Análisis de Anuncio [PDF]

Zitiervorschau

Anuncio Katherine Betancur Zaldívar En el presente ensayo usaré las teorías de Foucault, del post-colonialismo del deconstruccionismo de Derrida y las teorías feministas para analizar el cuento “Anuncio” de Juan José Arreola. Según Foucault, existe un discurso que está en el poder, y que poseen de ciertos mecanismos para evitar que los discursos en su contra se propaguen. Entre estos mecanismos podemos encontrar tres tipos, los de exclusión, cómo la prohibición, falsificación y la invalidación, los de enrarecimiento, como el comentario y la autoría y los que regulan el uso del discurso. El cuento está escrito a modo de anuncio, promoviendo una marca de muñecas, las Plastisex® quienes parecen ser superiores a las mujeres en todo sentido, desde lo físico a lo emocional e intelectual. Su creación ha sido para el uso de los hombres, pero promueven que también sería beneficioso para las mujeres. Podemos observar que este discurso principal del texto tiene un planteamiento básico: las mujeres son objetos para servir al hombre que pueden ser reemplazados fácilmente al no cumplir sus expectativas. Como primer contra discurso, tenemos el de la mujer como un grupo. El anuncio nos dice que el producto puede ayudar a la mujer, sin embargo en ningún momento del anuncio se ve la opinión de esta figura femenina. El discurso principal está aplicando un mecanismo de prohibición, el cual consiste en evitar que el contra discurso se genere, está prohibido para la mujer dar su opinión. Al discurso principal no le interesa su opinión, solo que crean que su opinión ha sido tomada en cuenta y que su creación las ayuda en cierta manera, en este mismo argumento, están empleando un comentario hacia este discurso que nos han prohibido conocer.

Como segundo contra discurso nos han presentado la posibilidad de que este producto, la Plastisex, puede fallar tal como las mujeres reales al quedar embarazadas o tener la menstruación. Se maneja directamente con un discurso de prohibición, porque eso no pasa. Los creadores de este anuncio señalan que las muñecas no son capaces de hacerlo y punto. Y como si no fuera suficiente con su palabra, quien ha hecho el anuncio utiliza la palabra del Departamento de Investigación, que les confirma que están trabajando en ello, pero que aún no es posible, usan un discurso de autoría para legitimarse. El siguiente caso trata de un hombre que murió en un accidente con una Plastisex, a lo que los creadores del anuncio dan una declaración al respecto: «Sin negar la posibilidad de semejante accidente, afirmamos que sólo puede ocurrir en virtud de un imperdonable descuido», nos indica un mecanismo de invalidación a este cliente en particular, no fue culpa de la Plastisex, el usuario fue el descuidado, con esta palabra han invalidado el contra discurso presente. Fue un error humano más que del producto en sí. Presentan a los sociólogos que no aprueban su discurso como timoratos, mojigatos, y con esa palabra logran que invalidar su discurso. Pero por el otro lado alaban a los sociólogos que están de acuerdo con ellos, pues ellos les presentan pruebas de que su producto ha ayudado a la sociedad, pues ha acabado con la prostitución. Si los sociólogos lo dicen, debe ser cierto. Volvemos a caer en un discurso de autoría. También la Iglesia les presenta su contra discurso, de manera que cierta parte de esta, la que es considerada conservadora, solo lo clasifica como un pecado menor, pues es un objeto, así que está bien para los usuarios. Además los que han dicho esto son conservadores, por eso piensan así, siguen pensando en el pasado. Para agregar fuerza a su discurso sobre el contra discurso, hablan de un caso (una secta de los mormones), que si están a favor del uso de la Plastisex y hasta se han realizado

matrimonios entre hombres y muñecas. Los llama un grupo de progresistas caballeros. Un discurso de falsificación, el discurso del progreso por sobre todo lo demás. Por parte del post-colonialismo, existen algunas alusiones en el texto a cómo estas muñecas pueden traer a la vida mujeres exóticas, tal como una momia de la octava dinastía, siguiendo esta idea de cómo lo relacionado a las mujeres de estos lugares de Oriente son sensuales por su exoticidad. De ahí pasamos a la teoría del deconstruccionismo, donde buscaremos los supuestos básicos en el texto para analizarlos y ver si existen contradicciones a lo largo de este. Algunos de los supuestos básicos que saltan a la vista van desde el hecho de que la presencia de la mujer es perjudicial para el hombre hasta que las mujeres “reales” no son atractivas o higiénicas. Sin embargo, vemos que los creadores están haciendo su mayor esfuerzo por imitar a la mujer en lo más posible pues su Plastisex: «Está hecha de materiales sintéticos que reproducen a voluntad las características más superficiales o recónditas de la belleza femenina» Las mujeres son imperfectas y problemáticas, sin embargo ¿Desean hacer sus muñecas lo más parecidas a las mujeres reales? Pero no acaba ahí, pues incluso se ofrece la posibilidad de hacer una copia fiel a cualquier fotografía. En este anuncio, se hace referencia de cómo estas muñecas pueden ser manejadas por control remoto, como un televisor. Esta comparación nos remite a que la mujer es un objeto, cuyo sujeto es el hombre. Ella puede y debe ser controlada por él y como las mujeres son incontrolables, la muñeca tiene que venir a sustituirla. El texto le asigna un papel a la mujer, un papel que la muñeca pasará a ocupar «Arrebatándole su papel de instrumento placentero, de sexófora, para emplear un término clásico». ¿Y quién le asignó ese papel? La muñeca es el sustituto de la mujer ideal, por lo cual se asume que todo lo que la muñeca hace es deber de la mujer. La mujer para ser considerada una persona, para liberarse de las obligaciones

que le han impuesto, necesitó la ayuda de una muñeca diseñada por el hombre. Así que la mujer, para poder ser dignificada necesita la ayuda, no solo de un objeto, sino que de un objeto creado por y para uso del hombre. Pasaremos a la teoría feminista, la cual está muy relacionada a la teoría deconstructivista, pues gracias a esta hemos conseguido todos los supuestos que iremos mencionando. En primer lugar, al describir a la muñeca por primera vez lo que mencionan, lo que consideran más importante mencionar, son los atributos físicos que pueden tener, la mujer sólo importa en tanto a su físico. Reducen a la mujer al simple objeto de deseo de los hombres, aunque este puede variar, las muñecas pueden adaptarse a todos los gustos, cosa que las mujeres no. Las Plastisex tienen una garantía de uso de unos diez años «duración promedio de cualquier esposa». La esposa puede durar este mismo tiempo siendo útil para el hombre, sin embargo la única manera de deshacerte de ella, pero nuestras Plastisex no, puede tenerla los diez años y después desecharla sin ningún problema, plantea la idea de la mujer como algo desechable. «Va provista de un dispositivo que no puede violar más que usted mismo, el himen plástico que es un verdadero sello de garantía». El uso de esta palabra en específico, podría seguir por dos ideas: El violar como “violar un sello o una garantía” Que retoma la idea de la mujer como objeto, que si su sello está roto, si ya ha sido usada pierde valor. La otra idea, el violar como el acto sexual, nos indica que los hombres pueden imponerse ante la mujer y abusar de ellas, pues este es su derecho. La mujer simplemente debe dejarse pues como objeto le debe placer al hombre. Sobre las muñecas, dice que su uso asegura la salud y el bienestar de cualquier hombre. Por uso podemos inferir que se refiere al acto sexual, entonces ¿Dónde queda el bienestar y la salud de la mujer? No lo menciona en ningún lado, pero no duda en hablar sobre el bienestar de las muñecas, a las

que se les debe dar un mantenimiento mínimo. A las mujeres no, pues para mantener a una mujer, en cualquiera de los ámbitos de la salud, de la economía, de lo emocional, requiere un esfuerzo de los hombres. Las mujeres son complicadas, por lo cual el hombre prefiere a las muñecas. En los últimos párrafos del cuento, empieza a referirse a los beneficios que estas muñecas traerán para las mujeres y señala que ahora que las mujeres no deben cumplir su papel de objetos «instalarán para siempre en su belleza transitoria el puro reino del espíritu». La mujer de antes solo existía para ser bellas. Por si fuera poco, para esta única cosa que existían, es algo transitorio, no siempre serían bellas de todos modos, cosa que las muñecas si eran. «En lugar de mercancía deprimente, costosa o insalubre, nuestras prójimas se convertirán en seres capaces de desarrollar sus posibilidades creadoras hasta un alto grado de perfección» Según el anuncio ¿Quién impedía a las mujeres lograr este grado de perfección? Los hombres. No solo están diciendo que la mujer no ha sido ninguno de lo que han usado para describir a la nueva mujer libre, cosa que nunca se molestaron en averiguar, sino que la única razón por la que no pudieron serlo fue porque los hombres las mantenían como sus Platisex®. Bibliografía Arreola, J. J. (s.f.). Anuncio. Obtenido de Ciudad Seva: https://ciudadseva.com/texto/anuncio/ Foucault, M. (1992). El Orden del Discurso. (A. González Troyano, Trad.) Buenos Aires: Tusquets Editores