endeudadas, aunque sea sólo una pequeña cantidad como puedan ser cinco dólares al mes porque al menos ayuda a crear el hábito del ahorro. Esto no significa ahorrar dinero a expe nsas de los acreedores, pero una de las mejores costumbres que puede adquirir un joven matrimonio es el del ahorrar pequeñas cantidades de manera regular. Toda persona que viva por encima del nivel de pobreza puede ahorrar dinero, ro muchas no lo hacen sencillamente porque están convencidas de que cantidad que pueden ahorrar es tan insignificante que realmente no les vale la pena. Hay quien está convencido de que a Dios no le parece bien que el cristiano ahorre nada. Ninguno de estos conceptos es bíblico. "El sabio ahorra para el futuro, pero el necio derrocha cuanto obtiene" (Proverbios 21:20, Biblia al Día). 7. Da tus diezmos. Todo cristiano debería dar el diezmo como un mínimo de testimonio de que Dios es, efectivamente, el dueño de todo cuanto poseemos. Como ya he mencionado con anterioridad, he de volver a repetir: 'Cómo puede una persona decir que le ha entregado todo a Dios cuando nunca ha dado testimonio de ese hecho? Solamente al compartir hacemos que Su poder en lo que se refiere a la economía se ponga de manifiesto. En todos los casos, Dios desea que le demos a Él la primera parte, pero quiere que además paguemos a nuestros acreedores. Eso requiere establecer un plan y probablemente hacer algu-

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nuestros impulsos, realizamos la compra sin antes conceder a Dios la opor r_ tunidad de mostrarnos cuál es Su voluntad, cuando lo cierto es que El se manifiesta con frecuencia supliendo nuestras necesidades haciendo que o que necesitamos nos venga del lugar más inesperado. Uno de los mayores gozos que puede experimentar el cristiano es vivir la fidelidad de Dios. El Salmo 37:7 (BLA) dice: "Conga callado en el Señor y espérale con paciencia." Dale a Dios la oportunidad de que supla tu necesi antes de ir deprisa, corriendo a comprar lo que necesitas. 8. Acepta la provisión de Dios. p Hay varias cosas que el cristiano debiera hacer antes de efectuar cualPara tener paz en el aspecto financiero de tu vida, es preciso que requier compra que se encuentre fuera de su presupuesto: conozcas y aceptes que Dios utiliza Su provisión para dirigir nuestras vidas. • Orar acerca de las compres. No hay ninguna compra que sea ni de Encontrando el plan de Dios masiado importante ni demasiado insignificante como para que no podamos orar sobre ella. ¿Cómo puedes saber cuál es la voluntad de ¿Cómo puede el cristiano poner en práctica estos principios y encontrar Dios al respecto-si nunca se lo preguntas? el nivel de vida que Dios ha planeado para él? Aquí Aquí ay algunas ideas para • Busca el consejo de la familia. Reune a toda la familia para que comlograrlo: partan esa pe tición ante la presencia de Dios y permite que ellos 1. Considera con cuidado el tema de los ingresos extraordinarios. participen de la bendición de consultar las cosas a Dios en oración. Con frecuencia cuando una familia no puede pagar sus facturas, el • Busca la voluntad de Dios. Aprende a discernir Su voluntad en cuanto primer pensamiento que les pasa por la mente es: "Lo que me ayudará es a tus peticiones, ya que Dios no está obligado a conceder cada uno de tener más dinero". Tal vez el marido acepte un segundo trabajo o la mujer nuestros deseos ya que con frecuencia lo que le estamos pidiendo nos se ponga a trabajar. Pero antes de tomar esta decisión, lo que debe hacer el perjudica. Lo que estamos buscando es la sabiduría de Dios y no la cristiano es examinar si está viviendo fuera del plan de Dios en lo que se nuestra. refiere a sus finanzas. ¿Es el auténtico roblema la falta de dinero o una 3. Mantén una conciencia tranquila. actitud equivocada en lo que se refiere a los gastos? Busca la posibilidad de obtener ingresos extraordinarios solamente una vez Es preciso que el cristiano tenga la conciencia tranquila en lo que se que hayas corregido las costumbres que has adquirido sobre las compras. refiere a sus tratos de negocios y en sus prácticas personales. Si lo recuerCon harta frecuencia, si se analiza sobre papel, una madre que trabaje no das, charlamos con anterioridad en este libro acerca de tratar injustamente estará realmente contribuyendo con más dinero. En muchos casos lo que a otras personas por causa de nuestro egoísmo y de nuestro deseo de sucede es que cuesta más si se tiene en cuenta lo que hay que pagar para destacar. Es preciso que hagamos restitución para vernos libres de esas que alguien se ocupe de los niños, el gasto en transportes y en ropa, ro el actitudes y que cambiemos. mayor sacrificio es realmente el que los niños pierdan la dirección de una Proverbios 28:13 dice: "El que encubre sus pecados nos prosperará, madre. Estoy convencido de que la Palabra de Dios no considera que una pero el que los confiesa y los abandona alcanzará misericordia". El Nuevo madre con niños deba ir a trabajar si para ello ha de sacrificar el bienestar Testamento confirma estas palabras diciéndonos en Mateo 5:24: "Deja tu de sus hijos. Si en la casa no hay niños, o los niños van a la escuela durante ofrenda allí delante del altar, y vé, reconcíliate primero con tu hermano, y el día, entonces deberá ser una decisión individual de esa familia, pero es entonces vuelve y ofrece tu ofrenda". Dios está diciendo: "No le des nada necesario examinar primeramente si no se está racionalizando que no se al Señor mientras hayas cometido una transgresión en contra de tu hermano y no estés dispuesto a buscar la reconciliación". puede vivir dentro de la voluntad de la provisión de Dios. 2. Recuerdo muy bien a un amigo que antes de hacerse cristiano había Pide la nión de Dios tratado injustamente a una persona, desde el punto de vista financiera. Antes de hacer ninguna compra, sea cual fuere la cantidad de dinero Dios le tocó el corazón acerca de esta situación y le indicó que debía de que se va a invertir en ella, rimero concede a Dios la oportunidad de que restituir el daño hecho. Él se puso en contacto con esa persona, confesó lo te provea ese objeto. Mudas veces nos perdemos las bendiciones que que había hecho y se ofreció a remediarlo, pero la persona en cuestión se Dios nos tiene reservadas porque, debido a que compramos siguiendo negó a perdonarle y a tomar ningún dinero de él. nos sacrificios, dejando de lado nuestros deseos y nuestros caprichos, hasta que hayamos acabado de sacrificar nuestras deudas. No se puede sacrificar parte que le corresponde a Dios; esa no es una prerrogativa que esté a nuestro alcance como cristianos. De modo que, ¿cuál es la clave? Si es preciso hacer sacrificios, y casi siempre sucede así, no sacrifiques la parte que le debes a Dios ni lo que corresponde a tus acreedores. Escoje una porción de lo que te queda y sacrfícala.

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Durante un tiempo eso perjudicó el orgullo y la personalidad de mi amigo, hasta que se o cuenta de que si había confesado no lo había hecho para la persona a la que había ofendido. No estaba ofreciéndose a restituir por causa de la pérdida ocasionada, sino por causa de su relación personal con Dios. Pero Dios sí que le había rdonado y él había hecho exactamente lo que Dios le había pedido y, por tanto, no se le pedía que hiciese nada más. 4.

Pon a los demás primero.

El cristiano que pretenda quedar libre, desde el punto de vista económico, deberá poner siempre a los demás primero. Eso no implica que el cristiano tenga que dejarse siempre pisotear por los demás, sino que quiere decir sencillamente que no se va a aprovechar de una situación de desventaja de otra persona. La clave reside, una vez más, en la actitud. A fin de evitar el sentimiento de superioridad económica, es preciso que el cristiano sepa aplicarse la actitud que Dios nos muestra por medio de Su Palabra, en la que nos dice: "Nada hagáis por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de vosotros considere al otro como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás ,, (Filipenses 2:3-4, BLA). 5.

Limita el tiempo invertido.

Además es preciso que el cristiano sepa limitar el tiempo que dedica a los negocios cuando sufren las relaciones familiares. Son muchos los cristianos que se encuentran atrapados por este círculo vicioso que les arrastra a dedicar demasiado tiempo a los negocios o a todo lo que está relacionado con adquirir más dinero. El dinero no es siempre el motivo principal de que le dediquen demasiado tiempo. Con frecuencia lo es su egoísmo, el deseo de escapar o sencillamente la costumbre que empuja a la persona a cometer excesos. Muchas personas dedican demasiado de su tiempo por pura costumbre, sin preguntarde ni siquiera lo que están haciendo, sin preguntarse para qué están ganando ese dinero o para qué les puso Dios en esta tierra. El Salmo 127:2 (BLA) dice: "Es en vano que os levantéis de madrugada, que os acostéis tarde, que comáis el pan de afanosa labor, pues Él da a su amado aun mientras duerme." Es muy importante que no olvidemos que las prioridades de Dios para nosotros están perfectamente claras. La primera de esas prioridades en la vida de un cristiano es que sepa atender su relación personal con jesucristo. No te va a quedar más remedio que entender quién es Dios para poder depositar tu confianza en Él, para que le puedas pedir respuestas y para que, además, sepas esperar esas respuestos. El entender a Dios es algo que se consigue: • Leyendo Su Palabra. Cuando surgen situaciones, podrás tomar las decisiones adecuadas según los principios que encuentres en la Biblia.

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• Orando. Orar quiere decir comunicarse con Dios. ¿De qué otro modo podrás discernir cuál es la voluntad perfecta de Dios para tu vida? • Compartiendo con otras personas esa relación que tienes con Cristo. Eso tampoco quiere decir un testimonio "obligado". La segunda prioridad en la entrega del cristiano es para con su familia, incluyendo su deber de enseñarles la Palabra de Dios. Esa formación requiere una entrega a la unidad familiar, y naturalmente eso implica el que dediques un tiempo también. Cristo merece la mejor parte de nuestro día. Si cuando mejor estudias es por la mañana, levántate temprano y dale un tiempo al Señor. Apaga la televisión, haz que tus hijos hagan sus deberes temprano comenzad a estudiar juntos la Biblia. Es muy importante que toda la familia entienda a Dios y que oréis juntos. Ora, además, por otras personas que se encuentren necesitadas y asegúrate de que tus hijos se den cuenta de que los cristianos, como intercesores, pueden orar por otras personas y esperar obtener una respuesta por parte de Dios. La tercera prioridad en la vida del cristiano debieran ser las actividades de la iglesia, los grupos sociales, de trabajo y todos los hobbíes que ueda tener. Cada cristiano debe considerar muy seriamente si realmente está concediendo a Dios el primer lugar en su vida. Esto es o que podrá realizar fácilmente si mantiene un calendario de veinticuatro oras du una semana aproximadamente. Apunta, cada hora del día, cada una de las actividades que realizas. Observa la cantidad de tiempo que le dedicas a Dios, el tiempo que le dedicas a tu familia, el que inviertes en el trabajo y el que dedicas al placer. No estoy diciendo con esto que Dios espere que le dediquemos ocho horas cada día. Pero cuánto tiempo le dedicas, en realidad, a Dios? ¿Tal vez cinco o diez minutos al día o posiblemente menos que eso todavía? Cuánto tiempo dedicamos normalmente a la televisión o a leer el periódico cuando ese tiempo se lo amos dedicar a Él? Cuando encuentres un equilibrio en tu vida, Dios ara que el tiempo que pases sea más provechoso. Estoy perfectamente convencido de que la mayoría de los cristianos podrían, si planeasen su programa diario como es debido, ajustar los promedios del día apropiadamente y, de ese modo, llegar a hacer incluso más trabajo del que acen. Pero busca un equilibrio. Si tu participación en los negocios requiere que sacrifiques la obra de Dios o a tu familia, eso no es conforme a Su plan.

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Evita ser indulgente.

Para ser económicamente libre, es preciso que todos los cristianos eviten ser indulgentes consigo mismos. El término medio en el cual es posible encontrar cuál es la voluntad de Dios se encuentra entre lo que dice el pasaje de Lucas 9:23, cuando Cristo dijo: "Si alguno quiere venir en pos de

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mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame", y lo que dice Juan 6:27: "Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que permanece para vida eterna, que el Hijo del Hombre os dará, porque en éste Dios el Padre ha uesto su sello". ¿Encaja tu estilo vida entre estos dos extremos? ¿Estás dispuesto a de positar tu confianza en Dios y dejar de ser tan indulgente contigo mismo? Si lo haces, verás que Él te sup lirá cada vez más y más. Desgraciadamente, muchos de nosotros somos demasiado indulgentes con nosotros mismos, rara vez negándonos un deseo o un capricho y mucho menos una necesidad. Pero, a la luz de las necesidades que nos rodean, es muy importante que nosotros, los cristianos, examinemos nuestro estilo de vida, ya que la mayoría de nosotros podemos muy bien reducir gastos sustancialmente sin realmente tener que acer que descienda nuestro nivel de vida.

pueden otras personas estar dispuestas a ayudarnos si no son conscientes de nuestra necesidad? A veces nos portamos realmente como hipócritas, no importándonos prestar ayuda a los demás, pero no queriendo nosotros pedir ayuda a las otras personas. No nos importa ofrecer un consejo a una persona que se encuentre en problemas, pero no queremos que los demás se enteren de que nosotros tenemos problemas. Es cierto que no tenemos necesidad de publicar nuestros problemas por toda la comunidad cristiana, pero permite por lo menos que otros tengan oportunidad de ejercitar su ministerio. Si lo consideras necesario, busca la ayuda profesional para enderezar tu economía. En un caso así yo aconsejaría buscar solamente a un consejero cristiano ya que, aunque se pueden obtener buenos consejos financieros de una persona que no sea cristiana, los no cristianos no pueden entender mudas de nuestras metas. Vemos que Dios describe con toda claridad cuándo un cristiano se encuentra en esclavitud financiera, así como los pasos que se pueden dar para liberarse de esa esclavitud. Comienza a poner en práctica esos principios y compártelos con otros cristianos.

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7. Busca consejo. Es muy importante que cuando nos encontremos ante la duda sepamos buscar el consejo de algún cristiano capacitado. "Sin consulta, los planes se frustran, pero con muchos consejeros, triunfan" (Proverbios 15:22, BLA). Dios nos advierte que debemos buscar el consejo y no confiar tan sólo en nuestros propios recursos. En los planes financieros, son muchos los cristianos que se sienten frustrados porque carecen de los conocimientos necesarios y se dan por vencidos. Pero Dios ha suplido a otras personas que poseen habilidad y nos pueden ayudar en el aspecto de la economía, de modo que lo que debemos hacer es buscar a estas personas para que nos ayuden. La primera persona que debes buscar para pedirle su consejo es tu cónyuge. En muchas ocasiones Dios nos provee la respuesta justo dentro de nuestro propio hogar. Los esposos no deben evitar escuchar el consejo de sus mujeres en lo que se refiere a las finanzas, porque en muchas ocasiones he encontrado útiles las sugerencias de las esposas y han echado luz sobre una situación. En ocasiones los matrimonios pueden llegar a encontrar juntos las respuestas a los problemas económicos que normalmente de buscarlas cada uno por su lado acabaría por hacerles sentirse frustrados. Tampoco dejes de escuchar los consejos de tus hijos. Permite que ellos estén al corriente de tus problemas. Que se enteren y comprendan por qué es preciso ajustar tu forma de vida. Infórmales que el ir a patinar, a montar en barca u otras formas de recreo posiblemente no acaben de encajar dentro de tu nuevo presupuesto, ayudándoles a que se acoplen a los cambios que resulten necesarios. No te limites a darle órdenes, lo mejor es que mantengas una comunicación con ellas. Da a conocer a otros cristianos tu necesidad de que alguien te aconseje. Con demasiada frecuencia damos la impresión falsa de que no tenemos ningúna necesidad de ayuda y que no tenemos ningún problema. ¿Cómo

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5 cómo Planear un Programa Financiero CAPÍTULO

E 1económico, hacer planes es un elemento esencial para cualquier p rama pero es especialmente importante en el caso le los cristianos, aunque con demasiada frecuencia los cristianos discuten si es necesario hacer planes. Aquellos que argumentan diciendo que no es necesario hacer planes están malinterpretando lo que Dios dice acerca de las finanzas. Argumentan, afirmando que Dios no espera que nosotros hagamos planes, sino que espera que dependamos de Él para todas las cosas. Mientras que hay otros cristianos que están a favor de que hagamos planes para cada segundo de nuestra vida. De acuerdo con esta idea, tienen unos planes tan inflexibles que lo cierto es que no pueden responder ya al liderazgo de Dios y también eso es una equivocación. La respuesta se encuentra normalmente entre estos dos extremos. Dios provee dentro de un orden y espera que nosotros hagamos lo mismo. El mundo ffsico en el que vivimos no es caótico, sino que es un mundo ordenado y bien planeado. El universo se mantiene dentro de su curso precisamente porque Dios ordenó que así fuese y los átomos se mantienen unidos porque Dios ordenó que fuese de ese modo. La economía es otro de los aspectos de la vida del cristiano que Dios desea dirigir. Si nosotros somos mayordomos y Dios es el propietario, lo que debemos de buscar, sin duda, es Su sabiduría. Por lo tanto, debemos referirnos a la Palabra de Dios a la hora de hacer nuestros planes. Una actitud transformada Lo primero que tenemos que hacer es cambiar radicalmente nuestra actitud, pero es preciso hacer algo más que hacer un intento inicial por crear un plan. Es preciso que para empezar idees un plan, conforme a la convicción de Dios y utilizarlo, aplicando a tu vida los principios de Dios.

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Si haces unos planes que resulten inflexibles, lo único que harán será actuar como impedimento en la obra de Dios porque no te será posible vivir dentro de esos planes. Haz, por lo tanto, unos planes que te sirvan de guía en tu vida financiera, pero que al mismo tiempo provean y permitan alguna distracción y gozo personal.

desgracia la mayoría de nosotros hacemos caso omiso de él. ¿Cómo puede nadie pretender dirigir un hogar sin haber coordinado antes los ingresos y los gastos? Son necesarias unas actitudes importantes a la hora de crear un plan económico sólido y básico para la familia. Los planes caen en dos áreas: los planes y metas a corto plazo y los a largo plazo.

La flexibilidad No hagas planes que dependan enteramente de los aumentos económicos. La sabiduría de Dios se puede manifestar también por medio de la reducción, si es necesario, a fin de dirigir nuestra vida por otros derroteros. Como es natural, a todos nos daría una enorme alegría poder participar tan solo en aquellos planes que resultasen económicamente ventajosos, pero en algunas ocasiones se realiza la voluntad de Dios mediante una pérdida en lugar de mediante la ganancia. Pablo nos dice en Filipenses 4:12-13 (BLA): "Sé vivir en pobreza, y sé vivir en prosperidad; en todo y por todo he aprendido el secreto tanto de estar saciado como de tener hambre, de tener abundancia como de sufrir necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece." Nosotros deberíamos tener la misma perspectiva a la hora de hacer nuestros planes. Normas • El cristiano debe aprender a poner en práctica la paciencia y la moderación en cada una de sus decisiones, de aspecto financiero. • Tener una actitud positiva a la hora de tomar sus decisiones. • No participar nunca en la toma de decisiones económicas que requieran una acción inmediata, sino permitir a Dios seguir Su curso. La diferencia que existe entre una ganancia y una pérdida pudiera muy bien ser la de la actitud con la que afrontamos las inversiones financieras. • Evitar a todo recio cualquier plan para enriquecerse rápidamente, por muy tentador que sea. • Aferrarte a tus planes, siempre que sientas paz en lo que a esos planes se refiere, ya que son planes que atañen a tu vida. • No seas inflexible, pero no cambies tus planes sencillamente porque alguien te diga algo diferente. cuidadosamente; La mayoría de los negocios que fracasan lo hacen debido a una falta de dirección o por falta de capita que lo respalden. No tienen unos planes adecuados y resulta de todo punto inútil dirigir un negocio sin contar con un plan ara que fluya el dinero (con ingresos en lugar de gastos) para dedicar los recursos a pagar las facturas. Cómo puede ninguna persona sacar adelante un negocio sin saber de dónde ha de proceder el capital? Dios tiene exactamente el mismo plan para el hogar cristiano, pero por

Planes a corto plazo y las metas Los planes a corto plazo son los que están sucediendo hoy y que requieren nuestra atención hoy mismo, puesto que estos planes son los que se basan en las situaciones de todos los días. Por ejemplo, es preciso que el ama de casa cuente con un plan a corto plazo a la hora de pe nsar en hacer frente al gasto de comprar alimentos todos los días. Eso habrá de incluir la cantidad de alimentos que necesite comprar y la clase de alimentos que precise adquirir. Si no hace ningún plan, no le quedará más remedio que salir corriendo a la tienda a comprar más alimentos antes de cada comida. Y de la misma manera, será preciso contar con un plan para poder pagar las facturas. De lo contrario, cuando reciban la nómina parecerá como si se la hubiese llevado el viento. La reacción natural es la de gastar todo el dinero y hacer caso omiso de las facturas que no es preciso pagar de inmediato. Pero luego pasa que a la hora de pagarlas no queda suficiente dinero y, evidentemente, ese no es un plan adecuado. En el caso de los negocios, los planes a corto plazo incluyen cosas como el saber qué materia prima se necesita pedir para poder fabricar los productos que posteriormente habrán de venderse. Si un negocio no realizase ningún plan, tendrían que detener la linea de montaje mientras alguien salla a toda prisa a comprar los materiales necesarios. Es evidente que eso no es práctico, de manera que los negocios se fijan unas metas y crean unos planes para llevarlos a cabo. ¿Quién necesita metas? Por lo tanto, según hemos venido observando, todo el mundo realiza planes a corto plazo o se fija unas metas. Algunas se han meditado otras se han planeado más al azar. Si la meta que te has fijado a corto plazo es la de ganar dinero, debería revisarla porque ese no es un objetivo cristiano. El tener dinero como meta significa en realidad que deseas depender de ti mismo en lugar de depender de Dios. Como ya descubrimos con anterioridad, el mero hecho de ganar dinero no te enriquece espiritualmente (Proverbios 2:4-5) pero el hacer algo que Dios te haya guiado a hacer, eso sí que te enriquecerá espiritual y económicamente. Todo cristiano que jamás se haya propuesto como meta el ganar dinero puede testificar que eso no satisface. ¿Cuáles

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Es igualmente importante que las esposas y las madres se destaquen en lo que hacen. Normalmente la madre se convierte en la maestra "habitual' en el hogar y normalmente sus hijos reflejan sus actitudes. Si ella se destaca en lo que hace y mantiene su casa ordenada y bien organizada, a ser Planes por escrito una gran ayuda en los planes de la economía familiar. Un plan por escrito nos ofrece un objetivo visible por el cual esforzar2. Limitar el crédito. nos. No hay nada de malo en tener al mismo tiempo una meta mental, Como ya hemos mencionado con anterioridad, una parte de esos planes pero un plan puesto por escrito te ayudará a medir tu progreso. Te permite a corto plazo debía ser el limitar o reducir el uso del crédito. Si estás referirte al objetivo original y a mantenerte en el buen camino. Es imporbuscando el mejor plan que Dios te puede ofrecer, adopta la idea de tate además actualizar, de manera periódica, para que se reflejen nuevas comprar solamente pagan al contado siempre que sea humanamente Uno de los ejemplos de un plan escrito en la familia es el posible.rut Algunos cristianos dicen con frecuencia: «Eso no es posible en la actualUn presupuesto tiene muchas unciones. Te mostrará dónde te encuentras ¡dad en nuestra sociedad . necesitamos a toda costa las tarjetas de crédito". económicamente hablando, lo que te estás gastando en esos momentos y Eso es totalmente falso. Muchísimas familias cristianas viven sobre una cuánto puedes permitirte gastar según los ingresos con los que cuentas en base de no utilizar el crédito y hace ya varios años que viven de ese modo la actualidad. (a excepción de la hi teca de la casa). No cabe duda que eso requiere "Son mu las familias si es que ha cuentanqcon un mejores y más tallados planes y es preciso establecer los privilegios y pocas que que haynoalguna, hacer plan económico escrit o a la vez, no experimentan problemas financieros". en lo que se refiere cambiar los cheques por dinero al contado en la Por consiguiente, sus vi económicas son un absoluto caos. Apenas si tienen mayoría de las tiendas, pero se puede hacer. El resultado será tener la idea de lo mucho que deben o a dónde va a parar el dinero. Por lo tanto, es maravillosa sensación de estar libres al no tener que enfrentarse con deufácil predecir que al llegar el final de mes la reacc ión es: "No tengo ni idea a das. dón va a parar tanto dinero; pienso que no nos cuesta todo eso vivir'". Por eso Eso no quiere decir que el cristiano no pueda hacer uso de las tarjetas es por lo que resulta tan esencial tener un plan escrito para la familia. de crédito. Siempre y cuando las cuentas estén pagadas al día y no exista violación alguna los principios bíblicos pero lo cierto es que son muchos los cristianos que abusan de =l le 'os del crédito y, por ello, deben deMetas a corto plazo jar de utilizarlas. Lama ría n , en realidad, con el propósito 1. U excelencia de evitar gastar más de cuenta. Dios desea que, como cristianos, nos destaquemos en todo lo que po3. Fija tus propias metas. damos, haciendo lo mejor que nos sea posible. Con demasiada frecuencia los cristianos racionalizan que, por algún motivo, forma parte del plan de Fija tus metas en relación con lo que Dios te pida que hagas y no lo que Dios no ser los rimeros, sino los segundos. Por eso, parecen siempre tu vecino te pida que hagas. quedarse rezag a, no alcanzando nunca todo su potencial por temor a Es demasiado fácil dejarnos arrastrar por la locura de los planes ideados que otras personas les puedan considerar unos egoístas. por otra persona. Nos da la impresión de que a otros les va muy bien y nos Pero la verdad es que el cristiano se puede destacar en cualquier cosa que dejamos convencer para participar en esas ideas tan descalabradas. haga sin que por ello tenga que ser considerado un egoísta. Pablo se Desgraciadamente, muchas personas a las que les gusta su profesión o destacó sin ser egoísta por ello. Simón Pedro también se destacó, a pesar su negocio se sienten frustradas porque han visto a otra persona que está de que siguió siendo un hombre humilde. Cada uno de ellos conocía bien ganando más dinero por haber participado en alguna empresa especulativa. su fuente de poder, cada uno de ellos sabía bien lo que Dios le había Por consiguiente, se dejan arrastrar y participan en un programa acerca del pedido que hiciese y ninguno de ellos estaba dispuesto a ace tar otra cosa cual conocen muy poco o nada. El resultado habitual es que aprenden una cara lección en economía. Hay un número ilimitado de modos de perder que no fuese la excelencia. También nosotros deberíamos aspirar a la dinero y uno de los mejores es siguiendo los malos consejos acompañados excelencia como parte de las metas que nos fijamos a corto plazo. de una cierta envidia. Primera de Pedro 4:11 (BLA) dice: "El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve, que lo haga por la fortaleza que Dios 4. Trabaja para honrara Dios. da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo. . . ." Hemos Cada cristiano debería detenerse a examinar los siguientes puntos: de utilizar nuestras habilidades para la gloria de Dios. son las metas a corto plazo, desde el punto de vista de Dios? ¿Cómo podemos nosotros hacernos un plan que nos ayude a realizarlas?

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• ¿Es mi negocio siempre un ejemplo de la vida cristiana? • ¿Será cada una de mis acciones, día tras día, un testimonio apropiado acerca de Cristo? • ¿Puedo hacer mi trabajo y al mismo tiempo honrar a Dios? • ¿Trata la compañía en la que trabajo de manera ética a las personas? • ¿Estoy ayudando a otros a violar los principios en los que yo creo? • Estoy realmente ofreciendo un servicio o sencillamente satisfacienmis propias ambiciones? Esas son preguntas que todos los cristianos deberían hacerse si el trabajo que realizan ha de honrar verdaderamente a Dios. Por ejemplo, estoy convencido que el negocio de los seguros puede ser un gran servicio de cara a las familias, pero con demasiada frecuencia se promueve sobre la base de los beneficios que ha de obtener el vendedor en lugar de tener en cuenta las necesidades del cliente. Con frecuencia se ofrece a la persona seguseguridad a un elevado precio o sencillamente muy muy ridad. Son pocos los vendedores que ofrecen calidad y cantidad 1eseguro que encaje exactamente con las necesidades de la persona que ha de adquirir dicho seguro. No cabe duda de que el hacerlo requeriría más tiempo y un mayor esfuerzo, pero a la postre, no solamente prosperará el vendedor, sino que el comprador se convertirá en un representante que dirigirá a muchas personas a ese vendedor. atas 6:9 (BLA) dice: "No nos cansemos de hacer el bien, pues a su tiempo, si no nos cansamos, segaremos".

ellos se dejan atrapar por una rutina diaria dogmática. Tienen un mínimo de metas a corto plazo y apenas si se han fijado ninguna meta a largo plazo. Es comprensible, por lo tanto, que muchos de ellos se encuentren, después de haber estado trabajando durante cuarenta o cincuenta años, con una acumulación de riqueza y en un dilema en cuanto a qué hacer con ese dinero. Otras personas se encuentran rodeadas de problemas económicos, sin tener un plan determinado de acción. Los cristianos deberían de visualizar sus objetivos económicos a largo plazo. No todos los cristianos serán ricos, ni tienen por qué tener una posición económica desahogada, pe ro todo el mundo, tanto si es rico como si no, tiene una responsabilidad de planear bien, de tener unos objetivos apropiados y sólidos y a hacer siempre las cosas conforme a los principios de Dios. El cristiano debe fijarse unas metas a largo plazo solamente de haber orado de manera consistente, tanto a nivel personal com miliar Los sigui entes principios bíblicos deberán actuar como piedras de ángulo en todas estas metas que se fije.

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Hazte un plan para compartir. Una de las primeras metas que debe fijarse una familia cristiana es el tener como norma dar el diezmo, es decir, la primera parte de sus ingresos. Con frecuencia este paso es el más difícil pero es al mismo tiempo el más remunerador. ¿Por qué? Porque es un testimonio material que da fe de una entrega espiritual. 5.

a

Acepta la necesidad de hacer planes Lo primero que debes hacer es reconocer que necesitas hacer planes a largo plazo. De la misma manera que en los panes a corto plazo, deberías poner r escrito tus]? lanes a largo plazo. Con frecuencia, al poner por escrito que esperas llevar a cabo, dios te permite tener una perspectiva de Su plan. Tus metas a largo plazo deberán reflejar tus objetivos económicos personales, un plan para hacer frente a los sobrantes e incluso realizar un plan para después de tu muerte. Metas a largo plazo 1.

Planes a largo plazo Ad~ de los planes a corto plazo, el cristiano necesita estudiar las metas que tiene a largo plazo. Cualquier plan económico del cristiano deberá armonizar con las metas a largo plazo que se hayan fijado después de haber orado al respecto. • ¿Qué es lo que debemos realizar aquí en la tierra? • ¿Cómo podemos llevar a cabo el plan de Dios? Si Dios te bendice con una abundancia de dinero, ¿qué harás con ese dinero? • ¿Qué clase de plan has hecho en caso de que suceda? Demasiados cristianos se pasan toda la vida sin fijarse unas metas, en oración, sobre el uso que habrán de dar a sus posesiones. Muchos de

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Ponte una meta como máxima.

Un cristiano debería tener una meta que le permitiese pensar cuánto desea acumular, el máximo, no el mínimo. Piensa en términos de almacenar como provisión en lugar de hacerlo como protección. Los cristianos que tienen unos objetivos económicos mínimos no han llegado realmente a estudiar lo que está sucediendo dentro de la economía. Es posible que Dios haya pedido a algunos cristianos que almacenen teniendo en cuenta las necesidades futuras de otras personas, pero se trata una vez más de la actitud. ¿Cuál es tu actitud? ¿La de compartir o la de amasar riquezas? Cuando Dios envió a José a Egipto, ¿acaso amasó los alimentos que fue adquiriendo o los almacenó para cuando pudieran ser necesitados? No cabe duda de que las personas que no estén dispuestas a compartir en los buenos tiempos no lo arán cuando lleguen los tiempos difíciles.

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Cómo planear un programa financiero

Una vez que se haya establecido una meta máxima, dejará de tener i mportancia la opinión que tengan nuestros iguales y la verdad de Proverbios 11:28 (BLA) será mucho más aparente: "El que confía en sus riquezas, caerá, pero los justos prosperarán como la hoja verde." Aquellos que no saben reconocer este hecho han sido ya reconocidos por el Señor. Ezequiel 7:19 afirma: "Arrojarán su plata a las calles, y su oro se convertirá en cosa repugnante. Ni su plata ni su oro podrán librarlos en el día de la ira de Je ova, ni saciarán su apetito ni llenarán sus estómagos; porque esto ha sido ocasión para su pecado."

dice: "Es mejor lo poco con justicia que gran abundancia sin derecho". Es muy im rtante que seamos honestos en todos nuestros planes, pues no existen las pequeñas mentiras; son mentiras a secas. No hay pequeños hurtos; son sencillamente robos.

2.

Plan para usar la abundancia

Deberías fijarte un plan a largo plazo para ese exceso que Dios te supla. ¿Cuánto de ese dinero deberías devolver para que fuese utilizado en la obra de Dios? ¿Qué parte debes dedicar a suplir las necesidades de tu familia? ¿Cuánto puedes invertir? ¿Debes realmente suplir todo lo que te piden tus hijos? (En muchas ocasiones para excusarnos a nosotros mismos por trabajar demasiado, compramos cosas a nuestros hijos en lugar de pasar tiempo con ellos.) Cada cristiano debe examinar por r sí mismo el plan que Dios pueda tener para ese exceso o sobreabundancia de dinero. Sin embargo, Dios nos ofrece algunas directrices muy claras al respecto. En 1 Corintios 3:12-13 afirma: "Si alguien edifica sobre este fundamento con oro, plata, piedras preciosas, madera, heno u hojarasca, la obra de cada uno será evidente, pues el día la dejará manifiesta. Porque por el fuego será revelada; y a la obra de cada uno, sea la que sea, el fuego la probará. ¿Cuál es esta obra a la ue Dios se refiere? Apocalipsis 2:19 nos da la respuesta: "Yo conozco tus oras, tu amor, tu fidelidad, tu servicio y tu perseverancia; y que tus últimas obras son mejores que las primeras." ¿Podrá Dios decirte cuando regrese: "Bien hecho, buen siervo y fiel" (Mateo 25:21, RV60)? Fijate un plan sobre lo que harías si te sobrase el dinero por si sube la oportunidad y tienes la capacidad para ello. No cuentes con acontecimientos futuros para que sean de apoyo ala obra de Dios. Si tienes dinero almacenado y Dios pone ante ti una necesidad, da de inmediato, pudiendo incluso ser necesario que ha as caso omiso de algunas ventajas con respecto a los impuestos. Hay mudas personas que retienen sus inversiones por el deseo de aprovecharse de algunas ventajas de los impuestos y sus leyes. No estoy diciendo que no esté de acuerdo con la lógica de esa idea, pero prefiero tener a Dios como socio de una empresa que al gobierno. 3.

Obedece a los principios de Dios

Al preparar tus planes a largo plazo, presta una especial atención a los principios de Dios: La honestidad. No te dejes atrapar nunca por nada que no sea ético, inmoral o deshonesto, por muy tentador que te parezca. Proverbios 16:8

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Bienestar de los empleados. Los patrones cristianos tienen una absoluta responsabilidad en lo que se refiere a cuidar bien de sus empleados. Por lo tanto, una parte de los planes que hagas relacionados con tu negocio tienen que ver con el bienestar de tus empleados. Si esperas que tus empleados trabajen bien a lo largo de todo el día, págales lo que es justo por un día de trabajo. Una parte de los beneficios que obtiene una compañia pertenecen no solamente a los dirigentes, sino a los empleados. Dios nos ofrece un plan personal de dirección que revolucionará los negocios, pero con harta frecuencia los patrones cristianos dedican más atención a ganar dinero que a interesarse por el bienestar de sus empleados. En 1 Timoteo 5:18 se nos dice: `Porque la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla. Además: El obrero es digno de su salario." Los jefes cristianos no solamente tienen una autoridad adicional, sino una responsabilidad adicional. Interés por otras personas. Con frecuencia surjen oportunidades que permiten que nos aprovechemos injustamente de otras personas. Pero es preciso que estemos preparados para evitar caer en semejante tentación. "No robes al pobre, porque es pobre; ni oprimas al afligido en las puertas de la ciudad. Porque Jehová defendará la causa de ellos y despojará al alma de quienes los despojan" (Proverbios 22:22-23). Obedece a la ley. Dios exige que obedezcas a la ley a la hora de realizar planes a largo plazo. Me estoy refiriendo en concreto a las leyes de los impuestos. Hay dos términos que describen la planificación para los impuestos. Una de ellas es la de evitar los impuestos, aprovechando todos los remedios leales disponibles bajo la ley actual, mientras que la otra es la de la evasión de los impuestos, lo cual implica valerse de todos los remedios legales así como de algunos que no están permitidos dentro de los limites de la ley. Lo cierto es que la linea de separación que existe es tan estrecha que es fácil de cruzarla. En mi labor como consejero, me encuentro con muchos cristianos que racionalizan el hecho de que violen las leyes relacionadas con los impuestos. Hay personas que no robarían un banco por nada del mundo, pero que sin embargo justifican el robar al gobierno. El evitar, por medios ilegales, el pagar la deuda que se debe es sencillamente robar. Resulta fácil racionalizar diciendo que el gobierno es una institución grande e inflexible, pero sigue siendo robar. Proverbios 15:27 dice: "El que tiene ganancias injustas perturba su casa, pero el que aborrece el soborno vivirá". Aprovecha al máximo cualquier ley que exista relacionada con los impuestos: dando para causas de caridad,

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cosas que son exentas de impuestos, la devaluación, los gastos otro paso, pero ándate con mucho cuidado para no pasarte verte involucrado en evasión de impuestos y robo. 4.

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La familia y sus finanzas

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cualquier la raya y

Un plan familiar a de plazo Un plan familiar para afrontar la vida. Es preciso que el cristiano sepa

tener un plan concreto para su familia, a largo plazo. ¿Qué es lo que tú deseas para tu familia? ¿Has reunido alguna vez a tu familia con el propósito de orar juntos acerca de la manera en que Dios desea que viváis? A Dios le interesa la casa en donde estás viviendo, el coche que conduces, el lugar donde trabajas, si tu esposa debe trabajar o no, la universidad de tus hijos e incluso la comida que tomáis. ¿Has orado alguna vez acerca de estas cosas? Si no lo has hecho, ¿cómo puedes tener la esperanza de decidir cuál es la voluntad de Dios para tu familia? ¿Puedes tú acumular lo suficiente, de cara al futuro, como para proteger a tu familia? Lo más que puedes hacer es proveer sus necesidades a corto plazo. Pero Dios tiene un plan mejor que ese ara todo aquel que busca su sabiduría. Cuando Dios nos dice: "No estéis para eso no significa, r supuesto, que no tengamos ningún interés o que seamos unos imprudentes. Hay una clara diferencia entre reocupación y estar preparados e interesados en algo. Más adelante halaremos sobre cómo puedes hacer planes para que tú familia utilice los principios de Dios. Establece unas prioridades. Las metas que te pro ongas alcanzar a largo plazo deberán de concentrar la atención sobre las prioridades de carácter económico. ¿Recuerdas de la manera que definimos las prioridades relacionadas con las necesidades, lo que queremos y los deseos? Las necesidades son aquellas cosas que son indispensables para que podamos seguir viviendo; nuestros deseos son los que nos empujan a mejorar el nivel de vida; y los caprichos, por así decirlo, son los lujos típicos de una vida de lujos y de cosas que son realmente superfluas. Acuerda esas prioridades juntamente con tu familia, especialmente con tus hijos. Ayúdales a que entiendan la diferencia que existe entre una necesidad, un deseo y un capricho. Cuando vengan tus hijos con una petición, habla con ellos si se trata de una necesidad, un deseo o un capricho. Si es una necesidad, deberás suplirla. Eso incluye, como es natural, la atención médica, del dentista, los alimentos, la ropa o un lugar para vivir, todo ello dentro de unos limites. Pero si es algo que deseas o sencillamente un capricho, deberías poder aclararlo y decirle que si lo quiere, lo mejor que puede hacer es ganárselo. Cuando los niños se enteran de que es preciso que se ganen lo que quieren, se amoldan rápidamente. Entonces empiezan a pensar si quieren más un tebeo o un bate para jugar al béisbol o si prefieren un juguetito que es una tontería sin importancia en lugar de una moneda para su colección.

Sé consistente y justo, pero firme, ns nd o q ut dé a, misma manera que Dios no nos concede caprichos q e lo que hacen es obrar en detri-mento de nuestra vida, tú debes de actuar de igual modo conresp ctoatus hijos. Ten un plan para compartir en familia. ¿Por qué ha de confiarte Dios un exceso de dinero? ¿Administra bien tu familia el dinero? ¿Entienden tus hijos la actitud correcta con respecto a las posesiones materiales? ¿Qué plan tienen los otros miembros de tu familia en lo que se refiere al dinero que ganan? ¿Están dispuestos a dar su diezmo abiertamente y de modo voluntario, sin que tengas que presionarles? Haz que participen en tus decisiones y orad todos juntos como familia. Crea un plan de herencia. ¿Tienes un plan en cuanto a lo que vas a dejar a tu familia cuando mueras? ¿Tienes un plan que se base en la provisión y no en la protección? Espero que para ahora te hayas dado cuenta ya de que te es imposible proteger a tu familia y que aquellas personas que almacenan grandes cantidades de dinero, invertido en seguros de vida, para poder proteger a sus familiares cuando fallezcan lo único que están haciendo es engañarse a sí mismos. Intentamos levantar gigantescas murallas alrededor de nuestra familia porque estamos convencidos de que es necesario protegerlos en contra de todo, pero hay una manera mucho mejor de hacerlo. El plan que Dios tiene revolucionará nuestro concepto de la protección. En una sección posterior examinaremos la cantidad adecuada para una propiedad o un plan de herencia. Ten un plan en caso de eventualidad. Es preciso que cl hombre cristiano tenga un plan en caso de eventualidad por si acaso amontona riquezas con más rápidez de lo que se esperaba. Las Escrituras son muy claras al respecto; es preciso compartir el exceso que Dios nos da. En Proverbios 11:24-25 encontramos: "Hay quienes reparten, y les es añadido más; y hay quienes retienen indebidamente, sólo para acabar en escasez. El alma generosa será prosperada, y el que sacia a otros también será saciado." Ese es el plan que Dios tiene para los cristianos, pero a menos que tengamos un plan predeterminado para esos aumentos, los gastos deberán amoldarse con el fin de compensar los aumentos adicionales. Por consiguiente, no habrá nunca un exceso para compartir.

6 ¿Por Qué Acumular Riquezas? CAPÍTULO

imos con anterioridad cuál era la definición biblica acerca de la riqueza, reconociendo que no solamente estaba relacionada con nuestro dinero, sino con nuestros hogares, nuestra familia, nuestras habilidades, nuestra inteligencia, nuestros estudios, en fin, con todo cuanto tenemos. Descubrimos también que la perspectiva que tiene Dios con respecto a nuestras riquezas se centra siempre en la actitud que adoptamos nosotros. No olvidando esto, hemos de preguntar: ¿Por qué las personas se empeñan en acumular riquezas? Acumular significa mucho mas que guardar y se refiere también a ganar, utilizar, gastar y compartir la riqueza. Como hemos explicado ya antes, el dinero se puede usar para la comodidad y la conveniencia de nuestras familias. Se puede utilizar para proveer l as necesidades de otras personas, pero también para extender el Evangelio. O se puede usar para propósitos destructivos (como pueda ser el comprar bombas o escopetas). La actitud decidirá sus usos, de manera que es de vital importancia descubrir las actitudes que Dios desea que tengamos. ¿Por qué nos permite acumular riquezas? ¿Cuáles son las limitaciones con respecto a lo que podamos llegar a acumular? ¿Podemos nosotros definir cuál es la voluntad de Dios de manera que podamos disfrutar la paz que Él nos ha prometido? El dinero, si lo usamos mal, como en el caso del jóven rico (Mateo 19:16-30) hasta el punto de convertirse en el objeto de nuestra devoción, siendo idolatría. El amor al dinero ha llegado a separar a las familias y ha destruido las amistades. Muchos matrimonios se han ido cada uno por su lado por causa del amor al dinero y al mal uso que han hecho de él. Por lo tanto, es preciso que los cristianos examinen detenidamente por qué acumulamos dinero a la luz de los principios de Dios.

V

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¿El ministerio del dinero? Muchos cristianos tienen una especial habilidad para acumular enormes cantidades de dinero. Prácticamente todo el mundo posee el potencial necesario para acumular un exceso de dinero. Lo que nosotros en este país consideramos como un nivel de vida mínimo está muy por encima del nivel que existe en otras partes del mundo. No es algo extraordinario el enterarse que una persona determinada ha vivido con unos ingresos fijos con el propósito de acumular cientos de miles de dólares y lo ha hecho ahorrando y sacrificando como un avaro. Con este potencial, es de vital importancia que la actitud de Dios acerca de la acumulación del dinero se convierta en parte de nuestra personalidad. Dios proveerá un ministerio que puedan llevar a cabo ciertos cristianos y ese plan formará siempre parte de Su plan, pero será un ministerio mediante el cual puedan compartir, no uno caracterizado por el egoísmo. El cristiano que se empeña en considerarse dueño de su dinero lo único que está haciendo, en realidad, es saltarse a la torera la voluntad de Dios. Otras personas, las que comparten su dinero, de la manera que Dios nos manda que hagamos, reciben las bendiciones del Señor y la más grande cosecha, prometida en las Escrituras. Una vez que un cristiano acepta el dinero como parte vital de un ministerio, se encuentran ante una nueva faceta de Dios ante ellos. En 2 Corintios 9:8 se nos dice: "Poderoso es Dios para hacer ue abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en toda s cosas todo lo necesario, abundéis para toda buena obra". ¿Cuáles son las promesas concretas que se mencionan en este versículo? • Dios hará que Su gracia abunde en cada uno de nosotros. • Siempre tendremos suficiente ara nuestras necesidades. • Tendremos abundancia para con alegría a otros. Si tienes la habilidad necesaria para hacer dinero, es preciso que tengas, como cristiano que eres, el deseo de compartirlo. Si estás ganando mucho dinero y no lo compartes, puedes estar muy seguro que no estás obrando conforme a la voluntad de Dios y es probable que ese dinero proceda de otra fuente. Es importante que nos demos cuenta de que hay muchos mitos religiosos ue se manifiestan en este sentido: el dinero muestra gracia, pero el ganar el dinero es un pecado ¡Eso es falso¡ Dios dice que el dar es un auténtico don. Si el dar dinero es un don que procede de Dios, el ser capaces de

Por qué acumular riquezas?

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ganarlo debe ser también un don procedente de Él. Los cristianos deben aceptar el principio de que no hay nada de malo en ganar dinero, siempre y cuando lo hagamos conforme al plan de Dios. No transgredas los principios establecidos r Dios. Recuerda los sínto mas: el sacrificar a las amistades, a la familia, salud y la relación personal con Jesucristo por obtener la riqueza; actitudes caracterizadas por amargura, ansiedad, frustración o preocupación. Lo mismo se aplica a las personas que no han aprendido a vivir conforme a la provisión que Dios ha suministrado para ellas. ¿Por qué hay personas que acumulan riquezas? Recuerda el ámbito de la voluntad de Dios en las Escrituras. Una vez que hayas entendido los limites del plan de Dios podrás evaluar tu propia postura. 1. Otros nos aconsejan. Hay muchas personas que hacen inversiones, que participan en negocios o en otras empresas sencillamente por el hecho de que alguien les ha aconsejado que lo hagan, ya que no tienen ningún plan o meta personal. La mayoría no tienen un plan ni a corto ni a largo plazo. Si Dios les supliese dinero en abundancia, no tendrían realmente un plan que les permitiese compartirlo, invertirlo ni ahorrarlo. Se limitan sencillamente a entregar sus recursos económicos a un programa determinado porque otra persona considera que es una buena idea que lo hagan. Pero normalmente estas personas saben muy poco acerca del uso que deben dar a su dinero y reaccionan ante las fluctuaciones de las inversiones con ansiedad o alarma. ¿Cuál es la actitud correcta? En Proverbios 15:22 Dios nos dice: "Donde no hay consulta los planes se frustran, pero con multitud de consejeros, se realizan". Proverbios 18:15 dice además: "El corazón del entendido adquiere conocimiento". Si hiciésemos una paráfrasis podríamos decir: "El hombre que es inteligente es el que busca a muchos consejeros". Dios aconseja a los cristianos que busquen consejeros para todo lo que hagan; porque si no tenemos quien nos aconseje, nuestros planes fracasarán. Pero en Efesios 4:14 (BLA) Pablo expresa otro aspecto de la cuestión: "Tara que no seamos niños, sacudidos r las olas y llevados de aquí para allá por todo viento de doctrina, por astucia de los hombres, por las artimanas engañosas del error". Por lo tanto, conforme al plan de Dios, es preciso que nos rodeemos de personas que nos puedan aconsejar, especialmente en lo que se refiere a la administración del dinero, pero además es preciso que todo lo sopesemos a la luz de Su Palabra. Busca nuevas ideas, pero antes de hacer algo busca el consejo de Dios y Su dirección y al mismo tiempo déjate guiar por tu

la

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cónyuge porque en muchas ocasiones Dios suple la sabiduría que precisas dentro de tu mismo hogar. Ante cualquier consejo considera lo siguiente. Primeramente, ¿forma realmente parte del plan de Dios? ¿Es com tibie con tus planes? No decidas hacer una inversión por el sencillo echo de que alguien haya tenido una nueva idea. Hazlo solamente porque estés convencido de que realzará tu ministerio y tu vida familiar y por sentir una auténtica paz al respecto.

tianos y los no cristianos. Muchas personas acumulan dinero como si se tratase de un juego, compitiendo continuamente con otras personas. El sistema de este mundo fomenta este concepto sin el menor remordimiento, colocando a los ganadores en un pe destal sin tener en cuenta si jugaron sucio o no para conseguir llegar donde están ahora. Pero el peligro del juego radica en que la situación no tarda en abrumar a los jugadores. Los participantes se dejan llevar de tal modo por la competición que en su empeño sacrifican a su familia, a sus amigos o salud, con tal de salir ganando. Guillermo Ganador es una ilustración de este estilo de vida. Guillermo comenzó esta carrera, "siguiendo el juego" desde su primera juventud. Era la clase de jóven en la escuela superior que se sabía de memoria las normas y que además ponía a prueba dichas normas para ver hasta qué punto podía violar todas las normas. Nunca fue capaz de conservar a sus amigos debido a que siempre se estaba metiendo en líos con ellos, especialmente si sus amigos no estaban de acuerdo con él. Guillermo logró pasar por la universidad y obtener una profesión, pero no tardó su trabajo en aburrirle porque no era divertido competir contra sí mismo. De manera que Guillermo empezó a extenderse y meterse en inversiones y toda clase de negocios. Le fue muy bien, recortando gastos como le fue posible y utilizando a los amigos a su alcance. No tardó Guillermo en ser conocido como persona dedicada a las inversiones y al mismo tiempo como un intrigante, y aunque daba la impresión de que no engañaba a nadie con mala idea, lo cierto es que el que siempre salla ganando era él. Daba dinero a su iglesia, pero no en relación con lo que ganaba, pe nsando que era una tontería dar más de lo que le podría beneficiar a la hora de declarar los impuestos. Además, si regalaba las inversiones que no le servían para nada, podría obtener algunas deducciones de sus impuestos. Guillermo tampoco hizo uso de la abundancia que tenía, ya fuese para favorecer a su familia o a sus amistades. Después de todo, necesitaba casi todo el dinero para poder ampliar sus inversiones. El propósito de un juego es entretener, y los no cristianos se entretienen en el aspecto del dinero, pero Dios no ha provisto esta alternativa para el cristiano. Aquellos que se dejan arrastrar por el dinero, por el juego de ganar dinero se ven pronto vencidos en su propio juego. No tardan en perder de vista el motivo por el cual tienen el dinero y al mismo tiempo pierden de vista a su familia, porque están tan ocupados participando en el juego que las personas no son más que peones en sus vidas. Como ya hemos mencionado con anterioridad, una de las mejores maneras de evitar caer en esta trampa es tener un plan a largo plazo que nos permita decidir qué hacer con el exceso de dinero. Dedica una gran porción de cada inversión a la obra del Señor. Los resultados son predecibles: se producirá un cambio en tu actitud y es posible que hasta en el suministro. El hacerlo hará que tu habilidad para servirte a ti mismo se transfiera y sirvas a Dios.

2.

La envidia a los demás.

Hay muchas personas que se dedican a acumular dinero porque tienen envidia a otras personas, cayendo en la trampa "por mantener las apariencias". Se podrían identificar fácilmente con un personaje al que podemos llamar Eduardo Envidia. Eduardo es un cristiano que pertenece al "servicio secreto cristiano" (es decir, que a juzgar por sus actividades nadie puede saber si es cristiano o no lo es). Eduardo tiene siempre la actitud de, sigue al jefe", es decir, se mudó a una casa más grande porque su amigo ]osé consiguió un nuevo empleo. Y cuando sus vecinos se compraron coches nuevos, él también lo hizo. Para cuando Eduardo se dio cuenta de que se había metido hasta el cuello y que no sabía por dónde salir, se le presentó un nuevo desafío. Uno de sus mejores amigos vendía la franquicia de un producto nuevo y lo vendía realmente a un precio "tirado". Eduardo se enteró de lo asequible que era. Todo lo que tenía que hacer era venderle dos o tres a sus amigos, participándoles la misma idea y así podía "hacerse rico rápidamente." Eduardo no había vendido nada en toda su vida y eso le sonó un tanto sospechoso, pero su envidia y su avaricia pudieron más que las dudas que se habían merado de él, de modo que pidió el dinero prestado para comprar la ranquicia. Pocos meses después Eduardo perdió prácticamente todo lo que había invertido en pagarla franquicia así como a varios de sus amigos cuando todo aquel programa se vino abajo. Ahora Eduardo se siente avergonzado de hablar acerca de Cristo por causa de la vida que lleva. No tenemos motivos para envidiar a las personas que se dedican a acumular dinero. Desgraciadamente, es muy fácil caer en esa tram . Si lo hacemos, al tener envidia de otros cambiaremos nuestro estilo de vida, dejando que los que nos rodeen dicten lo que debemos hacer. La publicidad fomenta esta actitud, haciendo que la consideremos aceptable, pero Dios no. "Y [Cristo] dijo: Mirad, guardaos de toda codicia, porque la vida de uno no consiste en la abundancia de los bienes que posee" (Lucas 12:15). 3.

Dispuestos a dejarse llevar.

Este es el plan que hace que caigan igualmente en la trampa los cris-

89

90 4.

La familia y sus finanzas El amor propio.

Aquellas personas que se dedican la acumular dinero p° r amor propio lo hacen para que otras personas les puedan tener envidia. Este, como es natural, es un motivo mundano, pero lamentablemente caracteriza la muchos cristianos. Las personas que sufren por este motivo utilizan su dinero en un esfuerzo por comprar el ap recio incluso de su propia familia. Quieren que las personas que les rodean se ocupen de ellas, que les eleven y que estén siempre dispuestas la ceder la lo que quieren estas personas. Las personas que son así no comparten nunca nada la menos que sea para promocionarse la sí mismas. No hacen nada de manera anónima; si se les ocurre dar algo lo hacen la la vista de otras personas y, por supuesto, esperan aprecio la cambio. Esta actitud es la que caracteriza la un individuo al que podríamos llamar, por ejemplo, Samuel Superior y la su esposa Sara Sociedad. Samuel intenta convencer la todo el mundo que lo que ha conseguido en la vida lo ha logrado la base de asar por muchas dificultades y sufrimientos, diciendo que cuando iba la la escuela superior no tuvo nunca un coche deportivo, sino que durante sus estudios en la universidad logró abrirse camino al pertenecer la un equipo de polo y que en el mundo de los negocios tuvo que empezar desde "abajo' como vice presidente de la fábrica de su padre. Samuel y Sara van todos los domingos la la iglesia (la excepción de algún otro que otro domingo que van la juglar al golf) donde Samuel es uno de los principales ancianos. Varios de los blancos de la iglesia llevan su nombre y dan para el programa de edificación del nuevo templo. Ninguno de los dos está demasiado seguro de cómo se puede llegar la ser cristiano, pero dan por hecho que debe de ser por ósmosis. Además, sus nombres ap arecen siempre en las páginas de sociedad relacionados con las obras benéficas. Samuel está convencido de que la vida se ha portado bastante bien con él, aunque no acaba de entender por qué motivo su hija se escapó y su hijo menor abandonó los estudios para irse la vivir con algunos "hippies." Está convencido de que Sara estaba en lo cierto en aconsejarle que se librase del joven predicador que siempre hablaba acerca de conocer personalmente la Dios y él está de acuerdo con ella en que la iglesia tiene problemas de sobra sin invitar la un montón de extraños como no hace más que sugerir ese predicador. El cristiano no puede acumular dinero por causa de su orgullo propio y estar dentro del plan de Dios, ya que el aprecio y la importancia se desvanecerán con la misma rapidez que el dinero. ¿Estás tú esforzándote por conseguir el aprecio de los hombres o para obtener las recompensas de Dios? 5.

El amor al dinero.

Las personas que aman el dinero no estarían dispuestas la separarse de él ni siquiera por amor propio, estando sus vidas caracterizadas por la acumu-

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lación de riquezas y la degradación. Puede que hayan conseguid o acumular miles o cientos de miles o incluso millones, pero la pérdida de incluso pequeñas cantidades puede ser traumática para estas personas. Se sienten amargadas, nerviosas, frustradas y furiosas cuando otros invaden sus dominios económicos. Esto viene la ser una forma de idolatría, de la misma manera que los paganos adoraban a sus ídolos de barro o de metal. Esa actitud caracteriza a Antonio Avaricia. Antonio se ha pasado años enteros acumulando grandes sumas de dinero. Es difícil saber exactamente cuándo comenzó, probablemente en su infancia. Todo el mundo conoce y siente aversión hacia Antonio y hasta hay muchos que le temen. Se dice que Antonio sería capaz de engañar la su propio hermano si eso le produjese un beneficio. Pero lamentablemente, Antonio no se ve la sí mismo de esa manera. Está absolutamente convencido de que esos son astutos planes de negocios. Después de todo, es preciso que cada uno defienda sus propios intereses. La vida de Antonio no es otra cosa que continuos altibajos. Si sus negocios y sus inversiones van viento en popa a toda vela, se muestra feliz tanto en su casa como en la oficina, pero si las inversiones pierden aunque sea solamente un poco, se muestra mezquino, irritable e incluso hostil. Antonio se vendrá totalmente abajo cuando se produzca un verdadero revés económico. Entonces será una estadística de periódico: o sufrirá un colapso nervioso o se suicidará. Desgraciadamente, hay muchos cristianos que se aferran con todas sus fuerzas la cada posesión material que pueden. La persona atrapada por su amor al dinero preferiría decepcionar la su familia que tener que desprenderse de su dinero o de sus posesiones que tanto significan para él. Se nos recuerda en 1 Timoteo 6:10: "El amor al dinero es raíz de todos los males; el cual codiciando algunos, fueron descarriados de la fe y se traspasaron la sí mismos con muchos dolores". En Hebreos 13:5 se nos dice: "Sean vuestras costumbres sin amor al dinero, contentos con lo que tenéis ahora; porque él mismo ha dicho: Nunca te abandonaré ni jamás te desampararé". El amor al dinero nos separa de Dios. !Qué insensatez es que el cristiano caiga en esta trampa! "¿De qué le sirve al hombre si gana el mundo entero y se destruye o se pierde la sí mismo?" (Lucas 9:25). 6. La Protección. Hay muchas personas que acumulan dinero para sentirse protegidas. Así, de buenas la primeras, parece lo lógico, ya que necesitamos sentirnos protegidos, ¿no es cierto? Es evidente que si no tenemos ni la más remota idea de lo que va la suceder en el futuro, debemos protegernos en caso de cualquier eventualidad. Esa clase de lógica hace que los cristianos acumulen grandes sumas de dinero para sentirse protegidos, pero si podemos mirar, por así decirlo, con

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La ansiedad de cara al futuro atrapa a muchos cristianos, haciendo que busquen la protección. Habiéndose apartado de la voluntad de Dios, ya no confían en Él, sino en los bienes terrenales. De manera que cuando esos bienes terrenales se les vienen abajo, su fe también se desmorona. Dios dice que hemos de proveer las necesidades de nuestra familia, pero el que busca la protección está ciego. 7.

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Un don espiritual. Solamente existe un motivo por el que Dios provee en ocasiones a un cristiano un exceso de dinero y es para que se haga cargo de las necesidades de otras personas porque la auténtica riqueza viene acompañada del don de dar a los demás. Dios romete conceder Sus bendiciones a toda persona que dé con generosidad pero su maldición está sobre todo aquel que amontona, que roba, que codicia o que convierte el dinero en un ídolo. Pablo define el motivo por el cual una persona pueda tener riquezas como el poder suplir las necesidades de los santos. Por Io tanto, esa capacidad de compartir las riquezas las define como el fundamento de una devoción generosa para con los demás. `Para que seáis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce acciones de gracias a Dios por medio de nosotros" (2 Corintios 9:11). El ser un cristiano rico conlleva una tremenda responsabilidad, mucho más que el ser pobre, por supuesto. El ser rico o pobre forma parte de la providencia de la voluntad de Dios y Él solamente nos dará aquello que nosotros seamos capaces de manejar, pero las obligaciones y las responsabilidades que conlleva el tener riquezas son abrumadoras por causa de las tentaciones, ya que podemos apartarnos de la voluntad de Dios sencillamente por la actitud que adoptemos. Con que un cristiano rico se amolde a un estilo de vida de lujos superfluos y esplendidez, así como de poder satisfacer sus más mínimos deseos puede dar al traste con la dirección de Dios. El cristiano pobre, sin embargo, normalmente ve con claridad las decisiones que ha de tomar en cuanto a la honradez en vez de dejarse arrastrar por lo que es deshonesto. Proverbios 30:8b-9a dice: "Sólo dame mi pan cotidiano; no sea que me sacie, y te niegue, o diga: Quién es Jehová?" El sentirnos satisfechos con nuestra abundancia, sin contar para nada con Dios es un pecado mucho más sutil que el de robar abiertamente. Nos escapamos de la voluntad de Dios, sin apenas darnos cuenta, hasta que se cierre sobre nosotros la desgracia. La responsabilidad del cristiano es sobrecojedora y nos hace actuar con moderación. En Su plan divino, Dios ha decidido utilizarnos a nosotras para atender a Su obra. Un día todos tendremos que aparecer ante Su presencia y dar cuenta de lo que hemos hecho con Sus recursos. Por qué provee Dios una sobreabundancia de Sus recursos? Para que los suyos practiquen ese don espiritual que es el compartir.

CAPÍTULO

¿Cuánto Es Suficiente? Ahora que ya hemos estudiado el motivo por el cual algunos cristianos deben acumu riquezas, examinemos la Palabra de Dios para enterarnos de la esfera dentro de la cual podemos movernos. ¿Cómo puedes saber, en lo que se refiere a las finanzas, si estás manteniendo un equilibrio? ¿Cuándo estamos acumulando demasiado? ¿Cuándo has ido más allá del ámbito de la provisión para pasar a la proteoción? ¿Cuánto dinero debes dejar a tus hijos? ¿Qué cantidad debes invertir o guardar para cuando llegue el momento de tu retiro? Provisión actual Todo cristiano debe preocuparse de proveer para su familia. ¿Pero cuánto es suficiente? Como es lógico, no existe una fórmula mágica que se pueda aplicar a cada familia. Hay distintos variables que es reciso tener en cuenta como puedan ser la edad de los miembros de familia, el tamaño de la familia en cuestión, las necesidades educativas, las aspiraciones personales y el lugar donde vive la familia. Pero habrá que tomar en cuenta otros factores a la hora de tomar decisiones con respecto a las provisiones futuras como puedan ser: • • • • •

El plan que Dios tiene para tu vida El nivel actual de tos Futuro potencial de ingresos Hasta qué unto se puede contar con los ingresos actuales. Posibilidad de cambio de vocación.

Hay muchos factores individuales que es necesario tener en cuenta. Sin embargo, se pueden tomar ciertas decisiones básicas. A saber: • Es preciso que cada cristiano amolde su estilo de vida hasta que encaje con el plan que tiene Dios para su vida.

La familia y ~finanzas

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• Deberá tener un plan de ahorros mínimos para poder hacer ciertas compras. • Deberá fijarse un tope mínimo de tos. • Será preciso tener un plan futuro estudios. De la misma manera que está mal pensar solamente en protegerse, también lo está el no hacer ninguna o muy poca provisión. El descuido se produce cuando somos capaces de suplir las necesidades de nuestra familia, pero no lo hacemos. Si cambian las circunstancias, de manera que no nos sea posible vivir dentro de un presupuesto razonable, sin lugar a dudas Dios proveerá lo necesario para suplir nuestras necesidades, pero Dios nos exige que seamos prudentes. ¿Cuáles son los requisitos que debemos tener en cuenta como cristianos en lo que se refiere a proveer las necesidades de nuestra familia? Echemos un vistazo 0 lo que Al*-- ..no en Proverbios 6:6-11 1 • "Vé n la hormiga, oh perezoso; observa sus cami-nos y sé sabio. Ella no tiene jefe, ni gobernador, ni comisario; pero prepara su comida en el invierno, y arda su sustento, en el tiempo de siega. Perezoso: ¿Hasta cuándo has de estar acostado? Cuándo te levantarás de tu sueño Un poco de dormir un poco

de

dormitar v

un poco de cruzar las manos para reposar. Así vendrá tu pobreza como un vagabando, y tu escasez como un hombre armado." Dios se vale de esta parábola para decirnos que si somos perezosos y no nos anamos el sustento, la pobreza caerá sobre nosotras y nuestras familias. encontramos esta misma advertencia, animándonos a trabajar, en 1 Timoteo 5:8. Es preciso proveer las necesidades de nuestra familia, para que no seamos considerados peores que los paganos. Pero las hormigas no recogen nunca en exceso; almacenan solamente lo que en un momento dado habrán de utilizar. El otro extremo lo expresan estos versículos: "Porque todas estas cosas busca la gente del mundo; pero vuestro Padre sabe que necesitáis estas cosas. Más bien, buscad su reino, y estas cosas os serán añadidas" (Lucas 12:30, 31). ¿Reconoces la importancia que tiene este principio? Si bien es cierto que Dios espera que suplamos las necesidades de nuestra familia y no permite que tengamos una actitud de pereza, Él suple además cada una de nuestras necesidades. No permitirá que ~ nos falte nada, siempre y cuando nosotros sigamos Sus principios. Reservas para inversiones

¿Cuánto es suficiente para tenerlo como reserva dedicada a inversiones?

¿Cuánto es

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Es evidente que si una parte del plan Dios ' e ara tu vida es el invertir dinero, será preciso que decidas exactamente cu anto c bes a ese propósito. ¿Pero cómo te es posible saber cuándo te has pasado de lo que podrías considerar reserva de inversión y te has pasado a lo que podrías considerar como acumular un exceso innecesario de dinero? Lo cierto es que todo está relacionado con tu actitud. Lo primero que debes hacer es preguntarte a ti mismo: ¿Por que estoy invirtiendo dinero? ¿Qué clase de plan tengo para el exceso? Es necesario que como inversor te guardes algunos fondos que luego podrás utilizar para hacer inversiones adicionales. Pero con demasiada frecuencia los cristianos están convencidos de que lo primero que tienen que hacer es ner a un lado esos fondos y lo que hacen es coger la mayor parte de las ganancias de una inversión para dedicarlas a otra inversión. Esta es una acción que resulta fácil de racionalizar, normalmente pensando en las ventajas relacionadas con los impuestos y en algunas ocasiones con el plan de multiplicar la parte que le corresponde a Dios. Sin embargo, ninguno de estos dos _planes son bíblicos. Dios es perfectamente capaz de utilizar en la actualidad su dinero para Su ministerio. Después de cada revés económico hay muchos inversores cristianos decepcionados. Durante años estuvieron guardando el dinero del Señor, con la intención de dárselo a Él, pero no aprovechando nunca la oportunidad de compartirlo en Su obra y de repente, un buen día, todo ese dinero se pierde, consumido como si fuese sencillamente hojarasca y forraje. Son pocos los cristianos que posean una visión adecuada en lo que se refiere a las inversiones. De una parte tenemos aquellas personas que creen a pies juntillas que los cristianos no tienen por qué participar en las inversiones y por la otra tenemos a aquellas a las que no se les puede distinguir del resto del mundo. Estoy convencido de que uno de los aspectos relacionados con la voluntad de Dios en este a spe cto se encuentra en la parábola, que hemos mencionado con anterioridad, de Lucas 19:12-24. Examinemos esta parábola juntos, desde otro punto de vista, en relación con las inversiones. Comenzando con el versículo 20 en el que el noble se enfrenta con el tercer siervo: "vino otro, y dijo: Señor, he aquí tu mina, la cual he guardado en un pañuelo. Porque tuve miedo de ti, que eres hombre severo, que tomas Io que no pusiste, y cosechas lo que no sembraste." El noble le contestó: "¡Mal siervo, por tu boca te juzgo! Sabías que yo soy hombre severo, que tomo lo que no puse y cosecha lo que no sembré: ¿Por qué, pues, no usiste mi dinero en el banco, para que al venir yo lo cobrara junto con los intereses? Y dijo a los que estaban presentes: Quitadle la mina y dadla al que tiene diez minas." Podemos aprender muchas cosas de la parábola de los talentos: • Dios es el propietario y solamente nos da lo que quiere que nosotros tengamos a nuestro cargo.

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• Da a cada persona conforme a la habilidad de cada una. • Al demostrar que somos dignos de confianza, nos confía más cosas. • Quita a las personas que no son dignas de su confianza para dar a las que sí lo son. • Dios espera que multipliquemos lo que nos da y no sencillamente que lo mantengamos al mismo nivel. El siervo infiel es el que intenta ocultar las ganancias. De hecho, Dice nos dice que es un requisito invertir. (Por lo tanto, no puede tener nada en contra de las inversiones en la vida del cristiano.) Pero además, Él entiende la actitud de los siervos. Ellos sabían muy bien que no eran los propietarios, hasta el más indigno de ellos lo reconoció, devolviendo al noble lo que le pertenecía. Dos de ellos reconocieron su obligación de hacer uso de sus habilidades. Por tanto, si Dios nos hace capaces de manejar al o, al mostrarle nosotros que somos dignos de Su confianza, nos irá ando cada vez más. Nuestra responsabilidad es devolver ese dinero, dedicándolo a Su obra. Creo que el otro aspecto se expresa en 2 Corintios 9:10-11: "El queda semilla al que siembra y pan para comer, proveerá y multiplicará vuestra semilla y aumentará los frutos de vuestra justicia. Esto, para que seáis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce acciones de gracias a Dios por medio de nosotros." Dios es el socio perfecto, sea cual fuere el plan de inversión. Es Él quien multiplica toda la semilla que se planta. Nosotros nos encargamos de plantarla y Él de multiplicarla. ¿Qué puede ser más sencillo? De modo que cualquier p a de inversión deberá basarse en el concepto de multiplicar las cantidades que Dios nos provee y devolver la mejor parte de la cosecha. De esa manera, las semillas que retenemos la próxima vez producen una mejor cosecha. Es preciso que los cristianos no olvidemos que por muy fecunda que sea la tierra, permanecerá árida sin la lluvia de Dios. Además seria una insensatez arar, cultivar y fertilizar la tierra y no echar semillas, porque entonces lo que podemos esperar es una gran cosecha de cizaña y hierbajos.

Ahorros de cara al retiro El prevenir para cuando llegue el momento del retiro es algo que causa confusión a muchos cristianos. Como ya hemos visto con anterioridad,

muchas personas se han convertido en unos maniáticas en lo que se refiere a este tema y la necesidad de almacenar grandes cantidades de valores. Algunos piensan que a la hora de retirarse necesitarán gastar mucho más que cuando estaban trabajando, pero eso no es cierto. Una vez que nos hemos fijado una forma de vida difícilmente cambiará de modo sustancial el sencillo hecho de retirarnos excepto, en la mayoría de los casos, para nder de nivel. Si el cristiano ha aprendido a amoldar su forma de vida

¿Cuánto es suficiente?

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durante los años en los cuales tenía unos ingresos, entonces el retiro le permitirá amoldarse con toda comodidad, pero el cristiano que amontona dinero para cuando llegue el momento de su retiro lo que está haciendo realmente es engañarse a sí mismo. ¿Quién está más capacitado para proveer tus necesidades cuando te retires, Dios o el hombre? Comienza a pensar muy en serio ahora en lo que necesitarás para cuando llegue ese momento. ¿Cuánta ropa puedes comprar y cuántos viajes puedes hacer? ¿Cuántas alimentos puedes comer? Examina tu a la hora de retirarte y toma la parte que no consideres necesaria y entrégalo hoy para el ministerio del Señor. Dios no permitirá sufrir al cristiano que tiene una buena actitud. Dónde encaja, dentro del plan de Dios, un programa de retiro (o de ahorros)? "Tesoro precioso y aceite hay en la morada del sabio, pero el hombre necio lo disipará" (Proverbios 21:20). Dios nos dice que debemos ahorrar algo de cara al futuro y eso podrá incluir el ahorrar para comprar lo necesario o, posteriormente, para el retiro. Pero lo que es importante es que los cristianos coloquen en el debido orden sus prioridades. No tiene nada de malo pensar en el retiro, pero lo que sí está mal es acumular un exceso de dinero, sea bajo la forma que sea. Toda la idea que tenemos acerca del retiro es equivocada. Nos hemos visto condicionados a pensar que cuando una persona llega a los sesenta o sesenta y cinco años de edad se convierte en una inútil, pero muchos de los apóstoles hicieron su mejor labor después de la edad que los hubiéramos considerado "viejos". Cuando Pablo le aconsejó a Timoteo que no permitiese que nadie se burlase de él por causa de su juventud, Timoteo había cumplido ya los cuarenta años. De modo que, cuándo debemos retirarnos? Si el cristiano tiene una buena vida, plena y en la cual disfruta con lo que hace, será útil durante boda su vida, no solamente durante los primeros años. No hay nada de malo en ahorrar de manera moderada Xara cuando llegue el momento de retirarse, pero sí que es equivocado almacenar innecesariamente, creyendo que esa es la única manera de proveer para el futuro. Otro as de la voluntad de Dios es el que se menciona en Lucas 12:16-20, donde se nos dice: "Entonces les refirió una parábola, diciendo: Las tierras de un hombre rico habían producido mucho. Y él razonaba dentro de sí, diciendo: Que haré? Porque ya no tengo dónde juntar mis productos? Entonces dijo: ¡Esto haré! Derribaré mis graneros y edificaré otros más. Allí juntaré todo mi grano y mis bienes, y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes almacenados para muchos años. Descansa, come, bebe, alégrate. Pero Dios le dijo: ¡Necio! Esta noche vienen a pedir tu alma; y lo que has provisto, ¿para quién será?" ¿Ves la actitud de Dios en esta parábola? El hombre era rico, pero Dios no le condenó por eso. Su des ocia se cernió sobre él cuando aumentó su riqueza. Al darse cuenta de que no tenía suficiente espacio en sus graneros, qué fue lo que decidió hacer? ¡Acumular! Construir

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¿Cuánto es suficiente?

nuevos graneros para almacenar la cosecha y luego sentirse satisfecho sin Dios. En lugar de pensar en cuál sería el plan que Dios pudiera tener para ese exceso, decidió almacenarlo. Ese no es, ni mucho menos, el plan que tiene en mente para los cristianos. No hay nada de malo en hacer planes para cuando llegue el momento de retirarse, pero sí es equivocado vivir solamente para el momento del retiro. Tampooo tiene nada de malo ahorrar, excepto cuando nos sentimos motivados a protegernos en contra del mundo. Examina tu actitud como cristiano. ¿Te preocupa de verdad que si no almacenas ahora cuando llegue el momento tengas que pasar privaciones? Crees de corazón que Dios puede suplir tus necesidades cuando llegues a la vejez o es tu fe sencillamente un mito?

cien hijos y vive muchos años, de modo que los días de sus años son numerosos, pero su alma no se sacia de sus bienes, y ni aun recibe sepultura, digo yo que un abortivo es mejor que él." Esta parábola nos indica claramente que es necesario dejar cierta provisión. Dios dijo que como hombres y mujeres santas, es preciso que dejemos a los hijos de nuestros hijos una herenci ro esa herencia es espiritual. El otro aspecto de la voluntad de Dios lo encontramos en Salmo 37:2526: "Yo he sido joven y he envejecido; pe ro no he visto a un justo desamparado, ni sus descendentes que mendigando pan. En todo tiempo tiene compasión y presta, y su descendencia es para bendición. " Es perfectamente evidente que las mismas promesas que hizo Dios con respecto a proveer durante toda una vida se aplican a todas las generaciones. Por lo tanto, provee las necesidades de tu familia de una manera razonable, confiando en que Dios suplirá sus necesidades porque Dios ha prometido que no abandonará ni dejará a tus descendientes.

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La herencia Si tuviese que pensar en el aspecto económico cristiano que menos se coma rende, tendría que decir que es el de las herencias. No solamente hay muchas personas que perjudican sus vidas acumulando, sino que causan perjuicios a las vidas de sus hijos y de sus nietos con una herencia excesiva. El resultado de dejar grandes cantidades de dinero a personas que no están capacitadas para hacer uso de ellas se ve en la parábola del hijo pródigo, en Lucas 15:11-24. Al menos el padre de esta parábola tuvo suficiente sentido común como para entregar la herencia en vida a su hijo. Entonces tuvo oportunidad de aconsejarle al respecto. Pero, con todo y con eso, el resultado de la herencia fue que el hijo no hizo otra cosa que meterse en los. Cuando se entregan grandes cantidades de dinero a los hijos normalmente éstos lo derrochan, lo cual es perjudicial mientras que el guardar esas sumas para los hijos, teniéndolas en depósito pueden ser útiles para que se mantengan dentro de la voluntad de Dios. ¿Es ese tu deseo? Permite a tus hijos el gozo de ganarse ellos mismos la vida. Eso no significa que dejes que vivan en pobreza, pues debes proveer las necesidades de tu familia, ro sí les impedirá acumular grandes canLa voluntad de Dios con respecto a las herencias se expresa, en parte, en las palabras del Eclesiastés 6:3 donde dice: "Si un hombre engendra

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Resumen Te ofrecemos una lista de los puntos más importantes que encontramos en la Palabra de Dios con respecto a por qué las personas acumulan riqueza y cuánto es suficiente. Porque otros se lo aconsejan. Es cierto que el cristiano debe escuchar los consejos que le den otras personas, pero deben buscar la sabiduría de Dios antes de actuar (Proverbios 15:22; 18:15; Efesios 4:14). Por envidia a otros. Esto no forma parte del plan de Dios para el cristiano (Salmo 73:2-3; Lucas 12:15). Porque para ellos es un juego (Salmo 17:13-14; Proverbios 13:11). Por amor propio (1 Timoteo 6:17; Apocalipsis 3:17). Por amor al dinero. Nuevamente nos encontramos con que esto no forma parte del plan de Dios (Hebreos 13:5; 1 Timoteo 6:10). Para protegerse. Dios nos muestra que no podemos protegernos a nosotros mismos, si no es contando con Su misericordia (Salmo 50:1415).

Porque es su don espiritual (2 Corintios 9:11; 1 Timoteo 6:17). Cuándo se puede decir que hemos provisto lo suficiente? Dios nos pie que proveamos las necesidades de nuestra familia, pero no dice que tenemos que protegerla. • ¿Cuánto debemos proveer? Una provisión que cubra las necesidades de cada día (Proverbios 6:6-11; Lucas 12:30-31). • ¿Debe el cristiano invertir? Dios no solamente lo permite, sino que de hecho dirige a algunas personas a que lo hagan (Lucas 19:20-26; 2 Corintios 9:10-11). • ¿Qué podemos decir acerca del retiro o de los ahorros? Dios nos

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aconseja que ahorremos algo, pero lo que no permite es que acumulemos excesos de dinero (Proverbios 21:20; Lucas 12:16-20.) • ¿Debe el cristiano dejar una herencia a sus hijos? Sí, Dios requiere que nos ocupemos de proveer para nuestros hijos, incluso después de la muerte, si es posible, pero para las personas que no pueden, Él no permitirá nunca que sufran los hijos de un hombre o una mujer piadosa (Eclesiastés 6:3; Salmo 37:25). Viendo los motivos por los cuales hay personas que deben acumular riqueza, es evidente que la actitud es lo que más cuenta en el plan de Dios. ¿Pero cuánto demos llegar a tener sin apartarnos de la voluntad de Dios? En Su Para nos dice: "Porque si me enriquezco, quizá me sienta satisfecho sin ti" (Proverbios 30:8, Biblia al Día).

8 Compartir, la Idea de Dios CAPÍTULO

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asta el momento hemos dado un repaso a muchos aspectos de la Palabra de Dios, desde una visión general de la economía hasta una planificación financiera. Ahora nos disponemos a examinar juntos lo que significa compartir, desde la perspectiva de Dios. Este tema se entrelaza con cada aspecto de las finanzas. El compartir es i mportante, pero el cristiano deberá ser consciente de que solamente es uno de los aspectos del plan de Dios. No se puede sentir la libertad que Dios nos da en el aspecto económico sin tener en cuenta lo siguiente: • Reconocer que Dios es dueño de todo y aceptar nuestro papel de mayordomía. • Devolver la primera parte, entregándola en Sus manos. • Buscar el motivo po r el cual Dios provee una sobreabundancia, que está por encima encima de las necesidades. Es preciso que despejemos algunos de los populares conceptos religiosos que han surgido alrededor del tema de compartir. Hay cristianos que adoptan dos posturas totalmente distintas en lo que se refiere al tema de los diezmos. Por un lado tenemos a los legalistas, que afirman que a menos que demos el diezmo no podemos, de ninguna manera, pertenecer al "club de los cristianos". Para ellos el dar el diezmo es algo supremo, excluyendo prácticamente cualquier otra cosa. La teoría es que el dar el diezmo asegura la espiritualidad, pero no es ese el caso. Estudia lo que dijo Cristo sobre algunos hombres santurrones de sus tiempos. Los fariseos daban el diezmo hasta extremos realmente exagerados, pero sin embargo dejaban de hacer otras cosas importantes, como pudieran ser el vivir conforme a la verdad y el amor (Mateo 23:23).

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Luego están aquellas otras personas que consideran que el dar el diezmo no es otra cosa que un legalismo reservado a los judíos. Por lo tanto, no se fijan nunca una meta en cuanto a dar el diezmo o a compartir lo que tienen. Es cierto que dan, pero lo hacen según les parece y también estas personas están equivocadas porque es necesario entender la actitud de Díos con respecto a este concepto. En muchos casos, Cristo ha aclarado ciertos principios y los ha ampliado para que los entendamos mejor. Otros, se gún nos dijo, han sido abandonados, dejándolos en manos de una autoridad suprema. Por ejem lo, ya no es preciso realizar sacrificios de sangre porque Cristo vino para derramar Su sangre como sacrificio final. Por lo tanto, ya no somos esclavos de la ley porque la muerte de Cristo ha servido para perdonarnos. Pero como dijo Pablo, la ley no le hizo a él pecado, sino que le convenció del pecado. Cuando Dios nos dio la ley del diezmo, la ley no sirvió para que los judíos dieran el diezmo, sino que les mostró sencillamente que se quedaban escasos o incluso defraudaban en relación a lo que Dios esperaba. Para el cristiano que busca la voluntad de Dios, esos principios nos muestran el camino que hemos de seguir para encontrar la paz, la felicidad y la pros pe ridad. Hay muchos versículos en las Escrituras que tratan sobre lo que Dios nos provee. Vamos a mirar algunos de ellos con el propósito de decidir cuál es la actitud de Dios con respecto al diezmo y de qué modo se aplica en nuestros días. ¿Cuánto es el diezmo? ¿Se aplica realmente al cristiano? ¿Por qué daban los judíos el diezmo? ¿Por qué tiene el dinero tanta importancia para Dios que nos manda que testifiquemos con respecto a él? Las respuestas son importantes, a fin de que no seamos víctimas de las muchas habladurías que escuchamos a nuestro alrededor sobre el tema. Al leer esta sección, abre tu mente al Espíritu Santo. Evalua lo que lees sobre la base de lo que dice Dios, sin prejuicios preconcebidos.

necesidad de ponerse enteramente en Sus manos mediante el diezmo, comprendió el significado que tenía y lo hizo de manera voluntaria. Para Dios poco importa la cantidad del diezmo, puesto que Él es el dueño de todo. La cantidad, sin embargo, sí tiene su importancia para nosotros. Cuando damos el diezmo como un testimonio, recogemos una abundante cosecha porque es la semilla que plantamos en el huerto de Dios y Él puede mul tiplicarlo. Con frecuencia los cristianos discuten respecto a si el diezmo lo deben dar en relación con la cantidad bruta o la neta. Creo que eso depende de si quieren que Dios bendiga tu cantidad bruta o tu cantidad neta. Si nosotros somos legalistas con Dios, podemos esperar recibir la misma recompensa que recibieron los fariseos. Pero si mostramos nuestro amor hacia El y somos generosos, Él será, a su vez, amoroso y generoso con nosotros. Dios promete prosperarnos si lo damos como un testimonio, pero no está obligado a devolvernos lo que le entregamos. "¿O quién le he dado a él primero para que sea recompensado por él?" (Romanos 11:35). Dios nos promete, de forma única, que si le damos de todo corazón, con generosidad y amor, Él nos lo devolverá multiplicado. El Antiguo Testamento revela una percepción clara de lo que era y sigue sie el diezmo en la actualidad. Zal guías habla con frecuencia, advirtiendo acerca del diezmo y la bendición que es darlo. —¿Robará el hombre a Dios? ¡Pues vosotros me habéis robado! Pero decís: ¿En qué te hemos robado? ¡En los diezmos y en las ofrendas! Malditos sois con maldición; porque vosotros, la nación entera, me habéis robado. Traed todo el diezmo al tesoro, y haya alimento en mi casa. Probadme en esto, ha dicho Jehová de los Ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y vaciaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde" (Malaquías 3:8-10). Estas palabras de Dios son una promesa de bendición ya l mismo tiempo una advertencia. "Confiad en mí, traedme el total de vuestros diezmos y ofrendas para que pueda abrir mis almaoenes y devolvéroslo, pero no me negueís lo que os pido." Para Dios la cantidad no es importante. Pablo dijo en 2 Corintios 9:7 que no debemos obligar a nadie a dar con tristeza o de mala gana porque Dios ama al dador alegre. Da lo que crees sinceramente que Dios desea que des. Yo personalmente empecé a dar el diezmo cuando era solo un oven cristiano porque estaba convencido de que era lo menos que podía hacer como testimonio. Debo decir que Dios me ha bendecido repetidamente por haber tomado esa decisión y que no he visto nunca a un cristiano dar como señal de obediencia y de su amor hacia Dios sin que haya recibido una bendición de Él. Deuteronomio 14:23 dice: "Delante de Jehová tu Dios, en el lugar que él haya escogido para habitar allí su nombre, comerás el diezmo de tu grano, de tu vino nuevo, de tu aceite, de los primerizos de tus ganado y de tu rebaño, a fin de que aprendas a temer a Jehová tu Dios todos los días.

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El diezmo La Palabra de Dios describe el diezmo como un testimonio de que todo cuanto poseemos le pertenece a Dios. Fue precisamente por medio del diezmo que Abraham reconoció este hecho. Y por lo tanto, Dios pudo prosperarle (Génesis 14:20). Si el diezmo es realmente un legalismo, ¿por qué Abraham entregó a Dios una décima parte de todo cuanto poseía? Después de todo, Abraham no tenía ninguna ley por la que regirse, puesto que la ley escrita no apareció hasta los tiempos de Moisés. Abraham lo hizo porque amaba a Dios porque estaba convencido de que los diezmos le pertenecían. Abraham fue un verdadero practicante de la mayordomía, capaz de entregarlo todo, incluyendo su más preciada posesión, que era su hijo Isaac. Cuando Dios convenció a Abraham de la

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¿Con qué propósito pensó Dios en el diezmo? Para que nosotros aprendamos siempre a temer al Señor, nuestro Dios. ¿Se puede aplicar este con-

limitado, como le sucede prácticamente a todo el mundo, lo hace para obedecer a Dios y amar a sus semejantes. Dice con frecuencia, al ponerse en contacto con otros cristianos con el fin de pedirles ayuda, que la gran mayoría de las personas prefieren dar su dinero para la obra de Dios que participar personalmente. Yo quisiera enfatizar que existe una diferencia entre compartir por obedecer y dar el diezmo. El diezmo es algo e se debe dar como reconocimiento de que Dios es el dueño de todo (de ahí que sea un testimonio) mientras que la obediencia en lo que se refiere a compartir con otras personas que están necesitadas debemos hacerlo porque estamos profundamente convencidos de que no es justo que esas personas pasen sin las cosas que necesitan. Uno de los aspectos relacionados con la voluntad de Dios lo encontramos en Mateo 25:45 donde se nos dice: "Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo, que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco lo hicisteis a mí." Cristo está diciendo que cuando regrese pondrá a prueba la sinceridad de nuestras palabras por la manera en que estemos dispuestos a poner nuestros recursos a Su disposición. Esa es nuestra obligación y algo que debemos de obedecer, ayudando a las personas necesitadas por amor a Jesucristo. Otro de los aspectos del tema se menciona en Mateo 10:42: "Cualquiera que da a uno de estos pequeñitos un vaso de aqua fría solamente porque es mi discípulo, de cierto os digo que jamás perderá su recompensa." No nos cuesta mucho trabajo compartir el agua con otros. ¿Qué es exactamente lo que ha querido decir Cristo? Lo importante no es lo que damos, ni la cantidad ni el valor, sino la actitud con que lo damos.

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cepto a nuestros tiempos? Repasa lo que dice la Palabra de Dios al respecto: "El comienzo de la sabiduría es el temor de Jehová" (Proverbios 9:10). Si estamos buscando de qué modo utilizar con sabiduría nuestros recursos económicos, es preciso que busquemos la sabiduría que procede de Dios. Y una de las maneras de hacerlo es por medio del diezmo. Compartir, como señal de obediencia Es cierto que muchas de las decisiones que tomamos en nuestra vida como cristianos, posiblemente la mayoría de ellas, no tienen sentido para el mundo. Por lo tanto, nosotros tomamos esas decisiones por habernos entregado a Dios y porque deseamos hacer conforme a Su Palabra, en otras palabras, por obediencia. El cristiano debe decidir por adelantado, que si Dios le muestra un camino a seguir, lo seguirá. Las actitudes desempeñan un papel de vital importancia a la hora de compartir con otros. ¿Has dado alguna vez algo a una persona con resentimiento? Yo lo he heclo y me he dado cuenta, casi de inmediato, que había entregado mucho más que dinero. Recuerda que cuando das para suplir la necesidad de otras personas estás dando en realidad a Dios. Dios no necesita el dinero, pero nos permite participar en Su obra. Cualquiera que dé voluntariamente recibirá una bendición que solamente se recibe cuando hay un auténtico amor, de manera que Dios honra más tu actitud que la cantidad en sí. Cuando Dios pone las necesidades de otras personas en tú corazón y tu las suples, eso es obedecer. Tal vez sea la necesidad de una organización cristiana en la que tú participes de una manera activa o posiblemente las víctimas de un sastre natural. Quizás des para un grupo al que no conoces, haciéndolo sencillamente con el propósito de obedecer a Dios. En ese caso Él bendecirá el uso de los recursos, que has destinado a Su obra. Participa Asegúrate de no regalar un dinero para eludir otra responsabilidad más i mportante, pues es posible que Dios desee que participes con tu presencia también. En otras palabras, no des solamente tu dinero, entrégate tu mismo. Conozco a un cristiano que se interesa por las personas que son pobres en una gran ciudad. Al mostrar su interés no solamente lo hace dando su dinero, sino que dedica una parte de su tiempo, abriendo tiendas de objetos cuyos precios son más económicos para ayudar a los pobres en los sectores más necesitados de la ciudad. Esas tiendas ponen al alcance del público ropa, muebles, comida y otros artículos de primera necesidad para los po res, a unos precios que ellos pueden costear. Aunque su tiempo está

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Compartiendo de la abundancia Para la mayoría de nosotros este es un aspecto un tanto difícil, ya que cuando tenemos abundancia lo normal es que nos sintamos seguros y participemos menos. Como hemos mostrado ya con anterioridad, los peligros de la abundancia son mucho más sutiles que los de la pobreza. ¿Qué es la abundancia y de qué manera puede el cristiano reconocer y aceptar la dirección de Dios? ¿Recuerda el lector cuando mencionábamos el programa financiero y la necesidad de vivir dentro de los limites de un presupuesto? El presupuesto nos ayuda a fijar esa cantidad que nos sobra y al mismo tiempo a planear qué hacer con ella. Lo que nos sobra es nuestra abundancia. Es muy fácil dejarnos arrastrar por nuestros sentimientos de satisfacción y alejarnos de Dios por causa de nuestra abundancia Muchas personas así lo hacen por temor a verse obligadas a compartir lo que tienen. El compartir lo que les sobra requiere mucho amor, y significa amar a Dios más que al dinero. Si damos por amor es posible compartir de nuestra abundancia. Las

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• - •. ,. compatibilidad • compartir .. mismos intereses. Es de principalmente un amor que basa en las emociones. uno no ama, tampoco recibe amor. Sin embargo, el amor agape nos per- mite amar sin esperar nada a cambio y, por lo tanto, lo que haga la otra persona en realidad no nos afecta si nuestra relación con Dios está basada en un amor agape. Por consiguiente, cuando damos de nuestra abundancia no podemos dar phileo, esperando que Dios nos dé algo a cambio. Es preciso que demos •• agape porque • • • esperamos • . a

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que tenemos mucho y que deseamos compartir con otras personas que lo que le darnos desea hacerlo. Una vez hayamos compartido de nuestra r.

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da. Cuanto más demos, más multiplicará Él. Podemos encontrar un aspecto de la voluntad de Dios en lo que se nos : Te ro el que tiene bienes de este mundo y ve que dice su hermano padece necesidad y le cierra su corazón, ¿cómo morará el amor de Dios en él. Hijitos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y •- verdad." Además, Santiago . dice:algunoqt•iebras,¿d -Puede acaso su .1

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Compartiendo de modo sacrificado El dar de manera sacrificada solamente es posible para aquellos cristianos que se hayan sometido por completo a Dios. En lugares donde la riqueza abunda, cono en los Estados Unidos, el dar de una manera sacrificada es prácticamente algo desconocido, ya que las actitudes de este mundo han trastornado nuestra mente y han endurecido nuestros sentimientos hacia los demás. Como ya he dicho con anterioridad, Dios no va a permitir que Su obra se demore por falta de fondos; de manera que sencillamente

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distribuirá de otro modo los fondos necesarios, dándolos a los creyentes ue desean hacer Su voluntad y que están dispuestos a sacrificarse, dejanJo a un lado los lujos para suplir las necesidades de otras personas. El uso que hacemos de nuestro dinero mide, de una forma muy objetiva, nuestra entrega a Jesucristo y a Su obra Aquellos creyentes que han dejado a un lado la ora de Dios porque se niegan a tener que padecer incomodidad han errado totalmente el blanco. Cuando Dios sugiere que hagamos sacrificios, no quiere decir necesariamente que hayamos de sacrificar nuestras necesidades, aunque sí puede querer decir que olvidemos algunos de nuestros deseos y el adquirir cosas que son realmente innecesarias. Es posible que eso implique el dejar de jugar a los bolos, al tenis o el no ir a comer a un restaurante. Puede querer decir tal vez que no nos compremos el coche nuevo que deseabamos, o la barca o la piscina o una casa más grande. El dar de manera sacrificada es algo que es posible tanto para las personas que tienen mucho como para las que tienen poco. Todos los creyentes pueden dar de manera sacrificada. La mejor manera de comenzar es compartiendo una parte pequeña de tu abundancia con aquellas personas que tienen menos que tú. La iglesia primitiva nos ha dejado un buen ejemplo. Los miembros de esta iglesia reunieron sus pertenencias, vendiéndolas para que nadie tuviese que pasar sin lo necesario. En los últimos tiempos eso volverá a suceder, convirtiéndose incluso en una necesidad. El compartir lo que se tenga en común se volverá una forma de vida para que los cristianos puedan sobrevivir. Encontramos este patrón en las alabras de 2 Corintios 8:15 donde se nos no tuvo dice: —El que recogió mucho no tuvo más, y el que recogió menos." Así que debemos ayudar a los que están en necesidad Lamentablemente este concepto se ha pe rdido casi en su totalidad en nuestros días. Pero forma parte viable del plan que Dios tiene para los últimos tiempos. Cuantos más cristianos acepten la necesidad del sacrificio personal, tanto más fácil resultará la transición. Encontramos una referencia con respecto a la voluntad de Dios sobre el sacrificio en Lucas 3:11: "El que tiene dos túnicas dé al que no tiene, y el que tiene comida haga lo mismo." Cristo consideraba esta clase de sacrificio un sacrificio mínimo para aquellos que deseasen se guirle, estableciendo el dar, no de nuestras necesidades, sino de nuestros deseos y el dinero que dedicamos a lo que es innecesario. Su promesa para aquellos que se sacrifiquen se encuentra en Marcos 10:29-30: "Jesús le dijo [a Pedro]: De cierto os digo que no hay nadie que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o madre, o padre, o hijos, o campos, por causa de mí y del evangelio, que no reciba cien veces más ahora en este tiempo: casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y campos, con persecuciones; y en la edad venidera, la vida eterna." Cristo nos dio otro punto de referencia cuando se encontraba en el

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La familia y sus finanzas

templo, observando a los judíos que se acercaban a la tesorería con sus donativos: "Alzando la mirada, jesús vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca del tesoro. Vio también a una viuda pobre que echaba allí dos blancas. Entonces dijo: De cierto os digo que esta viuda pobre echó más que todos. Porque todos éstos de su abundancia echaron a las ofrendas; pero ésta, de su pobreza, echo todo el sustento que tenía" (Lucas 21:1-4). Es interesante el enfoque sobre el tema de los sacrificios. Cristo dice que la viuda echó más de lo que echaron el resto, pero vemos que dio solamente dos insignificantes monedas de cobre. Aquella viuda no estaba dando con el propósito de impresionar a nadie. Es evidente que el templo no tenía necesidad de sus monedas, porque le sobraban monedas de oro y de bronce, por dentro y por fuera. Tampoco dio la viuda de su abundancia, sino que dio todo cuanto poseía porque amaba a Dios y es evidente que debió de sentir una mayor necesidad que la del alimento; sentía la necesidad de sacrificarse por Dios. El sacrificio es una actitud que es esencial que adopten todos los creyentes. Comienza por sacrificar una pequeña porción de tus deseos y caprichos para cubrir las necesidades de otras personas. Pídele a Dios que ponga en tu corazón esas necesidades, esforzándote por reflejar en el exterior algo que sea equivalente a la entrega que sientes en tu interior. Resumen Espero que al llegar a este punto de nuestro tema tengas clara la perspectiva de lo que significa el compartir en las Escrituras. El mínimo testimonio que puede dar un creyente es dar sus diezmos. El creyente que nunca los ha dado a Dios no ha reconocido todavía que entiende con claridad que Dios es el dueño de todo. También podemos compartir por obli ación o por obedecer a Palabra de Dios. Es preciso que los cristianos estén puestos a actuar por obediencia, no por el mero hecho de haberlo comprendo, sino porque lo que estemos buscando sea la sabiduría de Dios. Para lograr hacerlo es preciso que entendamos y que aceptemos la Palabra de Dios. El tercer paso es el de compartir de nuestra abundancia. Para ello lo primero que debemos de hacer es que exista dicha abundancia, por su uesto, y eso será posible una vez que hayamos amoldado nuestra forma vida, pero una vez que obtengamos este sobrante de capital, es preciso que lo compartamos en lugar de amontonarlo. Cuarto, podemos compartir de manera sacrificada. Comencemos con algunos de nuestros deseos y caprichos, hasta llegar a conseguir una forma de vida que se asemeje a la de Cristo. Si nosotros, que tantas bendiciones disfrutamos, no estamos dispuestos a sacrificar nuestros deseos r amor a otros, Dios sencillamente suplirá a otras personas que sí están puestas a hacerlo.

9 ¿Quien Merece Ayuda? CAPÍTUL O

H

ay algunas preguntas de suma importancia que todos los creyentes deberían hacerse. ¿Hacia quién nos guía Dios para que compartamos lo que tenemos? ¿Quién se lo merece y por qué? ¿Debemos compartir solamente con otros cristianos o nos advierte Dios que ayudemos además a las personas que no son creyentes? ¿Debe el cristiano prestar su apoyo a su iglesia y entregarle todo su diezmo? Como hemos afirmado ya con anterioridad, a la hora de dar es importante que reconozcamos la diferencia que existe entre las necesidades, los deseos y los caprichos de otros. Dios nos guía para que podamos suplir las necesidades que puedan tener otras personas, pero el satisfacer los deseos o caprichos de otros es una decisión muy personal. Este estudio de la situación se debe llevar a cabo cada vez que una organización o una persona nos pida ayuda. Necesidades familiares Dios exige que suplamos las necesidades de nuestra familia. "Si alguien no tiene cuidado de los suyos, y especialmente de los de su casa, ha negado lo fe y es peor que un incrédulo" (1 Timoteo 5:8). Esta provisión a favor de la familia va más allá de la esposa, el marido y los hijos, incluyendo a otros miembros de la familia, como puedan ser los padres, los abuelos, etc., etc. "Si algún creyente o alguna creyente tiene viudas, cuídelas. No sea carga para la iglesia, a fin de que haya lo suficiente para las que realmente son viudas" (1 Timoteo 5:16). La advertencia de Pablo nos dice que debemos de mantener a los miembros de nuestra familia para que, de ese modo, no se conviertan en una carga para la iglesia (o para el gobierno). Nuevamente, también en este aspecto hemos endurecido nuestras conciencias, dejando esas responsabilidades en manos del gobierno. El gobierno, sin embargo, no es el indicado para ocuparse de esta labor, además de

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La familia y ~finanzas

que los oficiales del gobierno no disponen de los recursos necesarios para proveer de forma adecuada. Dios desea que los creyentes suplan las necesidades de su familia. ¿Qué clase de testimonio daremos a la comunidad formada por personas no creyentes si los miembros de nuestra propia familia pasan privaciones? Es indispensable, por lo tanto, que los cristianos tomen consciencia ante esta responsabilidad. Hermanos ministradores Lamentablemente también hemos menospreciado a los hermanos que ministran. Por algún extraño motivo, se piensa que los cristianos que dedican todo su tiempo a la obra del Señor deben vivir con menos de lo que lo hacen las personas que trabajan en el mundo. ¿Por qué no ha de tener un pastor un sueldo que le permita vivir con cierta holura? ¿Por qué no puede un evangelista, por ejemplo, vivir tan bien como- cualquier persona que se dedique al mundo de los negocios? -Acaso creemos que el obrero de Dios no merece recibir un sueldo adecuado? Repasa lo que dice 1 Corintios 9:9: "Porque en la ley de Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado sólo de los bueyes?' Y en 1 Corintios 9:14: "Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio". Y en 3 de Juan 6, 7 dice: "En presencia de la iglesia, ellos han daclo testimonio de tu amor. Si los encaminas como es digno de Dios, harás bien; porque artieron por amor del Nombre, sin tomar nada de los gentiles." Estas referencias nos dicen que: Es un requisito indispensable para todo creyente suplir las necesidades de todos aquellos que proclaman la Palabra de Dios. Hemos de enviarles a hacerlo de una manera que sea digna de Dios, no como si fuesen personas de segunda clase. Creo que una buena norma a tener en cuenta es la de pagar a un pastor el promedio de lo ue ganan los miembros de su congregación. Si piensa que le pagan Jemasiado, dejad que sea su responsabilidad disponer de lo que le sobre. Dios advierte a los creyentes que no deben recibir nada que no proceda de otros creyentes y que deben recibir su sostén de los creyentes. Esta advertencia se aplica por igual a la iglesia, que no debe solicitar préstamos de personas fuera de la misma. Las organizaciones cristianas deberán obtener sus fondos de entre el cuerpo de Cristo, como dijo Juan: "Sin tomar nada de los gentiles" (3 Juan 6, 7). ¿Cómo podrán suplirse estas necesidades a menos que los creyentes estén dispuestos a aceptar esta responsabilidad de suplir a los hermanos que ministran? La comunidad cristiana Interésate por la comunidad cristiana: "Honra a las viudas que real-

Quién merece ayuda?

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mente sean viudas" (1 Timoteo 5:3). La norma que estableció Pablo con respecto a la ayuda que se debía prestar a las viudas, se refería a aquellas que no tuvieran una familia que se ocupase de sus necesidades. Por lo tanto, el peso de esta ayuda recae sobre la iglesia y es preciso que la iglesia se haga cargo de atender a sus necesidades. ¿Cuántas iglesias hay en la actualidad que verdaderamente lo hagan? ¿Cuántas de las congregaciones tienen como una parte normal de su presupuesto, un capítulo dedicado a suplir las necesidades de aquellos creyentes que no puedan suplir sus propias necesidades? Eso se aplica a las personas que se encuentren temporalmente sin trabajo, a los que están heridos o enfermos, así como a las personas ancianas. Estoy firmemente convencido que para Dios es una abominación ver a las viudas en la comunidad cristiana teniendo que depender del las obras caritativas de país para que supla sus necesidades. He aquí también una de las aplicaciones que pueden tener nuestros diezmos. En el plan de Dios, la iglesia debe administrar los diezmos y distribuirlos a atender a las necesidades del cuerpo, pero por desgracia no todas para actúan conforme a este plan. Creo que si, efectivamente, una iglesia se atiene a este plan de Dios, enseñando su Palabra y administrando su dinero, entonces debemos entregarle a la iglesia todos nuestros diezmos. Pero si la iglesia hace caso omiso de sus responsabilidades fisicas, entonces cada cristiano deberá manifestar su propia convicción. No se puede, bajo ninguna circunstancia, dejar desatendidas a las personas que están verdaderamente necesitadas. Cristo hizo esta advertencia a los fariseos en Mateo 15:5-6: "Pero vosotros decís que cualquiera que diga a su padre o a su madre: "Aquello con que hubieras sido beneficiado es mi ofrenda a Dios', no debe honrar a su padre. Así habéis invalidado la palabra de Dios por causa de vuestra tradición." Siempre y cuando se esté recibiendo una enseñanza de la iglesia es preciso proveer las necesidades de sus obreros. Si la iglesia no entiende el plan de Dios, deberías de esforzarte en ayudarla para que llegue a comprenderlo. Si encuentras una actitud cerrada en este aspecto, yo te recomendaría que te buscases otro lugar de adoración que sea compatible con tu entrega, en el cual sea posible que les confíes la riqueza que Dios te provea. La comunidad de no creyentes También somos guiados a compartir con las personas pertenecientes a la comunidad de no creyentes. Cuando Dios se refiere de manera concreta al "creyente", a los "elegidos" o al "Cuerpo de Cristo" se está refiriendo a los cristianos. Hay otros versículos en la Biblia que tratan acerca de la necesidad de compartir, pero no se refieren directamente al Cuerpo de Cristo, sino que incluyen a la comunidad de no creyentes.

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La familia y sus finanzas

¿Quién merece ayuda?

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Me he encontrado con que la mayoría de estos asajes tratan de que es preciso suplir las necesidades de la comunidad las personas que no creen. Tal vez haya hasta diez veces más referencias que mencionan el compartir con los no creyentes, en lugar de compartir solamente con los que lo son. Es evidente que Dios ha establecido unas normas muy concretas: • No debemos aceptar recursos rocedentes de los no creyentes. • Debemos ser testigos ante las personas que no son creyentes, mostrándoles nuestro deseo de compartir. Mateo 5:42 ( BLA) afirma: "Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo niegues". En Mateo 10:42 leemos: "Cualquiera que da a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente porque es mi discípulo, de cierto os digo que jamás perderá su recompensa." Ninguno de estos versículos, como es el caso con otros cincuenta versículos semejantes, se refieren solamente a los cristianos, sino a la comunidad en general, es decir, tanto a los creyentes como a los que no lo son. Debemos dar testimonio ante las personas que no son creyentes por medio de nuestros recursos materiales, demostrando que Cristo, y no el dinero, es el que gobierna nuestra vida. Con frecuencia se relaciona la entrega al cristianismo con el hecho de si tenemos más interés en el dinero que en las necesidades que puedan tener otras personas. Cristo basó una gran parte de Sus enseñanzas en este principio, como pueda ser lo que dice en Lucas 12:33 donde nos dice: "Vended vuestros bienes y dad ofrendas de misericordia. Haceos bolsas que no se envejecen, un tesoro inagotable en los cielos, donde no se acerca el ladrón, ni la polilla destruye." Pídele a Dios que te libere de la carga de preocupación, de ansiedad y de frustración que sientes en relación con el dinero. Pídele que ponga en tu corazón solamente a aquellas personas que tú puedas ayudar. Cree de verdad que Dios te va a dar la habilidad necesaria además de la responsabilidad. Dedícate muy en serio a dar testimonio en este aspecto de poder dar a otros.

pide para suplir sus necesidades, sus deseos o para adquirir cosas que no son realmente necesarias. No des por las buenas al primero que te pida. Si te es posible relaciónate y averigua cuál es realmente la situación. Comparte los principios de Dios sobre la economía con esa persona, ayudándola a hacerse un presupuesto y a vivir dentro de sí. Averigua cómo vive. ¿Es posible que se gaste el dinero que les des en bebidas alcohólicas? ¿Está despilfarrando su dinero en cosas que no tienen sentido? Si es así, tú no estás obligado a ayudarla. De hecho, si lo haces es posible que estés inadvertidamente interfiriendo en el plan que Dios tiene para esa persona. Las mismas averiguaciones puedes hacer con respecto a las organizaciones cristianas. Dios no solamente nos da oportunidades para que ayudemos a suplir las necesidades de Sus hijos, sino para que invirtamos nuestro dinero en diezmos, ofrendas y sacrificios para Su obra. Por desgracia, en la actualidad los cristianos se ven acosados por todas partes para prestar ayuda a muchas organizaciones de caridad. Es verdad que muchas de ellas merecen nuestra ayuda, pe ro hay otras que tienen una mala administración e incluso hay las que son deshonestas. Busca la sabiduría de Dios antes de dar para esta obra. Consi e que te den alguna información escrita acerca de su =c y sus doctrinas. Habla con otras personas que han invertido en luso referencias si no has oído nunca hablar acerca de ese grupo. Permite que la organización se entere de por qué les estás interrogando al respecto. Usa del discernimiento, sé un buen mayordomo de los recursos que Dios ha puesto en tus manos. Una lista de comprobaciones mínima podría ser como sigue:

Considera la persona que lo va a recibir El cristiano debe ser muy sensible, no solamente con respecto a las personas a las que ayuda, sino en saber de qué modo van a utilizar el dinero. ¿Qué podemos decir de la enorme cantidad de organizaciones que se nos acercan a pedir ayuda? ¿Cómo puedes averiguar si están realmente haciendo la obra de Dios? Dios nos ha dicho abiertamente lo que espera de nosotros. Las normas están claras con respecto a las personas y lo que debes hacer es averiguar si la persona está dispuesta y puede trabajar. Además debes enterarse de si

¿Está comunicando dicha organización el auténtico mensaje de Jesucristo? Si no lo están haciendo, no les prestes tu ayuda. Esto se refiere a aquellas organizaciones que se nos acercan en el nombre de Cristo, puesto que existen aquellas otras organizaciones, de carácter secular, que realizan una gran obra por medio de canales seculares. ¿Hay personas que reaccionen de manera positiva ante esta organización? ¿Hay vidas que han sido transformadas gracias a lo que aportan? • ¿Está intentando y logrando la organización alcanzar unas metas? Si es así, debieran de poder explicarte cuáles son esas metas.

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• ¿Son las vidas de las personas que ocupan puestos de liderazgo en la organización consistentes con los principios bíblicos que define Dios para las organizaciones cristianas? ¿Se está multiplicando la organización o tiende a ir desapareciendo? ( Esta no es siempre una norma absoluta porque podrás encontrar liderazgo dentro d e una organización que está intentando am pliar sus fronteras.) Pregunta apersonas que la conozcan y usa de tu discernimiento. Visita personalmente la organización, especialmente si tu dedinero. cisión implica el invertir una suma considerable Tiene dicha organización una reconocida excelencia además de verse libre de suntuosidad y derroche? ¿Cuánto dinero dedican a levantar fondos? Si te encuentras con una organización que gasta más de la mitad de sus finanzas para obtener más fondos, yo pondría en duda su efectividad. ¿Puedes invertir en otra parte y obtener mejores dividendos de la inversión que haces con el dinero que le pertenece a Dios? • Haz averiguaciones sobre dicha organización en otras organizaciones cristianas. Diles que buscas una respuesta sincera. Comparte de buen grado, conforme al plan de Dios, pero sabiendo discernir y siendo cauteloso como mayordomo que eres. No aceptes nada que no sea la excelencia cuando se trate del dinero que le pertenece al Señor.

IO Respirando Desde el Punto de Vista Financiero CAPÍTULO

n este capítulo lo que vamos a hacer es ampliar algunos de los conceptos los cuales hemos tratado con anterioridad, es cialmente aquellos sobre que te puedan ayudar a comprender cómo tomar decisiones en lo que respecta a la economía, conforme a los lanes de Dios. Los principios que menciono son prácticos y se pueden ap car además de que se encuentran en uno o en mas de los conceptos bíblicos que ya hemos expuesto en los capítulos anteriores. Pensando en mi propio crecimiento cristiano, recuerdo que uno de los más importantes conceptos que aprendí era el de poder respirar, po r así decirlo, desde el unto de vista espiritual. Este concepto está sacado de 1 Juan 1:9: "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad". Aquí tiene lugar una secuencia de acontecimientos espirituales: • Dios nos hace estar convencidos de que hemos pecado. • Reconocemos que así es y pedimos perdón. • Dios nos limpia y perdona nuestras transgresiones. Recuerda que lo que Dios hace es probar que hemos pecado, pero Satanás nos condena. Una vez que hemos sido limpiados de nuestros pecados y hemos hecho restitución por ellos (si así lo requiere Dios) deja de acordarse de nuestras transgresiones. ¡Qué tremendo alivio es entenderlo porque, durante los primeros meses después de haber aceptado a Cristo, intenté convertirme en la clase de cristiano que estaba convencido que Dios deseaba que yo fuese! Después de luchar denodadamente sin conseguirlo, me consideré totalmente incapaz. Por mucho que lo intentaba, no podía vencer a mi pasado, por lo que obtuve muy pocas victorias sobre las cargas que me tenían atado.

La familia y sus f inanzas

Respirando desde el punto de ~financiero

Le hablé a un amigo creyente acerca de la frustración que sentía y su respuesta fue: "Te hace sentirte realmente inferior, ¿verdad que si?" A lo que le contesté: "¡Amén!" Entonces me dijo: "La persona que está siempre luchando para hacerse cristiana no tarda en crearse un complejo de inferioridad, pero la situación no es tan complicada porque la verdad es que somos realmente inferiores." Ninguno de nosotros está capacitado para convertirnos en la clase de cristianos que Dios quiere que seamos. Por qué? Pues sencillamente porque Dios no puede tolerar el vado. Y la verdad es que todos nosotros venir a Dios y seguiremos pecando a hemos pecado. Pecamos antes de ser cristianos. El concepto pesar de la respiración espiritual nos dice que debemos exhalar el aire negativo e inhalar el positivo. Todo lo que se me exigía era que confesase mis pecados, echando fuera el aire malo y adueñándome de la plenitud del Espíritu Santo, es decir, inhalando el aire bueno. ¡Qué fantástico cambio se produjo en mi vida! Sentí una libertad que jamás había experimentado en mi vida. Me permitió dejar atrás mi pasado y comenzar de nuevo con Dios a partir de ese momento. Ten mucho cuidado con no adulterar el concepto de la res iración espiritual. El perdón no nos permite seguir pecando ., esperar a mismo tiempo ser perdonados, porque si no existe un cambió de actitud, no es posible alcanzar el perdón. Pero cuando hay una modificación en nuestra actitud, Dios dice que está dispuesto a perdonarnos. Al pensar sobre esta idea y relacionarla con la economía, me di cuenta de que era posible para los cristianos apropiarse del perdón que Dios ha prometido también en lo que se refiere al campo de las finanzas. Me gustaría poder explicarte de qué manera puedes tú también, como creyente, respirar financieramente:

siones sobre la economía que sean positivas? Un conocimiento apropiado y además la sabiduría necesaria para saber aplicarlo. "El temor de Jehová es el principio del conocimiento; los insensatos desprecian la sabiduría y la disciplina" (Proverbios 1:7). Por lo tanto, es de vital importancia en lo que se refiere a poder respirar económicamente reconocer que lo que estamos realmente buscando es la sabiduría y el conocimiento que procede de Dios. A fin de poder obtenerlo es preciso que le entregas a Dios toda decisión. "Hallarás gracia y buena opinión ante los ojos de Dios y de los hombres. Confía en Jehová con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia inteliencia. Reconócelo en todos tus cominos, y él enderezará tus sendas" Proverbios 3:4-6). A continuación aplica la disciplina que se enseña en Lucas 9:23: "Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame".

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1.

Reconoce todos los días que todo le pertenece a Dios Asegúrate de que todos los días pones los asuntos y las decisiones de ese día en las manos de Dios. Comoquiera que los problemas son algo que surjen a nuestro paso todos los días, es preciso reconocer también a diario la autoridad de Dios y Su perdón. Es preciso comenzar cada día con un corazón limpio, con lo cual quiero decir que no haya ningún pecado que no le hayamos confesado. ¿Cuáles son los elementos esenciales en lo que se refiere a tomar deci-

2.

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Acepta la dirección de Dios Una vez que has puesto el control de tus finanzas en manos de Dios, acepta su sentencia. No condiciones anticipadamente tu reacción esperando solamente obtener aumentos. Pablo dice que había aprendido a tener escasez y a tener abundancia, pero que era preciso dar gracias en todo. De manera que una vez que hayas permitido que sea Dios el que decida, acepta Su sabiduría. Es posible que Dios se esté valiendo de tus adversidades para que sirvan de testimonio o quizás para enfatizar alguna lección. He oído decir con frecuencia, y me he dado cuenta de que es cierto en mi propia vida, que cuando más crecemos y maduramos es precisamente en los momentos de adversidad. Dios nos dice que la plata se punifica pasando por el fuego. No intentes escapar de las dificultades, sino busca la paz cuando te encuentres en ellas. "Por nada estéis afanosos; más bien, presentad vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias" (Filipenses 4:6). Cada vez que tengas que tomar una decisión confía en que Dios puede guiarte en todas las situaciones. Comprueba tus decisiones cotejándolas con la Palabra de Dios, confirmándolas en oración y aceptando la respuesta que Dios te dé. Hay un aso final que debemos dar en lo que se refiere a aceptar las decisiones de Dios y se encuentra en 1 Tesalonicenses 5:18: "Dad gracias en todo, rque ésta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús.Cuando e pides a Dios que tome una decisión y te responde, dale las gracias, sea o no la respuesta que estabas buscando. En cierta ocasión aconsejé a un matrimonio que estaba pasando por dificultades económicas. Sus ingresos no eran suficientes como para cubrir sus deseos y se encontraban económicamente atados. Examinando las cir-

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cunstancias con el esposo, me encontré con que no estaba realmente satisfecho con su trabajo. Parece ser que su compañía no le estaba tratando con justicia por el hecho de vivir la vida cristiana. Ese hecho impedía que diese testimonio a los clientes con los que trataba. Le pregunté si estaba dispuesto a buscar la sabiduría de Dios en lugar de la de los hombres. "Claro que sf'-me respondió. Le pregunté entonces si estaba además dispuesto a dejar la decisión con respecto a su empleo en manos de Dios y que fuese Él quien decidiese el próximo paso. Una vez que hubimos orado al respecto, me confirmó de nuevo que estaba dispuesto a aceptar la voluntad de Dice, pasase lo que pasase. Pidió concretamente dos cosas en oración. Primero, que Dios le di7 de manera clara con respecto a su trabajo y segundo que le sacase dr*1 das y Dios obró de manera concreta en ambos sentidos. Lo primero que hizo fue sentirse convencido de que era preciso que se enfrentase con sus jefes en lo que se refería a sus creencias religiosas. Ellos le contestaron que ya no tenían un puesto para él en la compañía y le echaron. Cuando llegó el momento, le hicieron entrega del dinero que habían dedicado a un plan de ahorros y esa cantidad fue suficiente para pagar todas sus deudas. A pesar de que posiblemente no fuese el método que nosotros hubiéramos escogido, le dio las gracias a Dios por la respuesta. De hecho, la respuesta de Dios fue muy concreta, porque le quitaron de un puesto en el cual no le era realmente posible honrar a Dios y al mismo tiempo pudo saldar sus deudas. Más cristianos deberían aprender a aceptar la sabiduría de Dios cuando la piden. Él nos ama profundamente y no nos dará jamás nada que no sea lo mejor 3.

Decídete a dar el diezmo

Como ya hemos dicho con anterioridad, decídete a darle a Dios la primera parte de tus ingresos como reconocimiento de que todo le pertenece a Él. "Dad, y se os dará; medida buena, apretada, sacudida y rebosante se os dará en vuestro regazo. Porque con la medida con que medís, se os volverá a medir" (Lucas 6:38). Este es un paso esencial en la respiración económica. No solamente entregamos a Dios nuestras decisiones y aceptamos Su dirección, pero luego le manifestamos aunque sea de manera insignificante, que sabemos que todo le pertenece. El diezmo es una inversión espiritual y, por lo tanto, no se puede evaluar

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sobre una base de beneficios y pérdidas. Hay demasiados cristianos que consideran el diezmo desde un punto de vista mundano ,pero Dios es el único director de negocios que es capaz de hacer que el 90 por ciento rinda más que el 100 por ciento. 4. Sacrifica Como ya hemos expuesto también en capítulos anteriores, la idea de hacer sacrificios no goza de demasiada popularidad entre los cristianos o las organizaciones cristianas. La mayoría de nosotros preferimos charlar acerca del tema de modo general, en lugar de hacerlo de una manera más concreta. Está perfectamente bien que el pastor mencione los sacrificios refiriéndose a los misioneros o a los obreros que dedican todo su tiempo a la obra del Señor, pero cuando lo que dice es que sacrifiquemos el deporte o que no compremos un coche nuevo por causa de la obra, de repente consideramos que es un radical. Se ha pedido a muchos cristianos que sacrificasen sus vidas, mientras que otros han tenido que sacrificar las necesidades diarias a fin de poder llevar la Palabra de Dios, pe ro a la mayoría de nosotros sólo se nos pide que sacrifiquemos cantidades teniendo que postergar o eliminar unos pocos deseos. Aquellas personas que verdaderamente han puesto su economía en manos de Dios también han gozado de su fidelidad. "Y todo aquel que deja casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos o campos por causa de mi nombre, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna" (Mateo 19:29). Dios pone a nuestro alcance muchas oportunidades para que podamos invertir en las vidas de personas que se encuentran necesitadas. En una ocasión un amigo cristiano me contó de una oportunidad como esas. Roberto vivía en un suburbio de la clase media y durante muchos meses el vecino que tenía detrás de su casa había sido motivo de muchos conflictos. Aunque los dos profesaban ser cristianos, ninguno de los dos estaba dispuesto a admitir que podía estar equivocado. Discutieron acerca de las verjas, los rros, los cubos de basura y mudas otras cosas, hasta el punto de acabar por no hablarse. Para colmo, el vecino metió aproximadamente una docena de gallinas en el gallinero que tenía en el jardín de atrás. En ese momento la guerra fría que se había desencadenado se puso al rojo vivo. Roberto dijo que estaba convencido de que el vecino había adquirido aquellas gallinas

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para fastidiarle. Cada vez que iba a su jardín de atrás y veía u oía a aquellas gallinas se sentía más irritado. Roberto se puso muy antipático con su vecino, hasta que se perjudicó su cristianismo y quedó su testimonio reducido a nada. Sumido en la desesración, llegó al convencimiento de que había obrado mal y que debía de nacer las paces con su hermano. Yendo a la casa de su vecino, llamó a la puerta. Al contestarle éste, Roberto le dijo: "Lamento haberte ofendido. Es culpa mía y te ruego que me perdones." Aceptando de inmediato su admisión de culpabilidad, el vecino le dio las gracias y le pidió que entrase en su casa. Al hablar, se hizo aparente el motivo por el cual Dios había revelado a Roberto que lo que hacía estaba mal. Unos meses antes el vecino y su esposa se vieron involucrados en un accidente automobilistico. Su esposa había quedado herida y se encontraba aún incapacitada. Él se había fracturado algunas vértebras y no podía trabajar. Comoquiera que había trabajado con anterioridad de manera independiente, no tenía ningunos ingresos. Durante varios meses pudieron vivir de los ahorros que tenían, pero con las facturas de los médicos y los gastos normales de la vida se habían quedado totalmente sin dinero. Él había trasladado las gallinas a la parte de atrás con el fin de tener algo para alimentarse. Roberto me contó que se echó a llorar y que le pidió perdón a su vecino por haber sido tan despiadado con él. Como resultado de ello, surgió la amistad entre ellos, pudiendo un cristiano suplir las necesidades de otro. Roberto dijo además que había sido una gran bendición no tener que ver más a aquellas gallinas en el huerto de atrás. Este es solo otro caso que nos muestra cómo podemos ser conscientes y sensibles ante las necesidades de otras pe rsonas. Es sorprendente, cuando eres realmente sensible, te das cuenta de lo poco que cuestan los sacrificios personales. Sin el contacto personal esta sensibilidad se hace cada vez más remota y menos aparente. Por lo tanto, si el cristiano desea entregar a Dios el control de su situación económica, es preciso que tenga en cuenta lo siguiente: Pon todos los días las decisiones financieras en manos de Dios, por insignificantes o por importantes que sean. • Acepta la sabiduría de Dios en cada decisión. • Da el testimonio mínimo en lo que se refiere a reconocer que todo le pertenece a Él, por medio de los diezmos. • Estate dispuesto a compartir de buen grado con otras personas, incluso en el caso de que sea preciso que hagas un sacrificio para conseguirlo.

CAPÍTULO

Principios Para Tomar Decisiones Financieras

C

ómo puede el cristiano tomar decisione s respecto a su situación económica conforme a los planes de Dios? Comprendiendo Sus instrucciones, cada decisión requiere entender a fondo las actitudes de Dios, y esa comprensión es el resultado de leer la Palabra de Dios y de mantener una comunicación con Él. La persona que no ora nunca, o que no presta nunca atención al orar, no vede oir a Dios hablar por medio de la oración. De la misma manera que lapersona que no lee nunca la Biblia no podrá oir nunca a Dios hablar por medio de las Escrituras. Si el cristiano no le pide nunca a Dios que le dirija en una inversión o a la hora de tomar una decisión de índole económica, nunca obtendrá una respuesta. Los siguientes principios son un resumen de cómo desea Dios que actuemos a la hora de tomar decisiones relacionadas con nuestra economía: 1.

Evita las especulaciones.

Cada cristiano debiera buscar el aumento de Dios y no proveer con el propósito de dedicar su dinero a programas especulativos. En muchas ocasiones aquellos programas que son más tentadores no solamente no son éticos, sino que rayan en lo ilegal. Incluidos entre ellos tenemos aquellos sistemas de franquicia que actuan supuestamente como pirámide, los sistemas de mercado de varios niveles, ofertas de acciones que no están registradas y otra serie de empresas un tanto dudosas. Estudia detenidamente cada "oportunidad" en relación con tu propia entrega a Cristo. No permitas que otros tomen tus decisiones económicas por ti. No debemos de ser como niños, influenciados por las nuevas ideas expresadas por alguien, Toma tus decisiones a la luz de tus metas y considera si la empresa es realmente necesaria. Con frecuencia al participar en programas de carácter especulativo perjudicarás tu testimonio, tu credibilidad

La familia y sus finanzas e incluso perderás tu dinero. De modo que evítalas. Puedes perder en cuestión de segundos un dinero que te ha costado años ahorrar y peor que eso todavía es comprometer a un cristiano para que caiga en la misma trampa. Condiciona por adelantado tus actitudes de manera que evites las " oportunidades" especulativas. La tentación de conseguir un dinero aparentemente fácil y la emoción que pretenden prestar sus patrocinadores pondráa dura prueba tu entrega a Cristo, pero Satanás no tiene por qué atacar un aspecto "espiritual" si le permites meter baza en tu economía, porque eso no tardará en afectarte espiritualmente. Mantén tus finanzas al día. El segundo principio a la hora de tomar decisiones económicas es el mantener tus finanzas siempre sobre una base actual. En otras palabras, no hagas planes para pedir dinero prestado si sabes que luego te va a costar muchísimo trabajo devolverlo, aunque sea solamente por un día. Muchos cristianos se han visto involucrados en programas de inversión que no podían realmente costear y han tenido que pe dir dinero prestado para invertir cuando el devolver el dinero dependía de un acontecimiento futuro. Eso no es otra cosa que correr el peligro de un desastre económico. Si lo que pretendes comprar va a hacerte correr el riesgo de perder tu libertad económica en el futuro, sencillamente olvídalo. El comprar siguiendo un impulso, ya sea con el propósito de invertir o de consumir, es un auténtico desastre. Al evaluar una compra, una inversión o cualquier otra situación similar, considera la obligación que estarás incurriendo teniendo en cuenta los ingresos con los que cuentas. No cabe duda de que esa es una actitud conservadora, pero esa filosofia tiene como propósito el disfrutar de paz a largo plazo, no el obtener un beneficio a corto plazo. "Porque ¿cuál de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla? No sea que después de haber puesto los cimientos y al no poderla terminar, todos los que la vean comiencen a burlarse de él, diciendo: `Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar"" (Lucas 14:28-30). Planea para el día de mañana siendo rudente hoy; haz tus planes a la luz de las circunstancias actuales, no casándote en algún acontecimiento futuro. Mantén el principio de estar libre de deudas; toma cada una de tus decisiones sobre la base de si a la postre lo que decidas te hará estar esclavizado.

2.

par

Princpos

tornar decisiones financieras 5 12 Piensa en tu testimonio, Considera todas las de cisiones podrá producir sobre la obra la que tomes sobre la base del efecto que una difícil situación, entre eputación de Cristo, sin poner a Dios en tenga que sacarte de los ap la. esPa y la pared, por así deci _ _, ara ue ninguna gracia esa situación En 1 que te metas; sospecho que no le hace todo para la gloria de Dios , 1 Corintios 10;31 se nos dice: "Hacedlo El lanzarnos a hacer alg bas mientes, incluso aunque se oándonos sencillamente en nuestros sentide Él para que nos saque a para realizar la obra de Dios luego depe nder Su plan. Aquellos cristianos los líos en que nos metemos no es conforme a deben aceptar ésto como os que dedican todo su tiempo al ministerio para llevar a cabo la obr na de 18s decisiones económicas undamentales prestado aparte del pueblo 3 de Dios. Si es preciso que pidamos dinero con cuidado! Eso tampoco de Dios para poder hacer Su trabajo andémonos pobres, y el que toma prest es conforme a Su plan. "El rico domina a los Dios nunca dejará Su tr do es esclavo del que presta" (Proverbios 22:7). pero tampoco colocará a abajo sin realizar por falta de medios económicos, debajo de una institución sena organización en situación de servidumbre, a tratar a otras personas cular. Este mismo principio se aplica igualmente anteriormente, no existen con una falta de ética. Como ya hemos dicho mente existen mentirosos Z queñas mentiras ni hurtos insignificantes, solaSi tú tratas de manera i ladrones, njusta o falta de ética a una persona, lo que saldrá perjudicado será tu testimo cuales fueren las circunstanc io . Decide de una vez para siempre que sean ti dependa. No hay manera sencilla la verdad y toda la verdad en cuanto de frecuencia, cuando eres má a de hacerlo porque sucede que, con tropiezas, restituye y admit vulnerable surgirá una "oportunidad" pero si tu equivoc ión y Dios honrará tu decisión. 4. Da para las de otros. Evita prestar dinero a u sea posible dar. ¿Por qué? persona que esté necesitada siempre que te propósito de pedirte un pré Si se te acerca una persona necesitada con el El testimonio y el compañ erismo saldrás mejor pa rado dándole el dinero. duradero que la gratitud tempora que se produce como resultado es más tarda en desaparecer. que resulta de un préstamo y eso no Recuerdo haber leido un artículoen h"¿Quésnfamilrejo la siguiente pregunta: que le has prestado dinero" respuesta era: "Es un familiar cercano al harta frecuencia, con los c o Lamentablemente, lo mismo sucede, con íntimo al que le has prestad o ¿Qué es un amigo lejano? Es un amigo o dinero. Si alguna persona se acerca a ti con el propósito de lta dirte P restado un dinero para adquirir algo que en tu derecho de preguntartedesea obligado a pres innecesario, ese si estás realmente 3.

Lafamilia y sus fi nanzas

Principios para tomar decisiones financieras

dinero. Pero si la persona está verdaderamente necesitada, tienes la responsabilidad, de parte de Dios, de suministrar dicha necesidad.

con el propósito de satisfacer tu ego? ¿Qué harás con el dinero en caso de que Dios lo multiplique? Si estás convencido de que lo que vas a adquirir es conforme a la voluntad de Dios podrás tener paz al respecto. Pero si llegas a la conclusión de qu e esa compra no es otra cosa que un deseo o un capricho, detente y comprueba los principios de Dios. Muchos cristianos se sienten frustrados porque no son capaces de distinguir entre lo que son necesidades y lo que son lujos superfluos. Por consiguiente, buscan el sentirse realizados por los mismos medios que las personas que no son creyentes y luego se preguntan por qué su vida cristiana no produce ningún fruto. Estoy convencido de que Dios desea que vivamos con comodidad, pero 10 que no desea es que vivamos con lujos que son, sin duda, innecesarias. En un momento en que se podrían utilizar nuestros recursos para promover la obra de Dios por todo el mundo, deberíamos de evaluar cada uno de nuestros motivos económicos. "No améis al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él; porque todo lo que hay en el mundo los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la soberbia de la vida- no proviene del Padre sino del mundo" (1 Juan 2:15-16).

126

No salgas fiador, firmando para que otro obtenga un préstamo. El firmar a favor de otra persona, para que adquiera un préstamo, es prometer pagar con tus valores en caso de que esa persona sea incapaz de hacer frente a la deuda que ha contraído. Las Escrituras prohiben tajantemente hacerlo siempre que se menciona las garantías o el actuar como fiador, "poniéndose en las manos de otros." En el libro de los Proverbios se menciona esto en varias ocasiones. Es interesante que nos fijemos en que Salomón, que fue rey y gobernante de Israel, escribió mucho sobre el hecho de que no es conveniente actuar como fiador para que otra persona pueda conseguir un préstamo. Es evidente que en muchas ocasiones debieron acudir personas ante su presencia con el fin de poder cobrar unas deudas, quitan las posesiones a las personas que habían actuado como fiadores. Hizo notar lo ridículo que es encontrarse en semejante situación diciendo: "Amigo, no solamente te quitarán tu casa, sino asta la cama que tienes." Este concepto va más allá de la idea de actuar como fiador, aplicándose también a actuar como fiador de otra persona en el terreno de los ne gocios. Si trabajas para una compañía y tienes normalmente por costumbre firmar en lugar de otro (a excepción de un negocio privado), estás transgrediendo este principio. "Hijo mío, si diste fianza por tu prójimo estrechaste la mano con un quedado atrapado con los extraño, te has enredado con tus palabras, y dichos de tu boca. Ahora pues, haz esto, hijo mío, para quedar libre, ya que has caído en las manos de tu prójimo: Anda, humíllate, importuna a tu prójimo" (Proverbios 6:1-3). De todos los temas que trata la Biblia, éste parece ser uno de los más explícitos. A pesar de lo cual nos saltamos continuamente por alto este principio y lo racionalizamos haciendo uso de la lógica humana. Pregunta a cualquier banquero qué clase de préstamo considera el más factible de incumplirse y prácticamente todo el mundo responderá que las notas firmadas por un fiador. No solamente es actuar como fiador una violación en contra del principio, sino que al hacerlo, es posible que la persona que actue como fiador esté interfiriendo con el plan que tiene Dios para la otra persona.

5.

6.

Evita la indulgencia. A rende a saber discernir la diferencia que existe entre las necesidades, los deseos y los caprichos al efectuar cualquier compra. Eso se aplica no solamente a la compra de bienes materiales, sino también a las inversiones. Antes de invertir, lo que tienes que hacer es pensar muy en serio en el motivo por el cual lo vas a hacer. ¿Lo haces para que te ayude a suplir una necesidad? ¿ Es para que la obra de Dios se extienda? ¿ O lo haces más bien

127

7.

Prepárate para las disminuciones. El estar preparado para enfrentarse con disminuciones inesperadas de fondos es una parte vital para que puedas mantenerte al día. Cuando tomas una decisión relacionada con la economía, piensa en lo que pasaría si tuvieses aun ue fuese solo una pequeña disminución en tus fondos. Esto resulta es cialmente importante cuando la esposa trabaja y se hacen gastos dando por sentado que se tienen garantiz ados fuentes de ingresos. Pero ¿qué sucedería si te vieses obligado a reducir tus ingresos? ¿Estás dispuesto a amoldarte, según sea necesario, de manera que puedas vivir conforme a tus medios económicos? ¿Qué pasaría si Dios te pidiese que hicieses algo en Su obra que exigiese el contar con una deducción de tus ingresos? Para el creyente que confía plenamente en Cristo, la calidad de la vida es totalmente independiente de las circunstancias, como dice Pablo en Filipenses 4:12-13: "Sé vivir en la pobreza, y en todas las circunstancias, he aprendido el secreto de hacer frente tanto a la hartura como al hambre, tanto a la abundancia como a la necesidad. ¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece!" No hagas las cosas llegando al limite de tus ingresos, toma más bien tus decisiones financieras pensando que es posible que tengas que reducir tu nivel de vida. El que seamos capaces de dar gracias a Dios en cada circunstancia demuestra que dependemos totalmente de Él y confiamos plenamente en Dios. 8.

Si no tienes paz al respecto, no efectúes la compra. Con frecuencia no reaccionamos como debemos a la Palabra de Dios 0

128

La familia y sus finanzas

ante Su presencia; no sabemos escucharle en los momentos en que nos sentimos interiormente turbados, presas de ese mal estar que conocemos como vivir faltos de paz. Como último recurso, para dirigirnos Dios se valdrá de esa situación. Por lo tanto, si no tienes paz, no lo hagas. Si te ves obligado a tomar una decisión rápidamente, no lo hagas, toma el tiempo que necesitas para pensar en ello y poder orar al respecto, pues es posible que Dios quiera proveer lo que necesitas de una manera totalmente distinta. En muchas ocasiones he tomado decisiones en un momento determinado, sin pensármelo dos veces, pero he tenido que lamentar posteriormente la mayoría de esas decisiones. Proponte no tomar nunca una decisión cuando te sientes presionado. Es posible que te pierdas algunas cosas que "valgan la pe na", pero además te rderás otras muchas que no vallan la pena. "La bendición del Señor es la que enriquece y no añade tristeza con ella (Proverbios 10:22). Aprende a ser sensible a la dirección interior de Dios, ya que Él siempre te dirigirá si esperas en Él. Incluso en aquellos casos en que no vemos con claridad el camino indicado en la Palabra de Dios o no lo oímos por medio de la oración, Dios hará que sintamos una cierta incomodida que impedirá que nos sometamos a la esclavitud financiera. Resumen Principios para respimr económicamente: • Reconoce todos los días que todo le pertenece a Dios (Proverbios 3:4-6). • Acepta la dirección de Dios (1 Tesalonicenses 5:18). • Decídete a dar el diezmo (Lucas 6:38). • Intenta sacrificarte (Lucas 3:11). Principios que debes aplicar para tomar decisiones relacionadas con las finanzas: • Evita a toda costa las especulaciones (Proverbios 28:22). • Mantén tu economía al día (Lucas 14:28-29). • Piensa en tu testimonio (1 Corintios 10:31). • Da para cubrir las necesidades de otros (2 Corintios 9:13). • No actues nunca como fiador (Proverbios 6:1-3). • Evita ser indulgente (1 Timoteo 6:8). • Prepárate para las disminuciones (Filipenses 4:12-13). • Busca la paz de Dios (Proverbios 10:22). Esto concluye nuestro estudio de los principios que Dios nos da con respecto a la economía. Quisiera desafiarte para que orases con respecto a la manera concreta en que Dios desea que cambies tu estilo de vida como resultado de los conceptos que has aprendido.

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La familia y sus finanzas

A. METAS PERSONALES Para que las contestes como si las preguntas te las estuviese haciendo tu (esposo) o (esposa): 1. ¿Cuáles son tus metas personales en la vida? 2. ¿Qué metas te has propuesto alcanzar durante los próximos años?

Aplicaciones prácticas

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6. Qué te gustaría que dijese o que hiciese la próxima vez que parezcas sentirte impaciente con algo o con alguien? 7. ¿Qué te gustaría que dijese o que hiciese si empiezas a criticar a alguien? 8. ¿Crees que debo mejorar en cuanto a estar listo/a a tiempo para ir a las reuniones?

3. ¿De qué manera puedo ayudarte a alcanzar esas metas? 9. ¿Crees que deberíamos salir juntos con más frecuencia? 4. ¿Qué puedo hacer para ayudarte o mejorar la situación económica? 5. ¿Crees que existe el debido equilibrio entre la actividad que realizo en el exterior y el tiempo que paso en casa?

10. ¿Digo cosas hirientes o te critico alguna vez en frente de otras personas? 11. ¿Qué debo hacer en público para animarte?

6. ¿Te gustaría que hiciese más cosas en la casa, como puedan ser limpiar, decorar, cte.? 7. En lo que se refiere a las actividades en las que participo fuera de casa, ¿qué considerarías tú como prioridades?

12. ¿Respondo a tus sugerencias e ideas como si a mí ya se me hubiese ocurrido en lugar de darte las gracias y animarte a que contribuyas más? 13. ¿Te cuento lo bastante acerca de lo que hago todos los días?

8. ¿Crees que hay alguna cosa que necesito mejorar, como pueda ser mi aspecto, mis modales, mis actitudes? B. METAS PARA EL MATRIMONIO

14. ¿Qué pequeños actos de amor hago por ti? 15. ¿Qué es lo que te hace ponerte furioso conmigo en más ocasiones?

1. ¿Crees que nuestro matrimonio está madurando y que nos sentimos cada vez mas unidos?

16. ¿Te expreso con suficiente frecuencia mi admiración y mi respeto?

2. ¿Crees que nos comunicamos de una manera clara?

17. ¿Pretendemos que somos un matrimonio feliz delante de los demás?

3. ¿Crees que soy sensible a tus necesidades personales?

18. ¿Qué crees que significa 1 Corintios 7:3-7?

4. ¿Qué quisieras que dijese o que hiciese la próxima vez que te enfades conmigo o que no me hables?

19. ¿Crees que tenemos necesidad de ir a ver a un consejero matrimonial?

5. La próxima vez que te retrases a la hora de pre ararte paró ir a alguna parte, ¿qué quieres que te diga o que haga

20. ¿Cuáles son las responsabilidades de la "ayuda idónea" en el matrimonio?

Aplicaciones prácticas

La familia y sus finanzas

134

135 11. ¿Crees que deberíamos hacer más ejercicio?

21. ¿Nos dedicamos el uno al otro la misma atención que cuando no teníamos hijos?

C.

12.

Utilizamos bien nuestro tiempo? Por ejemplo, ¿vemos demasiado la televisión? ¿Opinas que deberíamos tener más "hobbies"? ¿Deberíamos leer más?

13.

Cómo y cuándo debemos disciplinar a nuestros hijos? ¿Cuál crees que es el punto de vista bíblico sobre este tema?

METAS FAMILIARES 1. ¿Cuáles son nuestras metas como familia? 2. ¿Estamos alcanzándolas? 3.

a. (esposa) Qué puedo hacer para ayudarte a cumplir con tus responsabilidades como dirigente espiritual de nuestra familia?

14. En un papel haz una lista de las responsabilidades que tienen los padres y los hijos en los siguientes pasajes: Colosenses 3:20-21

b. (esposo) ¿De qué manera puedo cumplir mejor con mis responsabilidades como dirigente espiritual?

4.

Proverbios 3:11-12 Efesios 6:4

spirituales de ¿Crees que estamos supliendo las necesidades e nuestra familia?

5. ¿Qué clase de estudio bíblico debiéramos tener? 6.

Hebreos 12:5-11

15. ¿Qué clase de enseñanza y formación debemos de dar a nuestros hijos en el hogar?

D.

METAS ECONÓMICAS

Haced una lista de las responsabilidades que corresponden al esposo y a la esposa en los siguientes pasajes.

1. ¿Crees que manejo bien el dinero?

1 Pedro 3:1-2

2. ¿Cómo puedo hacer mejor uso de nuestro dinero?

Colosenses 3:18-19 1 Timoteo 2:11-15 1 Corintios 11:3 Efesios 5:17-33 ¿Crees que tenemos una vida de oración consistente como 7. matrimonio?

3. ¿Piensas que soy demasiado: ahorrador/a

extravagante

que más o menos lo hago bien? 8. ¿Crees que somos suficientemente activos en la iglesia, participando en las diversas actividades?

4. ¿Crees que acepto bien las responsabilidades económicas?

9. ¿Crees que estamos supliendo las necesidades físicas de nuestra familia?

5. ¿Crees que nos comunicamos bien nuestras metas económicas?

10. ¿Debemos mejorar nuestras costumbres alimenticias?

6. ¿Cuál es tu meta inmediata, desde este punto de vista?

136

La familia y ~finanzas 7. ¿Cuál es la meta principal que tienes para este año? 8. ¿Qué plan tienes con respecto a los estudios de nuestros hijos? 9. ¿Qué meta tienes para cuando nos retiremos? 10. ¿Qué opinas sobre el diezmo? ¿Es necesario darlo? ¿Cuánto? ¿A qué debemos destinarlo? 11. ¿Qué opinas, en general, sobre dar dinero? 12. ¿Qué cambios te gustaría introducir? 13. ¿Te gusta la forma en que vivimos?

El Presupuesto Familiar ¿Por qué es necesario tener un presupuesto? • Para ayudar a las personas que no viven conforme a sus medios a que lo hagan. • Para ayudar a las personas que tienen un sobrante potencial de dinero a que ajusten su nivel de gastos. • Para ayudar a llegar a tener un nivel de vida que sea razonable en el caso de las personas que lo deseen. Inicialmente se tiene la tendencia a crearse un presupuesto que no es realista, uno que no tiene en cuenta los variables que pueden ser necesarios, como puedan ser comprar ropa, el dentista, el médico o las distracciones. El hacerlo de ese modo lo único que conseguirás es frustrar tus esfuerzos, hacer que te falle el presupuesto, y causarte a ti y a tu cónyuge que perdáis la confianza en los presupuestos. La próxima tendencia es la de idear un presupuesto y luego abandonarlo. No hay nada de mágico en un presupuesto, no es más que una expresión escrita de lo que debes ser para ser un buen administrador. Es preciso realizar un esfuerzo para que funcione efectivamente y hasta es preciso que tengas que hacer sacrificios para mantenerte dentro de ese presupuesto. De hecho se necesitan dos presupuestos. El primero determina tu estado económico actual y el segundo decide las metas (haciendo un presupuesto

Aplicaciones prácticas

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que se base en unos ingresos que se puedan utilizar para gastos). Si te propones de verdad ser un buen administrador de lo que Dios pone a tu disposición, entonces es necesario que cuentes con un presupuesto, pero ni la mejor intención del mundo será efectiva sin que hagas algo al respecto. Pasos necesarios para hacerte un presupuesto

ll

Para hacer utilizar un presupuesto es preciso seguir ciertos pasos y cada uno de e os requiere un es f uerzo individual. En la Figura 1 (página 155) te ofrezco una muestra de lo que podría ser tu presupuesto. Utilízala para que te sirva de guía en la preparación del tuyo. Primer Paso: Haz una lista de gastos sobre una base mensual. A. Gastos fijos: • Los diezmos • Los impuestos (si se deducen haz caso omiso de este punto) • Los impuestos de la Seguridad Social (lo mismo se aplica en este caso) Gastos de casa (alquiler/pago) Impuestos de residencia Seguro del hogar otros B. Gastos variables:

v , Comida Pago deudas Gas, electricidad, teléfono Seguro (de vida, médico, coche) Para entretenimientos (recreo) ° Ropa Médico, dentista Ahorros Varios NOTA: A fin de decidir con exactitud las variantes en los gastos, sugerimos que los esposos tengan una lista de gastos diarios durante un mes entero, apuntando cada uno de ellos, incluso los más insignificantes. Segundo Paso: Haz una lista de los ingresos disponibles por mes. NOTA: Si no cuentas con unos ingresos fijos todos los meses, lo que puedes hacer es dividir el promedio por meses. • Sueldo • Alquileres

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La familia y sus finanzas

• Cobros • Intereses • Dividendos Tercer Paso: Compara los ingresos con los gastos. Si el total de los ingresos es superior al de los gastos, lo único que tienes que hacer es implementar un método de control del presupuesto en tu hogar. Pero si sucede todo lo contrario (o si quieres mantener un control más severo de gastos), será preciso adoptar medidas adicionales. En ese caso, necesitarás analizar cada aspecto de tu presupuesto con el fin de reducir gastos. Vamos a mencionar este tema a continuación. Análisis de los problemas del presupuesto A. Errores de contabilidad: A fin de tener un presupuesto que mantenga un orden, es necesario tener distintas partidas. Esto incluye tanto el presupuesto anterior y el tener los documentos del banco. Son muchas las personas que no controlan sus cuentas del banco y casi nunca comprueban si esas cuentas son correctas. Es imposible obtener un balance correcto de los gastos del hogar sin haber hecho una comprobación de los gastos que ha pagado el banco. Ve al encargado de tu banco y pídele ayuda si no te cuadran las cuentas. Algunas sugerencias que posiblemente te sirvan de ayuda son: • Utiliza un libro de cuentas grande. • Apunta los números de todos los cheques antes de haber entregado tu primer cheque. • Apunta en tu libro de cuentas todos los cheques que escribas, detallando el motivo de cada uno. • Solamente una persona debería encargarse del libro de las cuentas y del libro de cheques. • Cuadra las cuentas del libro de cuentas todos los meses. B. Deudas ocultas: Estas incluyen las facturas que posiblemente no recibas todos los meses. Sin embargo, el presupuesto deberá tener en cuenta incluirlas y el no hacerlo solamente implicará que te sentirás frustrado y no serás un buen administrador de lo que Dios te ha dado. Algunas deudas de esta clase podrán incluir: • • • • • •

Clubes de discos, libros, revistas Crédito con una tienda Familia, amigos Médico, dentista Impuestos Pagos anuales de seguros

Aplicaciones prácticas

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C. Objetos comprados en el momento: Como ya hemos mencionado en una sección anterior, el comprar siguiendo un impulso es algo que hacemos la mayoría de nosotros. Desgraciadamente, las tarjetas de crédito han hecho posible el comprar incluso aquellas cosas que realmente no podemos costear y que luego nos cuesta trabajo tener que hacer a plazos (incluso sacrificando otras necesidades). Una lista de estas cosas que se compran siguiendo un impulso puede incluir una casa, un coche, viajes caros, herramientas y objetos para diversión. No se trata del valor de las mismas, sino de lo necesarias que sean. Al ir a hacer una compra piensa en los distintos apartados de tu presupuesto y evita comprar cosas siguiendo sencillamente un impulso. Algunas indicaciones que reducirán el número de compras hechas por impulso pueden ser: Utiliza un plan de demora para las compras. (No comprando nada que no aparezca en tu presupuesto, a menos que antes dejes transcurrir treinta días.) Durante esos treinta días, proponte encontrar por lo menos dos objetos similares al que quieres comprar y compara los precios. Haz solamente la compra de un objeto que no aparezca en tu presupuesto. • No utilices nunca las tarjetas de crédito para comprar siguiendo un impulso. Mantente alejado/a de las tiendas. D. Los regalos: No cabe duda de que el comprar regalos es algo que puede rápidamente pe rjudicar a nuestro presupuesto. Es lamentable que . en esta sociedad en la que vivimos se enfatiza más el regalo que la persona que lo hace y en demasiadas ocasiones los padres que están excesivamente ocupados sustituyen los regalos caros por su compañía y el tiempo que deberían pasar junto a sus hijos. Comienza a buscar alternativas a esos regalos costosos, tanto dentro del ámbito de la familia como de las amistades. Sea cual fuere tu situación económica proponte controlar este aspecto de tu finanzas. He aquí algunas sugerencias: Apunta en un calendario las fechas importantes del año y planea por adelantado. Comienza una actividad de trabajos manuales en tu hogar para hacer los regalos que necesitéis en lugar de comprarlos. Por ejemplo, cuadros para las paredes, pequeños objetos de adorno, bolsitos, cosas hechas con cuerda o cintas, etc. No solamente resultarán buenos regalos, sino que reflejarán el esfuerzo realizado y el amor que se ha puesto en ellos. Saca nombres de familiares para hacer regalos especiales en lugar de que cada miembro de la familia tenga que hacer regalos.

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La familia y sus finanzas

• No compres regalos haciendo uso de tu crédito. • Ayuda a tus hijos a que se ganen el dinero para regalos. • Envía tarjetas para cumpleaños y aniversarios que sean especiales. Trampas en los presupuestos "Las trampas en los presupuestos" son aquellos aspectos que pueden llegar a convertirse en problemas y que acaban por arruinar cualquier presupuesto. Por lo tanto, si no controlamos estos problemas puede producirse un desastre económico. Este aspecto se puede evaluar mediante porcentajes típicos de cualquier presupuesto teniendo como punto de referencia un sueldo de $12.000 a $30.000 al año. Como es natural, estos porcentajes no son incondicionales y podrán variar según los ingresos y situación geográfica. Los porcentajes se basan sobre un cien por ciento absoluto. Recuerda que si tus gastos están por encima del porcentaje que se permite en este aspecto, tendrás que reducir los gastos dedicados a otro de los conceptos. A.

Pago de la casa (normalmente el 32 por ciento de los ingresos netos)

Normalmente, este se convierte en uno de los principales problemas del presupuesto del hogar debido a que muchas familias compran una casa que no pueden costear, motivados por las presiones que causan en ellos personas de su mismo nivel o cualquier otra presión. No es preciso que todo el mundo tenga una casa en propiedad. La decisión de si se debe de comprar una casa o no dependerá más bien de la necesidad y de las posibilidades económicas, que de las presiones de las personas que nos rodean. Aquí tenemos algunas sugerencias que debemos tener en cuenta: • Compra una casa solamente si el total de pagos (hipoteca, impuestos, seguros, etc.) no pasa del 40 por ciento de tus ingresos netos. No financies una segunda hipoteca para hacer el pago inicial. Considera el gasto mensual para mantener la casa. Esto asciende normalmente a un diez por ciento del pago mensual. • Piensa en las deducciones de los impuestos pagados en intereses como si fuese un pago mensual. • Si vas a hacer un cambio de casa con otra persona, piensa si es realmente necesario que lo hagas. El seguro. Procura conseguir al menos tres cálculos de presupuestos. Normalmente esta clase de seguro resulta más efectivo cuando te ofrecen un programa que cubre todos los aspectos (para propietarios de casas, póliza para alquileres, etc.). El uso de la característica deducible reducirá sustancialmente las primas. B.

Comida (el 15 por ciento de los ingresos netos)

Aplicaciones prácticas

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Hay muchísimas familias que compran demasiada comida, mientras que hay otras que compran muy poca. El poder reducir la factura de la comida requiere el calcular tanto la calidad como la cantidad. Una de las mejores maneras de planear la compra de alimentos es comenzando por hacer un menú diario. Una vez que hayas decidido lo que debe comer tu familia, escoge los distintos ingredientes. De hecho, son pocas las amas de casa que dedican el tiempo necesario a escribir los menús de cada día, pero una vez que se crea esta costumbre, las ventajas son evidentes. Entonces el ir a comprar los alimentos deja de ser una especie de expedición de caza o búsqueda semanal, para convertirse en un paso más para la planificación de la economía del hogar. Indicaciones para hacer la compra: • Pon por escrito, en una lista, lo que vas a necesitar. Intenta ahorrar gasolina comprando comida para más días y en mayores cantidades. • Evita comprar cuando tengas hambre (especialmente si eres una persona golosa). Utiliza una calculadora, si te es posible, para sumar el total de tus compras. Reduce o elimina los objetos de papel, como puedan ser los platos, los vasos, las servilletas, etc. (Utiliza servilletas de tela.) Piensa en donde puedes comprar los productos para el hogar (como pueda ser el shampú, la pasta de dientes, etc. (Normalmente son más baratos en unas tiendas que otras.) • Evita los cereales con azucar y conservantes. (Son caros y tienen un escaso valor nutritivo.) Evita los alimentos reparados, como puedan ser las comidas para televisión. (Estás pagando una cara mano de tomar mientras ves obra cuando tú misma puedes prepararlo.) • Decide comprar pedazos de buena carne disponible para asar, paletilla y cosas así y que el carnicero te la corte. (También resulta caro comprar paquetes de filetes envueltos.) • Compra los productos enlatados que ofrezca la casa en lugar de las marcas más conocidas. (Ya que normalmente resultan más baratos y son igualmente nutritivos.) • Evita los productos que están constantemente subiendo de precio. (Sustituye o elimínalos.) Compra aquellos productos que estén de oferta. (Normalmente hay una lista de ellos en el escaparate.) e Evitas comprar en las tiendas que dan sellitos especiales si por ello los precios son más elevados. (No todas suben sus precios, algunas de ellas sencillamente sustituyen estos sellos coleccionables por otros

la

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Aplicaciones prácticas

La familia y sus finanzas

• Compra alimentos como la leche, los huevos, el pan, etc. de aquellas tiendas que los venden a precios más módicos, ya que algo ahorrarás. (Ten siempre a mano leche en polvo para no tener que hacer tantos viajes a la tienda.) • Evita comprar aquellas cosas que no sean alimentos en las tiendas de comestibles, a menos que estén rebajados. (Normalmente son más caros.) • Para los alimentos del bebé utiliza la comida habitual pasándola por la batidora • Deja a los niños en casa a fin de evitar verte innecesariamente presionada por ellos. • Comprueba cada uno de los artículos que marque la cajera de nuevo al llegar a tu casa. • Piensa en la posibilidad de preparar tu misma las conservas de vegetales siempre que te sea posible. Cómpralas en grandes cantidades en lugares donde se venden al por mayor. ( NOTA: Compra el suministro de los alimentos para conservas cuando están en su época.) C. Los automóviles (el 15 por ciento del ingreso neto). Los medios publicitarios se refieren a la gente de los países occidentales normalmente como "consumidores", pero esa no es siempre la me'or descripción. Creo que P.T. Barnum tenía una palabra más apropia para describirnos: "primos" (tontos, mamones) ya que con frecuencia no somos muy sensatos a la hora de tomar decisiones cuando se trata de adquirir una maquina, es pecialmente un coche. Hay muchas familias que compran coches nuevos cuando en realidad no los pueden costear y luego adquieren otro antes de haberle sacado el mayor rendimiento al primero. Aquellas personas que compran un coche nuevo, lo conservan durante menos de cuatro años y luego se compran un nuevo modelo habiendo perdido, de ese modo, una gran cantidad de su dinero. Algunas personas, como los vendedores, que tienen que conducir prácticamente todo el día, necesitan con frecuencia un coche nuevo, pero la mayoría de nosotros no lo necesitamos. Los cambiamos por otros más nuevos sencillamente porque nos apetece hacerlo, no por vernos obligados a ello. Aquí entran en juego muchos factores como puedan ser el egoísmo, la opinión que tenemos de nosotros mismos, la madurez, etc. Pero son pocos los cristianos que busquen la voluntad de Dios cuando se trata de comprarse un coche, de modo que más adelante tienen que sufrir las consecuencias de los esfuerzos económicos que representa. Consejos para comprar un coche. La compra del vehículo

• Piensa en cuál es realmente el motivo que te induce a cambiar de carro ¿ Estás sencillamente cansado de tu viejo coche? (Cuando se te

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mete entre ceja y ceja la idea de comprarte otro nuevo te da la impresión de que el que tienes se está cayendo a pedazos.) ¿Puedes reparar el que ahora tienes sin grandes gastos? ¿Cuántos kilómetros le quedan? ¿Necesitas realmente un coche nuevo o te puede aún servir el que tienes? (A menos que lo compres por motivos de negocios, el nuevo coche puede resultar innecesario.) ¿Qué dice tu presupuesto en lo que se refiere a comprar un coche nuevo? ¿Debes aún algún dinero por el que tienes ahora? (Si es así, y financias otro coche, vas a pagar otra vez la cifra más elevada por intereses.) Si te es posible págalo al contado. De otro modo, obtén el préstamo en otro sitio que no sea donde te venden el coche y regatea como si fueras a comprarlo al contado. (Piensa en comprarlo sin entregar el que tienes ahora y vende el tuyo a un particular.) Si se trata de un coche usado, antes de comprarlo habla con su dueño. ( La mayoría de las personas te contestarán con honradez acerca del estado del coche si les preguntas.) Procura conseguir una garantía sobre el coche usado que cubra el cien por cien durante un corto período. (Evita cualquier contrato sobre un porcentaje porque saldrás perdiendo.) No te dejes presionar por las tácticas de ventas. Fija el precio que estás dispuesto a pagar y decide la clase de coche que te interesa, dispuesto a dejar de lado lo que te suene a "buen negocio" que te exija tomar una decisión rápida. Deberás estar dispuesto a aceptar pequeñas pegas en un coche de segunda mano para conseguir un buen descuento en el precio. (Estate seguro de tener en cuenta las reparaciones que seguramente tendrás que hacerle al coche.) Si piensas comprarte un coche nuevo, evita comprar el último modelo que acaba de salir al mercado. (Compra un modelo a finales de año o los coches que utilizan los vendedores para demostraciones.) Si adquieres un modelo más barato con las mismas opciones que uno más lujoso, conseguirás un ahorro sustancial (aunque lo consideres de menos prestigio.) Evita la costumbre de asegurar el coche pagando con crédito, ya que además de ser caro resulta innecesario si dispones ya de un seguro adecuado. Evita comprar un coche por el sistema "leasing", excepto en aquellos casos en que sabes que necesitarás hacer mucho kilometraje y que además te ofrezcan un considerable ahorro en el pago de impuestos. El mantenimiento de los coches A __—i_ a ocuparte

+„ miemn del

mantenimiento rutinario del coche,

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Aplicaciones prácticas

La familia y sus finanzas como pueda ser el cambio de aceites, la lubricación, la puesta a • t• compras por valor . • • 1 . •f• .. - 25 ••Y.• " 1 •f' mecánico "•. Haz tu mismo las pequeñas reparaciones y hazlo de inmediato. No dejes que se te acumulen pequeños problemas o de lo contrario te sentirás tentado a cambia coche. Compra aceites, lubricantes, • •" conexiones, distribuidor • - • para .• tiliza solamente intenta combinar esas compras con dos o tres amigos para obtener de ese modo una mejor oferta. Utiliza un programa escrito para el mantenimiento de cada uno de los coches de la familia y ocúpate con diligencia de efectuar el mantenimiento de rutina. Si lo haces con regularidad extenderás la vida de los •• Investiga la posibilidad de adquirir neumáticos "rebajad&' de los distribuidores que se ocu n de los coches pertenecientes a su flota y de los de las agencia ubernamentales. Existen neumáticos radiales de primera línea que ofrecen un mayor kilometraje que la mayoría de los neumáticos nuevos de segunda línea. Entérate de la clase de gasolina que debes echarle a tu coche y utiliza • la más •. recomienden. El seguro del coche. Cuando busques un seguro para tu vehículo

••

- •-

• determinado. • estudio teniendo -

• ya he dicho

1.

* Escoje una cobertura obligatoria que sea apropiada. * Piensa en la posibilidad de obtener un seguro que pueda cubrir el costo de las reparaciones que hay que hacer por causa de una colisión o un seguro a todo riesgo. (Nota: Hay un factor que es importante: ¿Podrás costear el arreglo del coche si has tenido un choque, siendo tú el culpable?) * Piensa en la necesidad de los beneficios médicos, etc. D. Deudas (el 5 por ciento del ingreso neto). Sería realmente estupendo que la mayoría de los presupuestos incluyesen un cinco r ciento o menos para el pago de deudas, pero por desgracia, lo norm an el caso de las familias americanas está muy por encima de ese porcentaje. Como ya hemos mencionado con anterioridad, las tarjetas de crédito, los préstamos ofrecidos po r los bancos y el pago de crédito a plazos ha hecho posible que las familias se endeuden hasta más no poder. ¿Qué es lo que puedes hacer una vez que se haya creado esta situación?

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• El primer paso es destruir las tarjetas de crédito. • Fíjate un programa de pagos que incluya a todos tus acreedores. • Ponte en contacto con ellos, háblales con franqueza de tu problema y haz los arreglos necesarios para un plan de pago. • Com ra pagando siempre al contao, sacrificando tus deseos y caprichos asta que hayas logrado ponerte al día en el pago de las deudas que has contraido. E. Seguros (el 5 por ciento, siempre y cuando estés asegurado en tu trabajo). Es realmente lamentable ver la cantidad de familias que se dejan engañar en este sentido. Son pocas las personas que entienden la cantidad de seguro que necesitan y por qué concepto. Prácticamente nadie permitiría que le vendiesen un Mercedes cuando solamente pudiesen costear un Volkswagen; pero, sin embargo, muchas personas pagan enormes cifras por seguros cuando es evidente que no pueden ni necesitan tenerlos. El seguro es algo que debe utilizarse como una provisión que suplemente las necesidades de la familia y no como una protección ni como una ganancia. Un plan de seguros no pretende servir para ahorrar dinero ni para usarlo para el retiro. Si no lo crees, pregúntale a cualquier persona que creyese que así era, ya que a la postre esas personas se han llevado un tremendo chasco y se han quedado muy decepcionadas. No permitas que nadie decida qué y cuánto necesitas como seguro. Escoje el seguro basándote en el plan que tiene Dios para tu vida. En nuestra sociedad, el seguro se puede utilizar como un medio de proveer, por un precio módico, ingresos para la familia en el futuro, dejando, de esa manera, libres unos fondos que se podrán utilizar para cubrir las necesidades de esas personas y para la obra del Señor. Si se pagan cantidades excesivas por un seguro, lo que sucederá es que la familia se encontrará endeudada, privará del dinero que le pertenece al Señor y acabará por depositar su confianza en las cosas que ofrece el mundo. Una de las ventajas relacionadas con los seguros es el tener a un agente digno de confianza, que se ocupe de tu programa. Un buen agente de seguros es normalmente aquel que puede escoger entre distintas compañías, con el fin de ofrecerte el mejor seguro disponible y que te preparará un plan breve y sin complicaciones, analizando cuáles son exactamente tus necesidades. Es preciso que los creyentes aprendan a ser prudentes así como creativos en lo que se refiere a la adquisición de seguros, de la misma manera que sucede con cualquier otra adquisición. Una solicitud de seguro prudente podrá ayudarte a evitar el que contraigas una tremenda deuda, que podrá convertirse en una desgracia para ti, haciendo una adquisición que sea razonable.

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La familia y sus finanzas

Aplicaciones prácticas

a " • 11

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resistan la tentación de hacerlo y que controlen los gastos que son el resultado de las diversiones y entretenimientos mientras se encuentren endeudados. Qué testimonio tan negativo el del creyente que se encuentre económicamente atado y que, a pesar de ello, se permita el lujo de divertirse a costa de otros! Dios sabe muy bien que necesitamos descansar y relajarnos y nos provee, con frecuencia, la oportunidad de hacer ambas cosas de una manera totalmente inesperada siempre y cuando tengamos la debida actitud Cada creyente, tanto si se encuentra endeudado como si no, debiera reducir los gastos por diversiones y entretenimientos. Eso es algo que normalmente se ~01* gu puede realizar, sin tener por ello que sacrificar la calidad del tiempo que pasamos en familia. Sugerencias:

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Por lo tanto, adquiere lo que sea necesario y que al mismo tiempo te resulte más .. T k actualidad " seguro que llegue a hasta los sesenta y cinco o setenta años y es mu •

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i •- • - • . .• . •. •- . •. . .• programa más conveniente y con unos intereses elevados. •

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Seguros médicos principales. A excepción de los casos en que una persona padezca una enfermedad crónica que ya tenga una cobertura médica, el invertir en un seguro de hospitalización es una mala inversión en los Estados Unidos. (La excepción sería las pólizas de seguros para "grupos", que normalmente ofrecen una cobertura médica que no resulta tan cara, siendo además más amplia en lo que cubre, desde el punto de vista médico.) Sin embargo, los principales seguros médicos que pagan la mayor parte de los gastos en caso de enfermedades graves resultan relativamente baratos. F. Dinero para entretenimientos y diversiones (el 7 por ciento de ingreso neto).

La sociedad occidental está orientada hacia las diversiones y los entretenimientos. Eso no es necesariamente malo si se mantiene en la debida perspectiva, pero las personas que estén endeudadas no pueden utilizar el dinero de sus acreedores para divertirse. La tendencia normal es escapar de los problemas, aunque sea durante un corto tiem y después esos problemas se hagan más acuciantes. Es preciso que os creyentes

Planea tomar tus vacaciones, si es posible, "fuera de temporada". Piensa en la posibilidad de ir a un "camping" para evitar los gastos de hoteles y de comida. Escoge lugares de vacaciones en los alrededores de donde vives. Piensa en la posibilidad de intercambiar lugares de residencia con una familia creyente en otro sitio para que las vacaciones salgan más baratas. Idea juegos para que participe en ellos toda la familia en lugar de tener que gastar en otra clase de diversiones que es preciso pagar (como algunos de los juegos que se compran en Navidad y que luego no se utilizan). Piensa si es posible que dos o más familias viajen juntas para reducir los gastos y además disfrutar del compañerismo cristiano. Si vas en avión, procura conseguir los vuelos más baratos (viajando de noche, por ejemplo, o por la mañana muy temprano que es cuando cuesta entre un diez y un veinte por ciento menos). C. Ropa (el 5 por ciento del ingreso neto).

Muchas familias sacrifican este concepto del presupuesto por haberse excedido en otros. Pero si se planea con prudencia, tu familia podrá ir bien vestida sin tener, por ello, que gastar una fortuna en ropa. Esto te obligará a hacer un esfuerzo en los siguientes sentidos: Tendrás que ahorrar para comprar sin utilizar las tarjetas de crédito. Educando a los miembros de la familia para que sepan cuidar de su ropa. Aplicando una disciplina para que los niños sepan poner en práctica estas costumbres. Aprendiendo a hacer la ropa y coserla si algo necesita arreglo. Aprended a ser personas que utilizan los recursos en lugar de ser

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La familia y sus fpanzas

solamente consumidores. ¿Cuántas familias tienen armarios llenos de ropa que ya no se ponen porque está "asada de moda"? Muchas familias a las que les sobran os ingresos, gastan enormes cantidades en ropa. Piensa en serio si realmente tiene tanta importancia para ti que lleves los estilos más recientes. ¿Reflejan tus compras el estar seguro/a de que lo que compráis se va a utilizar o lo compráis sencillamente siguiendo un impulso para satisfacer vuestro egoísmo? ¿Compras la ropa para cubrir una necesidad o mas bien por capricho? Sugerencias para el presupuesto:

Haz todas las prendas que puedas para tus hijos. (De esa manera te podrás ahorrar entre un cincuenta y un sesenta por ciento del dinero.) Pon por escrito las prendas que necesitas y siempre que te sea posible cómpralas fuera de temporada. Escoge aquellas prendas que puedas combinar con otras en lugar de las que solamente puedes llevar con una sola. Frecuenta los almacenes que normalmente tienen una gran salida de sus materiales y que venden prendas de buenos modistos, de calidad, pero sin etiqueta. Escoge, al comprar prendas nuevas, materiales fácilmente lavables. Si vas a una lavandería utiliza las máquinas en las que hay que meter una moneda en lugar de utilizar las comerciales. En el caso de que se rompa una prenda, cósela tan pronto como te des cuenta y aprende a sacar el máximo partido a la ropa (especialmente en el caso de los niños).

Aplicaciones prácticas

de si te están rindiendo un buen servicio por el dinero que has pagado. La mayoría de los profesionales éticos no se ofenderán porque les preguntes, pero si lo hacen tal vez ha llegado el momento de que te busque otro médico o por tener cierta edad. Cuando el médico te dé una receta compara los precios de las distintas farmacias (aplicable en los Estados Unidos), pues te sorprenderá la gran variedad de precios de una farmacia a otra y pregunta también por los descuentos, ya que hay algunas que ofrecen entre un cinco y un diez por ciento por pagar al contado o por tener cierta edad. 1.

Los ahorros (el 5 por ciento del ingreso neto).

Es preciso contar con ahorrar algo al hacer el presupuesto. De lo contrario, el hacer uso del crédito se convertirá en una necesidad que durará toda la vida y la deuda será una forma de vida para ti. Tus ahorros te permitirán pagar lo que compras al contado y buscar los mejores precios, sea cual sea la tienda donde efectúes tus compras. Sugerencias sobre el ahorro:

Si te es posible, utiliza el método de sacar la paga, eso quita el dinero de en medio antes de que lo recibas. Utiliza un banco que tenga un cajero automático para sacar dinero de tus cuentas corrientes. Escribe un cheque por la cantidad que piensas ahorrar, como si estuvieses efectuando un pago a un acreedor. Cuando hayas acabado de pagar una deuda, deposita ese dinero en tus ahorros.

H. Gastos médicos y de dentista (el 5 por ciento del ingreso neto). Cuenta por adelantado con esos gastos, incluyéndolos en tú presupuesto y mete con frecuencia algún dinero para ellos, pues si no lo haces, llegado el momento echarán tus planes por tierra y te obligarán a endeudarte. No sacrifiques la salud de tú familia por no haber planeado de una manera adecuada, pero al mismo tiempo no abuses de las visitas a los médicos. Es mucho más barato prevenir que corregir los problemas. Podrás evitar tener que pagar muchas facturas al dentista si enseñas a tus hijos a comer los alimentos apropiados y a que se laven los dientes como es debido. Tú dentista te podrá facilitar toda la información que necesites con respecto al tema. Cuida tú cuerpo como debes mediante un régimen apropiado, descansando, haciendo ejercicio y así disfrutarás de una buena salud. Si abusas de tú cuerpo a la postre acabarás pagando las consecuencias por medio de enfermedades y problemas. Eso no significa, por supuesto, que todas las enfermedades y los problemas sean el resultado del descuido, pero muchas de ellas sí que lo son. No dudes en preguntar a los médicos y a los dentistas, pidiéndoles por adelantado información sobre sus precios. Aprende además a darte cuenta

149

J.

Varios (el 6 por ciento del ingreso neto)

Eso puede incluir una serie de gastos. Algunos de ellos ocurrirán mensualmente, mientras que otros serán gastos inesperados (como pueda ser que haya falta adquirir algún electrodoméstico). Uno de los factores más importantes en los gastos que se producen en el hogar eres tú mismo. Si eres capaz de ocuparte del mantenimiento rutinario y de las pequeñas reparaciones, te podrás evitar unos gastos considerables. Hay personas que alegan que su tiempo vale demasiado como para dedicarse a esas cosas, pero eso es una tontería. Si cada hora del día la dedicamos por entero a ganar dinero, entonces como ya hemos explicado, estás siendo un esclavo. Una parte de los cuidados y del mantenimiento en el hogar está relacionada con la vida familiar, especialmente la formación de los hijos. Cuando ven que sus padres están dispuestos a ocuparse de los trabajos manuales para ayudar en casa, aprenderán buenas costumbres, pero si te niegas a hacerlo, por qué van a hacerlo ellos? ¿Dónde van a aprender las habilidades que luego les permita ser independientes? Algunos hombres evitan trabajar en los proyectos del hogar porque

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Aplicaciones prácticas

La familia y ~finanzas

dicen que carecen de las habilidades necesarias para hacerlo. Pero lo cierto es que esas habilidades se aprenden, no son dones. Hay muchos libros excelentes que abarcan todos los temas relacionados con las reparaciones en el hogar. En el futuro muchas de estas habilidades serán una necesidad en lugar de ser algo que solamente haremos si nos apetece. Observ aciones acerca del presupuesto: 1. Reducir el coste de las electrodomésticos en la casa. A. Mantener los aparatos que ya tienes.

• Repasa los manuales de servicio de los aparatos oorrientes, para enterarte de su cuidado y realizar el mantenimiento, según las instrucciones. • Compra un manual del fabricante. (La mayoría de los fabricantes los venden si los pides por escrito.) • Utiliza el aparato conforme a las normas establecidas para su uso. (Ejemplo: no cargues en excesos lavadoras ni secadoras.) • Si un aparato que ya no está bajo garantía se avería, utiliza el librito que te dice cómo arreglarlo para averiguar cuál es el problema y si puedes arreglarlo. Antes de llamar a un técnico de fuera, pide consejo a algún amigo creyente (con frecuencia alguien que tú conoces sabe arreglar prácticamente todo). • Antes de reemplazar el antiguo aparato por uno más nuevo, piensa en la posibilidad de hacer una reparación general del que ya tienes. B. La compra de electrodomésticos. • Utiliza una guía del consumidor para decidir el mejor fabricante. • Selecciona un aparato basándote en su uso funcional y no en los botones que pueda tener para hacerlo funcionar. (Los modelos de lujo cuestan bastante más y requieren un mantenimiento más complejo, sin que por ello funcionen mejor.) • Compara los precios en las distintas tiendas de los productos principales. (Pon por escrito los precios que vayas encontrando en los distintos lugares.) • Busca aquellos comercios que venden grandes volúmenes y que tienen aparatos de manca con sus propias etiquetas. • Paga al contado lo que pienses comprar sin entregar un aparato antiguo a cambio (el vendedor te hará un descuento sin necesidad de entregar el antiguo). • Evita los contratos de servicios que te ofrezcan las tiendas. Con frecuencia son caros y son un quebradero de cabeza. (Si la garantía no te parece suficiente o no te satisface, busca otra

r

151

• Insiste en que te lo lleven a casa gratis y te lo instalen. (Es posible que al principio el vendedor se resista, pero acabará por ceder.) • Busca un aparato usado de marca similar en los periódicos de objetos de segunda mano. 2.

Reducir los precios de los muebles.

• Consulta un índice del consumidor para ver qué compra es la más ventajosa. • Piensa en la posibilidad de que te arreglen tus muebles, que son de buena calidad. (Hay muchos libros que te sirven de guía y enseñan cómo poner el acabado y volver a tapizar los muebles.) • Consulta una guía local de compradores para encontrar muebles a buen precio. • Busca aquellos muebles que ya han dejado de fabricarse. 3. Reducir de tu presupuesto algunos `gastos fijos". A. Ahorros en la factura del teléfono.

Piensa en si realmente necesitas más de un teléfono. (La cantidad de llamadas que puedas recibir por las noches, la conveniencia teniendo en cuenta lo que tienes que pagar, etc.) Usa el teléfono normal en lugar de un modelo especial. Cuando hagas llamadas a larga distancia utiliza un reloj de arena o un aparato de tres minutos para cocer los huevos. (Deberás estar dispuesto a reducir las llamadas a tus familiares a un total de tres minutos como máximo.) Siempre que te sea posible, llama a larga distancia en las horas en que las llamadas son más económicas. Limita de tácito acuerdo el número de llamadas. Apunta cada una de las llamadas que haces a larga distancia (poniendo la fecha, la hora y la duración) junto al teléfono. Escribe cartas en lugar de llamar con tanta frecuencia. (Las cartas muestran en ocasiones una mayor consideración.) B. Cómo reducir el gasto de electricidad. • Si tienes aire acondicionado o calefacción, comprueba el aislamiento del ático, averigua si el aire se escapa por las rendijas de las ventanas o por los filtros del sistema (que tendrás que limpiar con frecuencia), asegúrate que no pasa el aire por debajo de las puertas, que no haya demasiados cristales, etc. • El aislante del ático debe ser de al menos 15 cm. de profundidad para ahorrar un diez por ciento en calefacción y aire acondicionado. • Mantén el termostato en un nivel que resulte cómoda la temperatura (entre 68 y 70 grados farenheit [20-21 centígrados] en invierno v 74-78 [24-26 centígrados] en verano).

152

Aplicacio v

al

4.

Disminuir el costo de los apartados generales del presupuesto. Investiga los servicios que ofrecen los bancos por las cuentas corrientes para encontrar aquellos que no cobran nada. Incluso en el caso de que realices tus operaciones por correo, el ligero inconveniente te ahorrará dinero cada año. Todos los animalitos domésticos cuestan dinero. Limita el número de ellos, teniendo solamente aquellos que la familia puede realmente desear y cuidar. Intenta reducir los gastos de suscripciones (a periódicos, revistas, libros, discos, etc.). Antes de pagar la suscripción, compra unos cuantos ejemplares para ver hasta qué punto te pueden ser útiles. Una vez que te decidas a suscribirte a un periódico, los contratos por más tiempo (dos o tres años) te ofrecen unos ahorros considerables.

5. Decidir si debes pedir un préstamo para hacer una compra.

-,,.Lo TA t; ~ I3 A 153

1. Z rar cosas que pieíle Evita pedir dinero prestado con el fi~.de s rápidamente una parte de su valor o que se consumen ve Placer, algunos electrodomésticos, muebles, vacaciones, comida, etc.). Si pagas esas cosas al contado siempre te encontrarás en mejor situación para regatear. El pedir un préstamo para comprar objetos para el hogar, como puedan ser electrodomésticos, puede atarte económicamente. Es posible que te cueste trabajo evitar caer en la trampa de los préstamos debido a los pagos que tienes que efectuar por los préstamos ya obtenidos. Los intereses por préstamos a través de las tarjetas de crédito pueden pasar hasta del cincuenta por ciento al año (debido al interés añadido por deudas impagadas). El pagar a plazos puede asar del 12 por ciento al año y conllevar el pago de multas sustanciales si no se paga a tiempo. Los préstamos personales con garantía son normalmente los menos costosos y fáciles de financiar. Los seguros de vida a crédito sobre préstamos pueden costar entre dos y tres veces más que el seguro temporal.

La familia y sus finanzas Demora conectar el aire acondicionado o poner la calefacción hasta que las temperaturas sean realmente incómodas de soportar. Reduce al máximo el uso del sistema cuando la casa vaya a estar vacía durante un mínimo de ocho horas. Utiliza mantas en lugar de la calefacción o estufas para dormir mejor por las noches. Cierra todos los respiraderos en las habitaciones que no se utilicen y la mayoría de los del piso de arriba en las viviendas de dos pisos. Apaga las luces que no se utilicen, reduce el número de voltios de las bombillas en los lugares donde las luces se utilicen solamente para efecto. Coordina los baños a fin de ahorrar agua caliente. (Aproximadamente el diez~°r ciento del agua caliente que se encuentra en el termo se utiliza para hacer llegar hasta el cuarto de baño. Por lo tanto, calienta las tuberías el menor número de veces posible.) Pon aislante en todas las tuberías de agua caliente. No uses el horno más ue para hacer grandes cantidades de comida y haz los asados mismo tiempo. C. Reducir el costo del cuidado de la casa. • Reduce de modo sustancial el uso de fertilizantes y de semillas hibridas. Practica el cultivo orgánico de la hierba y de los arbustos (por ejemplo, utiliza fertilizantes naturales procedentes de las granjas o de las lecherías, etc.). • En sectores de mucho tráfico utiliza una pintura de esmalte con una base de agua. (Se puede lavar, es duradera y es fácil de aplicar. Utiliza siempre un producto de alta calidad.)

DE

Resumen Al llegar a este punto, tienes los elementos necesarios para hacer tu propio presupuesto. Solamente es necesario un ingrediente adicional: los deseos. Ningún presupuesto se lleva a cabo por sí solo, requiere esfuerzo y una buena comunicación entre los miembros de la familia. El vivir con un presupuesto no es solamente prudente, puede hasta llegar a ser divertido. Al alcanzar el éxito en varios aspectos, compártelo con los demás. Desafia también a tus hijos. Proponles una meta para ellos y ofréceles un premio si lo consiguen. La siguiente es una lista resumida de los principios financieros que se pueden aplicar al plan de la economía del hogar. Estúdialos y aplícalos. Después comparte con otras personas a tu alrededor las bendiciones de Dios. 1.

Principios relacionados con la economía del hogar. A. Utiliza un plan por escrito. B. Provee primeramente para la obra del Señor. C. Haz todo lo que hagas lo mejor que sepas hacerlo. D. Limita el uso del crédito. E. Piensa antes de efectuar una compra. • ¿Es realmente necesaria? • ¿Es lo mejor que puedo encontrar por ese precio? • ¿O es algo que compro más bien por capricho? • JxijZe un mantenimiento costoso?

154

La familia y sus finanzas F. Practica la costumbre de ahorrar dinero con frecuencia. G. Fíjate tus propias metas, juntamente con tu familia. H. Sal de deudas. I. Limita tu participación en los negocios. J. Evita ser indulgente y caer en la tentación de adquirir lujos superfluos. K. Busca el buen consejo de otros creyentes. L. Cumple con tu plan.

2.

Propósitos del presupuesto.

A. Definir los ingresos y compararlos con los gastos. B. Detectar los aspectos problemáticos. C. Proveer un plan escrito. D. Ayudar a seguirlo. E. Planear el dinero que entra y el que sale. 3.

Aplicaciones prácticas Figura 1 -Presupuesto Familiar Ingresos por mes Sueldo Alquiler Notas Interés Dividendos Varios Devolución impuestos

Lo que conseguirás con un presupuesto.

A. Te ayudará a visualizar tus metas. B. Servirá de punto de referencia escrito, tanto para el marido como para la mujer. C. Ayudará en la comunicación entre los miembros de la familia. D. Será un recordatorio escrito. E. Reflejará vuestras costumbres. que no conseguirá un presupuesto. A. Resolver tus problemas inmediatos. B. Obligarte a utilizarlo. C. Ocupar el lugar de la acción.

4.

Lo

5.

Cómo. A. Calcular los gastos reales. • Mantén un diario de gastos durante treinta días (en un cuaderno). • Utiliza un libro de cuentas grande, como un diario. • Apunta las deudas y la fecha en que hay que pagarlas. B. Hacer un presupuesto familiar. • Define los gastos (presupuesto actual). • Decide los gastos que vas a hacer (presupuesto futuro). • Calcula los ingresos. • Calcula los gastos fijos. • Calcula los gastos varios. C. Usar el presupuesto. • Ponlo en un lugar visible. • Fija una meta que sea fácil de alcanzar. • Mantenlo al día. • Fija una hora al día para revisarlo.

Ingreso neto

Pagos mensuales 1. Diezmos Impuestos 3. Gastos de casa (a) pagos (b) mantenimiento (c) impuestos 4. Comida (a) comestibles (b) artículos de limpieza personal 5. Coche (a) pagos (b) gasolina (c) mantenimiento 6. Varios hogar (a) electricidad (b) gas (c) agua (d) recogida basuras (e) teléfono (f) varios 7. Seguros (a) coche (b) médico (c) vida (d) otros S. Préstamos (a) principal (b) tarjetas de crédito (c) plazos (d) otros 9. Distracciones/ diversiones 2.

La familia y ~finanzas

Figura 1-Presupuesto Familiar, oont. 11. Ahorros 12. Médicos (a) dentista (b) médico (c) otros 13. Gastos varios Ingresos comparados con gastos Ingreso mensual neto Menos gastos Promedio

r igur a 1. Ingresos anuales actuales 2. Seguro de vida (primas por año) 3. Ahorros por año 4. Inversiones por año 5. Gastos estimados del esposo por año 6. Otras deducciones por año 7. Total 8. Ingresos necesarios al año (restar el paso 7 del 1) 9. Retiro de la compañía, Seguridad Social, etc, tras la muerte del esposo. 10. Inversión ingresos varios 11. Ingresos de los hijos y esposa 12. Total (pasos 8 al 1) 13. Provisión de ingresos necesarios al año (restar paso 12 del 7) NOTA 1: Multiplica la linea 13 por 18, equivalente aproximadamente a los seguros que se necesitan para continuar el actual nivel de vida, sin reducir gastos. NOTA 2: Añadir a esa cantidad el dinero para la universidad o los negocios. NOTA 3: La cantidad total que se necesite variará según la provisión que se anticipe durante unos pocos años nada más. Ejemplo: Se necesitarán $100.000 en seguros para generar unos ingresos anuales de $10.000. El promedio de ingresos que se calcula es de un 6 por ciento. Al final de un nodo de $43.000. diez años, quedará aproximadamente un seguro

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