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Asignatura: Liderazgo y técnicas de supervisión. Profesora: Hilda Feliz Grupo: 2079. Tema: Aplicando lo aprendido 1.5
Fecha de entrega: 14/5/22
Instrucciones: Después de analizar los planteamientos de Raúl Maestres, coach ontológico, en su artículo “¿Quién necesita un jefe tóxico?”, sobre las patologías de los jefes, comparte si has tenido algún jefe con esas patologías, ¿cómo se puede lidiar
con situaciones similares?, Si estuvieses en un puesto de gerencia, ¿qué harías para evitar esas patologías? Comparte tus argumentos. Respondiendo el primer enunciado, lamentablemente sí, una vez, específicamente hace un año tuve a un jefe ligeramente tóxico. Sin ánimos de victimizarme, este personaje era bastante rudo a la hora de solicitar soluciones a problemas o asignar tareas, lo cual generaba en mí una gran frustración, en especial en el momento de presentar nuevas propuestas o emitir mi opinión, sentía una gran desvalorización a mis habilidades y trabajo, de su parte. Luego de leer el artículo y sin ser una profesional en la salud mental, puedo notar que las características que encajaban a la perfección con mi ex jefe eran las de un líder narcisista, ya que el caballero constantemente desvalorizaba el trabajo de los demás, con la intención de siempre quedar por encima de todo el equipo. Para lidiar con este tipo de situaciones, como bien lo dice el artículo (además de que yo lo considero bastante acertado), es nunca contradecir a este tipo de personas, ya que un jefe narcisista jamás admitirá un error, incluso si le pagasen por ello; por lo tanto, lo más inteligente para un empleado o subordinado sería ir poco a poco construyendo una relación de confianza con su superior, además de tener muy en claro nuestro valor como trabajadores y personas, intentar no dejarnos afectar por los juicios de un jefe que claramente es una persona disfuncional en su ámbito laboral y probablemente personal. Ya para concluir, si yo ocupara un puesto como gerente en alguna organización, para evitar alguna de estas patologías seguiría las siguientes recomendaciones: • • •
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Acudir periódicamente a citas terapéuticas y psiquiátricas con profesionales de la salud mental. Procurar que mi empresa precise de un ambiente laboral saludable. Realizar reuniones mensuales con el equipo, buscando como objetivo la evaluación de nuestro desempeño, intercambio de ideas, quejas o recomendaciones desde la cordialidad y el respeto. Incentivar con estímulos positivos a todo aquel que esté realizando un buen trabajo. Mantener los pies en la tierra sin dejar de lado valores como la humildad, el respeto y la empatía. Tener en claro que soy una líder, una persona que los demás siguen por convicción propia y no una tirana.