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LIBERTAD CONDICIONAL Y SEMI LIBERTAD EN EL PERU Y EL MUNDO MARTES 25 DE ENERO DEL 201101:41
Inapelable: sala penal ratificó semilibertad para Lori Berenson El tribunal de justicia desestimó el pedido de la fiscalía para que vuelva a prisión por delito de terrorismo
EL COMERCIO La Sala Penal Nacional resolvió en fallo de última instancia declarar fundada la sentencia de la jueza Jéssica León Yarango que ordenó la libertad condicional de la norteamericana Lori Berenson, condenada a 20 años de cárcel por colaborar con el terrorismo.
Como se ha informado, ese controversial fallo dado el 5 de noviembre del 2010 fue apelado por la fiscalía y la procuraduría contra el terrorismo, por lo que el caso fue elevado a la Corte Suprema para su resolución definitiva. El tribunal supremo indica en su resolución que la sentenciada ha cumplido con los requisitos establecidos para el otorgamiento del beneficio penitenciario de la libertad condicional. Señala que sí se puede añadir al tiempo de su prisión efectiva lo contabilizado por la redención de la pena por el trabajo. Así, Berenson consigue acumular 15 años, 8 meses y 21 días, cantidad que sobrepasa las tres cuartas partes de la condena que exige la ley. La resolución también dice que Berenson cuenta con los elementos que permitirán su reinserción a la vida social. EL DATO Seguirá libre El fallo de la Sala Penal Nacional es inapelable. Ahora la estadounidense continuará en
libertad, pero cumpliendo ciertas normas de conducta.
http://peru21.pe/2012/06/09/actualidad/regulan-beneficios-reos-2027963
Regulan beneficios para reos Sábado 09 de junio del 2012 | 08:33
Quienes purguen semilibertad y libertad condicional estarán sujetos a control o vigilancia electrónica personal.
Tendrán vigilancia electrónica. (Rafael Cornejo)
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Los beneficios de la semilibertad y de la libertad condicional obligarán al sentenciado a pernoctar en su domicilio, sujeto a control o vigilancia electrónica personal y a la fiscalización de la autoridad penitenciaria, según lo establece una norma publicada ayer en el diarioEl Peruano. El Congreso de la República oficializó la promulgación de la Ley N° 29881, que modifica varios artículos del Código Penal. Se refieren exclusivamente a los beneficios penitenciarios antes citados.
El parlamentario nacionalista César Yrupailla indicó que el juzgado que siga el proceso penal en el que se imponga la condena al procesado será, también, el encargado de fijar las reglas de conducta. Precisa, finalmente, que los sentenciados deberán cumplir una serie de requisitos. Tags:
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¿CUÁNTO CUESTA LA SEMI-LIBERTAD EN EL PERÚ? - Equipo ProJusticia Informe ProJusticia
Continuando con el debate sobre el papel de la justicia en la seguridad ciudadana, en esta oportunidad quisiéramos tocar una de las cuestiones sobre lo que poco se conoce pero que, sin embargo, es clave para entender cómo se produce la salida de prontuariados delincuentes de las cárceles, como es el proceso de otorgamiento de la semi-libertad. El análisis de este proceso muestra, en primer lugar, que el tema es mucho más complejo y que no es responsabilidad particular de los jueces, ya que existe aquí un actor que juega un papel central, como es el Instituto Nacional Penitenciario (INPE). Como veremos, dentro de esta institución coexisten dos caminos, uno formal y uno real, a partir de los cuales los internos van construyendo los requisitos que exige el Código de Ejecución Penal, a partir de elementos que, como en cualquier mercado corrupto, pueden ser conseguidos a cambio de dinero.
EL CAMINO FORMAL Los beneficios penitenciarios que pueden ser otorgados a un interno se encuentran regulados actualmente por el Código de Ejecución Penal-Decreto Legislativo No. 654º de julio de 1991, los cuales no se reducen a la semi-libertad, sino que incluyen otro tipo de beneficios como la incorporación a talleres (redención por trabajo y/o educación), la asistencia psicológica, el traslado a otros centros penitenciarios e inclusive las visitas íntimas. De acuerdo a dicha norma, los beneficios penitenciarios de semilibertad y libertad condicional –que son los beneficios cuestionados actualmente- son otorgados por el órgano jurisdiccional, mientras que los beneficios que se ejercen dentro del centro son
concedidos por el Instituto Nacional Penitenciario. En ambos casos, sin embargo, el otorgamiento de estos beneficios se hace previa evaluación del Órgano Técnico de Tratamiento, en base a los informes de las Áreas Legal, Social y Psicológica, y del Consejo Técnico Penitenciario del Establecimiento penal donde el interno se encuentra cumpliendo condena. Un requisito previo para poder solicitar dichos informes es que el interno cumpla como, regla general, un tercio de la pena impuesta, si bien ello varía de acuerdo al tipo de delito. Lo importante en todo caso es que, una vez que el interno posee el tiempo necesario para solicitar el beneficio, debe presentar ante el Consejo Técnico Penitenciario del Establecimiento Penal los siguientes documentos: • Copia certificada de la sentencia expedida por el Órgano Jurisdiccional. La sentencia tiene que estar registrada además en el Registro Nacional de Condenas y en el Instituto Nacional Penitenciario. • Solicitud dirigida el Presidente del Consejo Técnico Penitenciario del Establecimiento Penal. • Depósito judicial por concepto de pago de la reparación civil impuesta por la sentencia (si bien solo se exige un pago mínimo de 10% de la totalidad de la suma impuesta, para lo demás se debe acompañar una declaración de compromiso de pago). • Declaración de compromiso de pago de los días-multa, cuando ello es fijado por la sentencia. • Certificado domiciliario vigente, expedido por una Municipalidad Distrital o Notaría, a fin de poder ubicar al interno en caso de ser requerido. de Reclusión” ante el Área del Registro del Establecimiento Penal donde se encuentra recluido. • Pago de las tasas correspondientes según el TUPA del Instituto Nacional Penitenciario. Una vez que el interno cuenta con estos documentos y luego de pagar las tasas correspondientes, estos son presentados ante el Consejo Técnico Penitenciario del Establecimiento Penal, el cual apertura un expediente administrativo y solicita los informes del Área Legal, Psicológica, y Social (de trabajo y educativo) del interno; asimismo, se ordena la elaboración del certificado de conducta a fin de verificar si el interno posee alguna sanción disciplinaria y se solicita la “hoja penalógica”, donde se incluyen los antecedentes judiciales y penales, y si éste cuenta con otro mandato de detención. Con todos estos documentos a la vista, el Consejo Técnico Penitenciario evalúa la solicitud y expiden un acta evaluativa donde dan su opinión al respecto, remitiendo todo el expediente al órgano jurisdiccional. Formalmente, el plazo para organizar el expediente administrativo de semilibertad es de 10 días, por lo que la norma parece asumir que todo el proceso no requiere de mayores complicaciones. EL CAMINO REAL Sin embargo, el camino real para que un interno pueda conseguir la semi-libertad o su libertad condicional es mucho más difícil de lo que
se aparenta, si bien cualquier piedra en este camino puede ser fácilmente despejada con dinero. En primer lugar, el proceso de armado de expediente para que la solicitud llegue al órgano jurisdiccional no dura –como asume la leyun promedio de 10 días, sino que los internos pueden esperar de 90 a 120 días para que todos los certificados y documentos exigidos puedan ser recopilados y evaluados, evaluación que puede durar mucho más si consideramos la gran cantidad de internos que puede tener un centro penitenciario (solo en Lurigancho el número promedio de internos es de 10 mil personas). No obstante, si un interno quiere facilitar las cosas basta con que cubra los costos ya prefijados para cada uno de estos requisitos, para lo cual basta que acuda ante algún “tramitador” del propio INPE que se encarga de “armar tus papeles”. Por ejemplo, de acuerdo a la información obtenida por PROJUSTICIA, los certificados psicológicos, sociales o de trabajo tienen un costo promedio de 300 NUEVOS SOLES, si bien como en todo mercado, este costo puede crecer o reducirse de acuerdo a las posibilidades de cada cliente. Incluso, el interno que lo desea puede conseguir también certificados domiciliarios, certificados de trabajo en el exterior –lo que facilita la obtención de la semi libertad- y recibos de pago del Banco de la Nación. Sin embargo, lo más costoso puede ser “limpiarse” de otros procesos y mandatos de detención que puedan existir contra el interno, ya que ello impediría lograr el beneficio ansiado. Se han sabido de casos en los que internos han pagado hasta 5 MIL DOLARES para limpiarse de requisitorias, monto que puede ser mayor cuando el pedido proviene del extranjero o de la INTERPOL.
¿ACABAR CON LOS BENEFICIOS O CON EL MERCADO DE LA CORRUPCIÓN? De esta manera, los beneficios penitenciarios se encuentran, en realidad, integrados al mercado de corrupción que existe al interior de los centros penitenciarios, donde al igual que estos documentos cualquier interno con dinero puede conseguir celulares, buena alimentación y hasta artefactos electrodomésticos. Desde esta perspectiva, intentar cerrar el camino de los beneficios penitenciarios no va a tener mucho éxito a menos que no se ataque también la raíz del problema, como es ir acabando con la corrupción sistemática que existe al interior de los centros penitenciarios, donde todo se puede comprar y vender a cambio de dinero. Este es un tema que debe ser atacado de una vez por todas por el INPE y el Ministerio de Justicia si es que se quiere ir logrando un cambio real al respecto. En realidad, un funcionario penitenciario honesto (Quien tiene una remuneración menor que un policía) vale más que muchos policías en las calles, ya que solo así los delincuentes se mantendrán donde les corresponde.
15 de Agosto del 2011