La Verdad Es Sinfonica [PDF]

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Zitiervorschau

La verdad es sinfónica INTRODUCCIÓN El autor nos va conduciendo a traves de una estructura esquemática su reflexión en torno a la figura de la Verdad de la cual, avanzando en la reflexión llegamos al Dios que se comunica en su Palabra, la cual se personaliza en Jesucristo, y así, vamos conociendo como a través del pluralismo avanzamos hacia su conocimiento más perfecto. ESTRUCTURA Primera parte Breve panorámica del pluralismo teológico 1. 2. 3. 4.

Israel Dios y su Palabra Jesucristo, Palabra de Dios El Tú como parábola y camino

TEMÁTICA 1. ISRAEL Dios, que es la verdad por antonomasia, es aquel que se puede determinar a sí mismo por su libertad, pero posee una libertad que no podemos encerrar en conceptos. Este es un Dios que se manifiesta pero que también actúa en la vida de su pueblo. En Dios su decir y su actuar se corresponden. Así, es en la pluralidad de sus acciones, palabras, etc. mediante el cual es pueblo de Israel va desvelando el misterio de Dios y lo que dará paso a comprender el designio más grande de su manifestación: la encarnación.

2. DIOS Y SU PALABRA La palabra de Dios tiene un destinatario. Cuando decimos que un dios habla encontramos que este dios tiene que renunciar algo de sí mismo. A un dios se le reconoce en sus acciones y así se le da un nombre. Quien conoce el nombre de Dios conoce su esencia y puede dominarlo. ¿Pero puede ser posible esto? Cuando Dios da su nombre da uno determinado, pero no determinado por otro sino por él mismo. A Dios lo podemos conocer, pero no apresar. Dios dirige su Palabra, e incluso a través de mensajeros, y en ella descubrimos quién es Dios más no qué es. A través de la fe podemos entender de alguna manera la Palabra y el actuar de Dios, precisamente es esta autocomunicación la que identificamos con el amor.

Luis Enrique Flores Santiago III de Teología

3. JESUCRISTO, PALABRA DE DIOS Jesucristo es la Palabra de Dios, es una Palabra libre, que nos muestra lo que es desde la eternidad: bondad y amor. Es el Jesucristo donde radica la medida de la distancia y de la proximidad de Dios al hombre, nos muestra la relación entre el Dios absoluto y el hombre limitado. Por esto nos podemos hacer la pregunta de si es posible conocer a Dios por Jesucristo y aprehenderlo, hacerlo nuestro. Por una parte sí, porque Dios quiere hacerse cercano, ser tocado, oído y visto. Pero tambien es un no, porque al ser el mismo Dios, de naturaleza divina encarnado no es cualquier hombre. Podemos hacer muechos estudios y acercarnos a la persona de Jesucristo para así llegar al Padre, pero jamás podremos abarcarlo totalmente, esto sería una tarea inagotable.

4. EL TÚ COMO PARÁBOLA Y CAMINO En el encuentro con Jesucristo se nos revela como un “tú”, que, a pesar de que podemos encontrarnos con él de diferentes maneras, siempre será un misterio inacabado de comprender. Cuando vamos al encuentro del otro es inherente que queramos conocerlo, pero en este intercambio siempre queda la libertad del individuo de que se deje conocer y se abra desde su intimidad. Es en esta relación con el prójimo: otro, en la que vamos desvelando y comprendiendo el misterio de Dios en Jesucristo. Así la relación con Jesucristo como prójimo, hombre de nuestra naturaleza no debe de perder de vista el comprender que posee las dos naturalezas, humana y divina. Por lo tanto, hasta sus acciones más humanas van impregnadas de la gracia divina. CONCLUSIÓN La desvelación de la Verdad de Dios, que se va dando paulatinamente, va acompañada de diferentes expresiones y reflexiones que se van conjugando en la relación del Hombre con Dios. Así encontramos que gracias a este pluralismo vamos avanzando en el conocimiento de la intimidad de Dios que, a pesar de ser misterio, vamos comprendiendo y conociendo, no por nuestra iniciativa, sino por la acción de Dios que se hacer hombre y se concretiza en la persona de Jesucristo quien nos revela al verdadero Dios encarnado en un verdadero hombre sin dejar ninguna de sus naturalezas a un lado.

Luis Enrique Flores Santiago III de Teología